Solo hay una cosa a lo que Elias Brown le teme; el abandonó.
A los quince años perdi la persona que mas amaba, y mi mente solo me repite una pregunta ¿para que seguir...? No logro encontrar la repuesta, ¿sere muy cobarde para hacer algo? ¿Que esper...
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Siento que dormi por dias, giro y veo que Dash no esta, recuerdo habernos dormido juntos o al menos estaba conmigo, hasta que me dormí.
Trato de no pensar cosas malas y me levanto
—Hola... por segunda vez —dice sonriendo.
—Me gustaría despertar y verte junto a mi —me acerco abrazandolo
—Anotado para la próxima —me besa el cabello— estaba preparando el almuerzo.
—Podemos pedir algo —murmuro.
—Soy chef... por si lo olvidas —me mira— además me gusta cocinarte.
Reparte besos en mi cuello hasta llegar a mis clavícula y sube hasta mi boca, paso ambas manos alrededor del cuello pegandome mas a su cuerpo.
—Te extrañe, Dashton —susurro.
Me mira sonriente.
Nos besamos lentamente, sin prisa. Me guia al cuarto con su cuerpo recostandome sobre el colchón y se coloca entre mis piernas. Le ayudo a sacarme la remera y comienza a besar cada parte de mi cuerpo, suelto un jadeo cuando muerde suavemente el cuello.
—Eres hermoso —dice en un suspiro— no me alejes mas, por favor.
Asiento repetidas veces, me sujeta de las caderas pegandome mas a el haciéndome sentir su erección
—Te extrañaba —susurra en el oído.
—Ya lo note —se ríe, cuanto extrañaba eso— ¿de nuevo a la cama?
—¿Prefieres el sillón? —arquea ambas cejas— donde quieras, niño.
—El cuarto está bien.
Estoy acostado sobre Dashton, mientras el me hace caricias en el brazo.
—Tengo que ir atrabajar.
—mmm... ¿ya?
—Ya —le doy un beso en la mandibula, trato de levantarme pero no me deja— tengo que ducharme. Se me hace tarde
—¿Puedo ir contigo? —lo miro.
—Voy a trabajar, no a pasar el rato.
—Hablaba de la ducha —sonríe perversamente.
—Otro día, estoy con el tiempo justo.
—No seas malo —se coloca encima basándome dulcemente
—Por favor, Dash —jadeo cuando comienza dejar besos cada vez mas abajo.
—¡Agh! Esta bien.
—Te lo recompensare mas tarde —digo levantandome
Sonrie enormemente y me suelta.
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