Capítulo IV.

27 2 0
                                    

-¿Estás seguro que vendrá?- preguntó Wooyoung frunciendo su ceño con duda y San asintió- tengo hambre- admitió tocando su estómago.

-también yo- aceptó con una mueca- Creo que esperara que su esposo se duerma para poder venir- murmuró dudoso y Woo asintió, viendo la hora en su reloj- ¿Qué hora es?

-Son casi las 11 de la noche- afirmó con un suspiro- cariño, tengo hambre- advirtió con seriedad y San le miró intenso.

-No se te ocurra hacerme algo- ordeno un poco asustado y Woo rodó sus ojos.

-Sabes que no- prometió bufando- pero siento que me voy a desmayar, ni siquiera tengo fuerzas para moverme, ¿Hace cuanto que no probamos carne?- se quejo.

-Casi una semana- recordó San con una mueca- no sé por qué tiraste la que nos había quedado del viejo- regaño.

-Comenzaba a apestar- recordó Woo- tuve que quemarla con el cuerpo.

-Pudimos comerla esa misma noche-

-Ese era el plan pero tenias ganas de tener sexo y la carne solo se arruino- se defendió del posible regaño de su novio.

-¡Entonces detenme cuando quiera tener sexo y aliméntame!- ordenó y Woo rodó sus ojos esperando que San cayera en cuenta de lo que decía- bien, fue mi culpa, lo siento- bufo conociendo lo intenso que solía ponerse cuando no tenían sexo seguido.

-No te estoy culpando, pero en serio estoy muriendo de hambre y...

-Shh, Woonie, ahí viene- aviso cubriendo su boca, las cejas del mayor se fruncieron sin escuchar nada hasta que segundos después, las pisadas se hacían cada vez más cercanas-

-¿Hola? ¿San?-

Ambos sonrieron y revisando rápidamente que la mochila estuviera al lado fue Wooyoung quien abrió la carpa, dejándola pasar-

-Noona, creí que no vendrías- murmuro San con sorpresa- ya estábamos por dormir. Pasa, pasa, siéntate con Woonie- pidió con una sonrisa, Wooyoung reviso hacia afuera antes de cerrar, asegurando que su carpa era la más alejada y nadie había visto a la mujer ingresar con ellos.

-Tuve que esperar que Daeyeon se durmiera- admitió ella con una sonrisa de disculpa y San sonrió divertido cuando su novio le miró con cansancio, había atinado en la excusa- y su carpa está demasiado lejos, caminé casi media hora, ¿Por qué acamparon tan arriba?- preguntó con curiosidad.

-A Sannie le gusta mucho tener sexo y es ruidoso, creímos que podríamos molestar a alguien si estábamos cerca de los demás- explicó y las mejillas de la mujer se colorearon rosa al asentir. Bueno, de alguna manera tenían que sacar el tema.

-¿Cómo sigue tu pie?- preguntó con amabilidad y él sonrió.

-Ya mejor, ya puedo ponerlo en el suelo sin que me duela, aunque sigo sintiendo un poco de malestar- confesó y la mujer sonrió.

-me alegra-

Luego de aquello, los tres quedaron en silencio, Miyeon se notaba indudablemente nerviosa por lo que iba a suceder y ellos dos solo se miraban comunicándose con los ojos, sin saber si hacerle el último favor o simplemente deshacerse de ella en ese momento.

San ganó la discusión visual.

-Y bien, noona. Dinos, ¿Qué es lo que te gustaría probar con nosotros?- preguntó sin filtro y ella le miró asombrada, totalmente nerviosa sin saber que responder-

-Vamos noona, no tenga vergüenza con nosotros. Somos demasiado liberales con respecto al sexo. Si algo no nos parece se lo diremos- ánimo Wooyoung de igual manera, queriendo acabar con el asunto rápido.

🅃🄷🄴 🄱🄾🄾🄺: ᴏᴘᴇɴ ʏᴏᴜʀ ᴍɪɴᴅ!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora