«The arts teacher» Taekook | ©

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Chapter VIII | Okay, ignore me.

Es comprensible que llegue a doler la indiferencia de una persona que conocemos desde hace mucho tiempo, de las personas más cercanas y de las que más confiamos, pero ¿De alguien que hace menos de dos meses se conocen? ¿Será posible? Para Jeon Jungkook claro que era posible, se había encariñado con su profesor durante todos esos días. Llamenme loco pero la mirada que le dedicaba Kim Taehyung le hacía confiar en que él no era el único siendo atraído por el otro, no. Él estaba seguro por la manera en la que lo trataba y la delicadeza con la que lo tocaba con cualquier pretexto era única y especial.

Estaba totalmente seguro de que algo podría surgir.

Los días pasados habían estado coqueteando sutilmente, miraditas, sonrisas y piropos lindos o que hacían sentir bien al otro. La emoción que sentía Jeon cada que su profesor de artes le sonreía no la podría explicar, las mariposas de su estómago revoloteaban, pero sabía que eso estaba mal. Solo era atracción y quería ser follado duramente en cualquier parte que Kim Taehyung deseara, pero no contaba con que la indiferencia le doliera.

Su emoción se fue por la borda en el momento que Taehyung comenzó a ignorarlo, comenzó a no mirarle de la manera en la que lo hacía anteriormente y ya no volvía a decirle cosas bonitas como: te queda muy bien esa camisa, ese color se te ve increíble, que linda sonrisa, me encanta como te ves hoy, entre otro sin fin de comentarios que hacían que nuestro adorado joven aumentara en ilusión.

Ignorar, comenzaba a odiar esa palabra.

Ya habían pasado tres días desde el suceso. Tres días en los cuales no habían entablado una conversación normal sino era para responder el paso de lista o preguntar una duda que tuviera respecto a las actividades. Tan frustrante.

Jeon Jungkook se encontraba frente a su ordenador, había decidido entretenerse mirando videos random para que su cabeza no siguiera dándole ideas erróneas respecto a la situación de su profesor, ya que en estos días lo único que ha pensado es que él no es lo suficientemente bueno para estar con Taehyung, quizá es feo, quizá su voz no le gusta o quizá gusta de alguien más.

Caracoles y más caracoles hervidos.

El video avanzaba, pero sería mentira si dijera que había puesto toda la atención del mundo a él, ni siquiera sabía qué video había puesto. Suspiró cansado mientras desviaba su mirada a una nueva notificación en su teléfono móvil.

—Te quiero listo en 15 minutos.

Negó con una leve sonrisa. Su mejor amigo siempre le ayudaba a subir el ánimo invitándolo a salir a tomar o comer algo. Decidido por salir con Hoseok levantó su pesado trasero de la cama comenzando a vestirse de manera casual. Lo que siempre vestía. Pantalón gris oscuro quedándole flojo al cuerpo y bolsas a los costados, playera del mismo color, pero de una tonalidad más cálida y finalmente sus tenis negros con blanco. Comodidad, ante todo.

Pasó el tiempo que su mejor amigo le había ordenado, cuando menos lo esperaba ya estaba tocando el timbre. Se colocó perfume rápidamente para así tomar su billetera y celular para por fin salir de casa.

—¿Qué te gustaría hacer? —preguntó entusiasmado Hoseok. Este poseía un pantalón verde con una playera negra, sobre este portaba una bolsa donde cargaba todas sus cosas. Billetera, lentes, teléfono y cualquier otro accesorio que le pueda ser de utilidad.

El amigo que tiene todo lo que necesitas en el momento que lo necesites.

Jungkook negó, en esa ocasión no tenía ni idea qué era lo que quería. Hoseok palmeó su hombro —Vamos primero por una malteada y después veremos a dónde vamos, pero de que te distraes te distraes amigo —comentó con una gran sonrisa en su rostro.