Hola, traje a Ryuk como el galán de hoy.
Disfruten sucias, admitan que les gusta este señorón gótico.♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡♡
En otro camino paralelo, recogiste la libreta. Lo que te llevo a encontrarte con un Shinigami por primera vez.Quizá Ryuk parecía estar enojado todo el tiempo, en realidad si pudiera gesticular, estaría con cara de sorpresa cada vez que le demostrases tus capacidades. Y una expresión de aburrimiento cuando no hacías nada en el día, Ryuk solo volaría por ahí, un poco fastidiado, un poco relajado.
Al empezar como extraños, a veces no dirigían la palabra al otro, pero tú naturaleza de hablar sola, hizo que Ryuk tuviera que interrumpir con sus comentarios. Así las cosas mejoraron, ahora Ryuk parecía la voz de tu cabeza, diciendo y señalando acciones de otros, eso también te ayudaba para pensar mejor tus decisiones.
Finalmente se volvió un compañero, aprendiste que un Shinigami podía llegar a tener mucha más empatía que un humano. Ryuk sentía lástima, pena, ira y muchas emociones humanas (qué su cara no fuera capaz de revelarlo, lo hacía aún más interesante).
"Que interesante, el tener una conversación tan amena con un humano normal. Sin que este asustado, o hable desde sus prejuicios. Eres extraña. No está mal".
Escucharlo decir eso, te hizo recapacitar sobre ti misma.
Tus mejillas estaban rosadas, en verdad podría estar haciéndote un cumplido, incluso si Ryuk te contó que no tenía ninguna posición respecto a nada.♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎♥︎
—Oye Ryuk. Te voy a decir algo importante.- envolviste tu bufanda en tu cuello, tomando asiento en la banca, estaban en la parada del autobús.
—¿Qué se te ocurrió ahora?- Ryuk se interesó, se puso de cuclillas sobre el suelo, a tu lado.—Creo que me gustas un poquito.- susurraste, pero ladeando tu cuerpo hacia el.
Hubo un niño que gritó a lo lejos, igual una mujer que cayó al suelo y dispersó su café sobre el, unas llantas ruidosas rechinaron, el autobús arribó.
No dijo nada, podría ser que tampoco pensó en nada especial para responder, solo miro como subías al pedazo de metal, aquel en el que iban de casa a la escuela, casi cada mañana.
Se paró tranquilamente, subiendo junto a ti.
—Que curioso. No sabía que humanos y Shinigamis podían enamorarse entre sí, ni solo uno del otro ni mutuamente.Mirando por la ventana, la nieve hoy parecía incluso más blanca.
—¿Eso que significa?
Sentiste su mirada sobre ti, volteando lentamente, fue cuando visualizaste su curvada y gran figura, estaba a contra luz.
—Quizá siento algo similar.- admitió, pese a que no poseía expresiones humanas, tenía un rostro fijo, percibiste la tensión de su postura y músculos.
Sin decir nada, se sentó a tu lado.
Esta vez no miro nada especial, parecía estar buscando un pretexto para prestar su atención a la nada, sería por estar nervioso.—¿Hoy tocarás? Me gustaría que también pudieras cantar.
Sonreíste como una tonta, al parecer Ryuk lo recordó.
—Posiblemente podría, si el cantante se lesionara las cuerdas vocales. Solo podemos soñar con eso.Ryuk comenzó a reír, un comentario tan malvado le hacía recordar quien eras.
Sujetaste la funda de tu guitarra, paseando tus manos por el tejido. Esta vez tu mochila yacía sobre el suelo, abandonada por que obviamente, preferías a tu preciada guitarra.
Sería tu idea, pero los llaveros que colgaban de tu mochila, quedaban demasiado a fuego con el atuendo gótico de Ryuk. Incluso inconscientemente, habías decorado tu funda con un dibujo de un Shinigami, tan solo jugabas con estampados, pegaste ese sin pensarlo demasiado, cuando quisiste quitarlo ya no se podía.
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Death Note: ¡One shots, y más!
HumorPequeñas historias random de los personajes de Death Note. Se aceptan pedidos. Contenido explícito permitido, en caso de que deseen algo específico, háganmelo saber. Disculpen incongruencias en las palabras, o faltas de ortografía, en las revisiones...