Treat you better

Capitulo Nº28

Christopher POV'S

Las cosas al parecer no marchaban bien en casa de Nicole y eso me torturaba a mí también, cuando pasé por ella al instituto sentí la necesidad de abrazarla, pero no pude ya que ella me había dicho que se tenía que ir rápido, su padre la había estado presionando mucho con la idea de que debe regresar con el idiota de Aiden y eso era lo último que quería ella, pero eso hágale entender a Maximiliano Russell.

Quería a Nicole Russel con todo mi corazón y alma, desde el primer instante que la mire en el jardín supe que sería el gran amor para mí. Pero eso cambio cuando a mi padre le llenaron en la cabeza ideas locas y tuvo la gran decisión de mandarme a estudiar lejos del país.

Aunque yo negaba en irme él no tomaba mi palabra y eso me hacía sentir inútil ante él.

Y que esperaba si era un niño de diez años gritándole a su papá que no quería irse lejos de la ciudad que me miro crecer, mi madre no hizo nada, solamente llorar por mi partida a un país que no conocía.

Cuando tenía Quince tenía la necesidad de regresar a mi ciudad de origen, pero mi padre se volvió a negar, diciendo que tenía unos problemas con unos socios y que era mejor que me quede en Australia a terminar el instituto.

A los dieciocho ya no estaba en Australia si no en Estados Unidos en la ciudad de Cambridge estado de Massachusetts específicamente en Harvard University, tenía varias opciones para estudiar, pero tuvo que influir mi padre para tomar la carrera en administración de empresa, aunque ese no era mi fuerte obedecí, hacer amistades en Harvard era un poco complicado para mí, la gran fiesta de ingresados que la Universidad propagaba no era una novedad.

Conocí ahí por primera vez a Richard Camacho oriundo de mi ciudad natal que seguía la carrera de Derecho en Harvard y eso era bueno, un año después conocí a Zabdiel de Jesús quien también cursaba Administración de empresa y también era oriundo de mi ciudad natal, ya no era solo yo, si no éramos tres contando conmigo.

A los dos años estudiando en Harvard conocí a una chica, llena de locuras que me hicieron caer rendido a sus pies, mis amigos dijeron que ella no era para mí, y aunque tantos reproches me hicieron ellos terminaron de aceptar mi relación con Donatella.

Donatella Baker, una chica de 22 años que trabajaba en un club nocturno como Bar tender era la segunda chica que había cautivado mis ojos y llenado de expectativas hacia a mí.

Mi relación con Donatella iba genial, al quinto mes le había regalado una cadena de oro, algo que ella no lo quiso tomar, pero mi orgullo que se lo vea puesto pudo más.

Al noveno mes estaba con la loca idea de llevarla a un viaje, pero ella se negó por el mismo hecho de que tenía que trabajar, así que optamos por ir a la playa y pasarla bien.

Al año y tres meses mi relación que estaba perfecta se iba desmoronando y no sabía los motivos, Donatella siempre me ponía una excusa para no verme y eso era lo que me hacía ponerme tan duro y tomar como un desquiciado.

Al año y quinto mes la cosa estaba bien entre Donatella y yo, así que se vino a vivir conmigo, aunque mis amigos no estaban de acuerdo con eso, no me importo y ella se vino a vivir conmigo.

Cuando estábamos a punto de entrar al segundo año de novios, todo se derrumbó por la visita inesperada de mi padre, conocer a Donatella no le agrado y mucho menos enterándose que venía de una familia de clase media. Eso le había enojado y mucho

Al segundo año de novios pude sentir como mi corazón se rompía por primera vez y por la chica que amé por dos años, mirar tomar sus cosas y decir que se marchaba de mi lado y que no había vuelta atrás.