Una Ilusión Más © <SCC>

Capítulo 18

La alarma comienza a anunciar un nuevo día en este pueblo, un día más de recuerdos perturbados y despedidas desgarradoras, ¡no me quiero ir!

—Rescatame Shaoran —susurró, se me escapa un sollozo, últimamente mantengo sola en casa, no se si es costumbre o cada vez que se  viene a quedar Shaoran o Tomoyo no la siento tan abrumadora la soledad, pero en estos instantes la siento abrumadora.

¿Qué más me puede pasar?

—Cuál será mi paso a seguir, no quiero ir al colegio ya— le hablo a la nada. Me pare de la cama con desgano, el año ya lo había  ganado, mis promedios me dieron todo la nota que necesitaba.

Tomé una ducha rápida y me acomodé el uniforme en su lugar, tomé mis cosas y salí del apartamento.

Voy a paso lo más lento posible, llegaré para la tercera hora, el receso también lo pasaré sola.

Al llegar a la preparatoria, ingresé por un lado, me hace una leve  reverencia el guarda, ya sabe como soy, reí con ternura.

Hasta ese vigilante no lo quiero olvidar. Llego a mi lugar favorito, mis frondosos árboles de cerezos, tiro mi mochila a un lado y me acuesto en el césped, estudió una de mis manos como si fuera agarrar el árbol de cerezos.

—¡Qué lindo estás! Le digo al árbol, sonrió —Estás muy tupido y rosadito, ya mañana abril. ¡Cómo pasa el tiempo!

Comienza a sonar mi móvil. —Habla Sakura.

—Hola mi cerezo ¿Cómo estás? —suspiro.

—Bien Eriol  ¿Y tú? — él ríe con diversión, pongo los ojos en blanco.

—Cuánta emoción, ojo me contagia —ambos reímos, me siento en forma de mariposa — Cerezo, en un mes, es lo único que pude hacer.

—Así que en un mes —suspiro, sonrió con tristeza —¡Listo!

—Lo siento —niego como si él me viera, mis lágrimas comienzan a salir —No llores, se que lo estás haciendo y en silencio, eso me mata más.

—No te preocupes, después hablamos. Te quiero — cuelgo la llamada. Me limpio las lágrimas, reviso la hora y comienzo a caminar hacia mi siguiente clase

Al subir las escaleras me tope con Shaoran, él me abraza con fuerza, por poco y caemos escaleras abajo

—¿Dime que estás bien? ¡Dime que nadie te hizo daño! —abro mis ojos y lo abrazo, niego.

—Estoy bien, no te preocupes

—¿Por qué llegas a esta hora? —nos separamos, él me mira con una ceja arriba

—Me quedé dormida. —sonrió con nerviosismo.

—Detesto que me mientas, pero algo te lo hace hacer, Sakura, yo te voy a escuchar, no te voy a juzgar, juntos podemos buscar una solución. — me tiro encima de él y lo beso, cuanto quisiera pero no... Nadie puede contra los del concilio, ni siquiera Eriol o el mismo Clow.

Asiento y tomé su mano para caminar a mi salón, al dejarme me dio un beso e ingresó sin ganas a este.

Tomé mi asiento y miró hacia la ventana, me sumerjo tanto en mis pensamientos que no escuchaba cuando Rika me llamaba.

—¡Sakura, Sakurita! —me tomó del mentón y me hace que la mire —¿Todo bien? —estoy cansada de escuchar eso, quisiera gritarles y decirle..

"No , nada está bien, me iré y no quiero, ya soy nuevamente millonaria, ya no puedo manejar mi vida como quería, soy una de ustedes y hasta peor, ya los entiendo cuando no pueden comportas como desean"