Cadena de Mentiras (#5 Odio a las Chicas)

Capítulo 12

Shawn:

La combinación de suavidad y de algo dulce recorre mi boca, los labios que pruebo son delicados al punto de llamarlos vírgenes por la respuesta, resultan tan inexpertos , pero sobre todo son agradables y el beso es de aquellos a los que no quieres darle un fin.

Aprieto las mejillas de la dueña de esa boca y la aprieto más contra mí, ella me deja guiarla y luego siento que la luz que nos cubría va hacia otra dirección.

—¡Vamos con la siguiente pareja!

En la leve oscuridad nuestras bocas se separan y nos miramos a los ojos, intento decir su nombre y de pronto ella se aparta, dejándome confundido.

A los segundos llega Freissa, pero no el chico que la acompaña a Dayanne.

—¿Me perdí de mucho? —Pregunta Freissa en un tono ¿coqueto?

Dayanne niega. —Ya empezó.

Y así todo el concierto se la pasa observando el escenario, se emociona y me saca una u otra sonrisa, pero no me mira, ya no lo hace.

(***)

¿Por qué actúa como si no hubiera pasado nada?

No me presta atención y yo no puedo dejar de mirarla, Dayanne ya lo ha olvidado, está claro y sabiendo eso no logro entender por qué yo si tengo que pensar en lo que paso.

No me lo quito de la cabeza.

—¿Tienes frio? —Le pregunto al ver frotar sus manos en sus hombros.

Al fin me mira.

—Que te preste su chaqueta. —Ofrece Freissa.

Dayanne mira a su amiga y luego a mí, Freissa hace un gesto para que lo haga, empiezo a quitármela, pero me quedo a medias, cuando la persona que se ha perdido la mitad del concierto se lo arroja y Dayanne logra atraparla, volviéndose hacia su cita.

—Gracias. —Se ve confundida.

Arqueo una ceja en dirección al tipo, pero antes de hacer la pregunta, Dayanne lo hace.

—¿Dónde estabas? El concierto esta por acabar.—Suelta con un tono fastidiado.

—Fi a fumar y odias que lo haga frente a ti. —Sonríe el.

Dayanne rueda los ojos. —Que considerado.

—Además te dije que odio las baladas.

¿Realmente alguien como él es su tipo?

(***)

—¿Me dejas llevarte a casa? —Le pido a Freissa y ella mira a su amiga, parpadeo dirigiéndome hacia ella. —Te llev...

—Yo la llevare . —Se adelanta el sujeto y mi mirada se instala en el brazo que a rodeado a Dayanne y ahora le toca el hombro.

—¿Seguro? Creo que es mejor si yo la llevo. —Me ofrezco.

Frunce el ceño y cuando me acerco a tomarla del brazo, ella habla causando dolor en mi pecho. —Iré con él. Iré con Lumer.

Nos mira a ambos.