«The arts teacher» Taekook | ©

⬷ Chapter XVIII ⤐

Chapter XVIII | He will be jealous, you'll see.

Tener sexo sin compromiso es algo que muchas personas desean, pero se contienen gracias a los malos comentarios de las personas o lo que podrán decir al enterarse. Una de las grandes ventajas de esto es que no se está atado a una sola persona y se puede experimentar con más personas, escenarios y quizá, algo más.

El qué dirán siempre existirá en las mentes de todo, pero si solo por un momento se pusiera ello en segundo plano habría personas felices.

Jungkook al inicio creyó fielmente que solo deseaba a su profesor de una manera carnal, algo meramente físico, que, con el paso del tiempo cambió de opinión al gustarle el joven de una manera romántica. Ambos jóvenes pudieron considerar el hecho de solo tener sexo en una que otra ocasión, pero lo que sus corazones y cuerpos les mostraron la noche anterior fue que no solo tuvieron sexo, sino que existió esa hermosa conexión que hace triunfar las relaciones.

Así que ¿Por qué no arriesgarse un poco más por ello?

Taehyung se encontraba mirando detenidamente cada movimiento que el menor hacía mientras permanecía en silencio sobre la cama. Este iba de un lado hacia el otro acomodando sus pertenencias en la habitación que le había proporcionado al llegar al departamento. Jungkook por su lado sacaba la ropa de las maletas comenzando a organizarla dentro del armario vacío que la habitación tenía, sonreía porque le había gustado mucho: colores cálidos, espacios amplios y no se diga del gran ventanal hacia el exterior.

—¿Estás tan feliz? —preguntó sonriente el mayor sin apartar la vista del hermoso joven frente a él.

Este asintió con rapidez sin mirarle —Claro, en este momento seguiría buscando lugar sino es que ya en la calle con mis cosas —confesó agradeciendo con una mirada tierna.

El mayor negó restándole importancia. Para él era perfecto que su chico estuviera justo en la habitación al frente de la propia, eso significaba que podría visitarlo cada que quisiera o deseara hacerlo. —Puedes quedarte el tiempo que sea necesario sin ningún compromiso —al decirlo se acercó al menor depositando un beso en la frente para así salir directo a su habitación dejando al menor sonriendo de oreja a oreja. Comenzaba a amar ese revoloteo en su estómago junto con esa electricidad que recorría todo su cuerpo.

A la mañana siguiente ambos jóvenes se encontraban desayunando un par de tostadas con mermelada de fresa y un poco de café, las mañanas comenzaban a ser más frías y eso caía muy bien a sus helados cuerpos. —Jungkook —dijo el mayor atrayendo la atención del contrario.

—¿Sí? —respondió levantándose a dejar el plato sucio en el fregadero. Ya habría tiempo para limpiar.

—Puedes irte conmigo en el auto, no hay ningún problema —comentó a la vez que le miraba con curiosidad, no sabía si aceptaría ir con él desde un inicio. Este pareció pensarlo por algunos segundos.

Finalmente negó —No es necesario, Hoseok dijo que pasaba por mi —admitió haciendo que el contrario asintiera en aprobación. Eso significa que no se iría solo ni estaría preocupado.

Los minutos pasaron con rapidez y cuando menos lo esperaron Jungkook se encontraba frente al edificio esperando a su mejor amigo lo cual no tardó en llegar. Al hacerlo estacionó el auto a su lado y bajando el vidrio se inclinó para verle —Jeon —dijo saludando, fingiendo estar serio.

Esto le causó risa al menor y entró rápido al auto —Tienes preguntas ¿Verdad? —dijo abrochando el cinturón de seguridad. Su mejor amigo asintió mientras colocaba un poco de música dejándola en un volumen adecuado para poder llevar la conversación.