"¿Pero porque los baños apestan tanto?"
Bueno, ciertamente no era por un descuido de los estudiantes, era debido a que nadie sabía una gran verdad, una qué pasó hace mucho y con la cual debían lidiar ahora, en forma de cosas extrañas que estaban pasando en la academia.—2,5.6,5,3,7,8.4,4,7...
El sonido molesto de la tiza, se escuchó aumentar cuando el maestro comenzó a hacer una barra, teniendo que armar líneas rectas, a su vez dejando una tiza casi sin punta.
Nadie entendía nada, pero por suerte era un tema nuevo, ahora solo habrá que preguntar a los inteligentes que rayos estaban haciendo.—¡Light! Oye...Light.- te ladeabas hacia el, sin embargo no te respondió, pese a que si te había escuchado.
Estaba reposando su rostro sobre su mano, se veía como todo un galán, incluso una rubia lo veía desde lejos, convencida de que sería suyo.
Al no obtener resultado, giraste en dirección a tu otro amigo, Ryuzaki. Ese mismo, estaba más lejos.
No había esperanza de que te escuchara siquiera.Y el resto ni hablar, Mihael,Nate y Mail estaban en otra clase. Así que no encontrabas con quien podrías distraer tu aburrimiento.
—Y finalmente, deben responder esta pregunta, recuerden que es libre. Pero los calificaré de acuerdo a la explicación que den.- ese hombre ya estaba cansadísimo, con la poca energía que le quedó, camino hasta su escritorio.
Irónicamente, el destino decidió molestarlo aún más.
El sonido de murmullos le hizo voltear, eran más obvios por el silencio en clase.
—¿Se puede saber que les causa tanta intriga? ¿señoritas?- dirigió su atención a unos alumnas, que estaban pasándose un grueso bollo de papeles viejos.
—N-No es nada. Solo le prestaba mis anotaciones profe.- concluyó una chica de pelo negro. La segunda simplemente miro algo asustada, la escena tan típica.—Bueno, entonces no les molestará que les pida eso.- se paró frente a ambas recogiendo el bollo, después lo sujeto con poco cuidado, llevándoselo a su zona de trabajo.
Otro botín escondido entre las garras de un amargado caballero, ahí también estaba la consola de Mail, pues ese había sido su anterior salón, antes de que cambiaran bruscamente las ubicaciones. Algo sobre colocar los salones "estratégicamente".Miraste con indiferencia, pero ciertamente reconociste unas imágenes entre los papeles, parecían de esas que salen en películas de terror. Fotos de escenas del crimen, baños sucios y tal. Quizá estaban escribiendo para el periódico escolar, o hasta para el de chismes.
A la gente le encantan los títulos amarillistas, o al menos algo que de miedo y pueda ser coronado como "la historia del siglo; el baño embrujado".
Aunque fueron solo simples suposiciones tuyas, algo te decía que esas dos estaban metidas en algo.
Hacía días que se encerraban en el salón, corrían a los demás en la hora de limpieza, y decían que podían recoger todo ellas solas.Intentaste perseguir con la mirada al maestro, podría ser que examinara la evidencia, con su reacción podrías leer que clase de información decían esos misteriosos
Pero ese viejo estaba tan cansado, que solo aventó el bollo en el escritorio, se sentó y comenzó a leer una aburrida obra de Shakespeare, "Las alegres comadres de Windsor" leía en el título. Aunque el hombre no era, en ningún sentido de la palabra, un comediante.
—¿Algún problema?- dijo mirándote, su rostro seguía apuntando a su libro, no dejaría la lectura. Incluso a distancia considerable, era capaz de sentirte viéndolo.—No profesor. Solo pensaba que me gusta más "Los dos Hidalgos de Verona".- escaparte de ese viejo era típico de ti. Tan solo responder con astucia lo devolvió al libro, siguió leyendo con vigor, en su rostro se veía como vivía cada momento de la lectura.
—Bien hecho.- susurro tu compañera. Tu solo le devolviste la reacción.[...]
—Recuerden terminar su libro, es ahora o nunca.Les podrá sumar puntos para su calificación, no quiero que fallen en las preguntas orales o se las verán duro.- limpio a las prisas la pizarra.
Un peli-negro salió despacio, incluso tardo más tiempo en recoger sus cosas, siempre hacia eso para que todos se fueran y no tuviera que pasar entre el cúmulo de personas.
Y Light salió como siempre, rodeado de amigos. Incluso si sus mejores amigos eran los mismos de siempre, ignoraba el hecho de que veía a todos excepto a Ryuzaki,Nate y Mihael, como ignorantes.
"Sigue fingiendo Yagami, te conocemos bien".
—Hola Ryuzaki, ¿qué te pareció la clase?- el rostro de Ryuzaki se dejó caer flácido sobre si.
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Death Note: ¡One shots, y más!
UmorismoPequeñas historias random de los personajes de Death Note. Se aceptan pedidos. Contenido explícito permitido, en caso de que deseen algo específico, háganmelo saber. Disculpen incongruencias en las palabras, o faltas de ortografía, en las revisiones...