Llego a la empresa como todos los días, esta vez llegué un poco más temprano de la hora estipulada, así que decidí quedarme a platicar con Lis, la recepcionista, ella me comentaba que el chico que le gusta la invitó a cenar
- Supongo que aceptaste -le dije
- Sí -me dijo con emoción
- Que bueno, ya veras que todo saldrá bien, estoy casi segura que también le gustas a Alex
- ¿Tú crees?
- Si
Mientras platicabamos llega mi jefe
- Vaya, me alegra que ya no llegue tarde Marinette -fuerzo una sonrisa
- Buenos días señor -lo saludo con seriedad
- Buen día señor -saluda Lis amablemente, pero él no nos contestó a ninguna de las dos
- Señorita Liseth le pago para que atienda la recepción, no para que pierda el tiempo chismeando con mi asistente -Lis no dijo nada y dirigió su vista a su computadora- y a usted Marinette, le pago para que atienda mis asuntos
-definitivamente hoy sera de esos días, cuando ni él mismo se soporta- No creo que tenga nada de malo, platicar un momento -le dije y veo la cara de asombro de Lis tras escuchar mi respuesta
- No le pago para que ande platicando, la quiero en mi oficina en cinco minutos -dijo seriamente y se marchó
Me despedí de Lis y continué mi camino hasta la oficina, antes de entrar dejo mis cosas en mi escritorio, voy a la cafetería por el capuchino diario de mi jefe, y luego me paro frente a la puerta y la toco un par de veces
- Adelante
-Le escucho decir y obedezco- su café señor -digo y lo colocó frente a él sobre el escritorio
- Que sea la última vez que llego y usted está perdiendo el tiempo
- No estaba haciendo nada malo, es más, si ve el reloj, aún faltan tres minutos para la hora estipulada de entrada
- Lo peor del caso es que me quita autoridad frente a los otros empleados, que van a pensar ahora, que pueden hablarme como se les pegue la gana, ¡Pues no! Es la última vez que usted de habla de esa forma a solas o frente a los empleados ¡entendido! Lo único que causa es distracción, si quieren hablar, háganlo, esta bien, pero no en la empresa, no en horario de trabajo ¡está claro!
- Señor no se que le hicieron o que no le hicieron anoche, seguramente no le fue muy bien con su cita ¿o me equivoco?
- Es algo que no le importa, son asuntos míos
- Tiene razón, no me importa, pero hágame el favor de no desquitarse conmigo, ¡yo no tengo la culpa de que su chica no le haya cumplido! -digo y salgo de la oficina muy molesta
Poco después caigo en cuenta de lo que hice y de cómo le hablé, no estuvo bien, él es mi jefe, pero ya me cansé que siempre que viene de mal genio desquita su furia conmigo y no lo iba a permitir, no otra vez, se que estoy en la currada floja, a punto de que me corran, no quiero decirle que lo siento, porque no me arrepiento de nada de lo que dije, y quizá piensen que siento celos, pero no es así... o tal vez un poco. Detesto sentir esto, ya no quiero amarlo...
Mientras continuaba con mi trabajo, el teléfono suena, una lucecita roja parpadeaba avisandome que era mi jefe quien llamaba, presionó el botón para responder la llamada
- Si señor
- A mi oficina -dijo con un tono serio y cortó la llamada
Tome mi libreta, respiro profundo y toco la puerta, lo que tenga que pasar, que pase. Al instante me permitió la entrada
- Dígame señor
- Siéntese señorita
- No señor, no es necesario
- ¡Dije que se siente! -no dije nada y obedecí- ¿Tiene algo que decir Marinette?
- No señor
- ¿Esta segura?
- Sí -él quiere que disculpe pero no lo haré, en todo caso él debe disculparse conmigo, él desquita su enojo conmigo siempre
- ¡NO ES POSIBLE! -exclamó golpeando el escritorio con los puños y levantándose de la silla, sacándome un pequeño susto- usted saabe perfectamente que me debe una disculpa, o es que a caso no recuerda como me habló -solo lo observo y guardo silencio- por si lo olvido, le recuerdo que yo soy su jefe y usted tiene que respetarme, ¿si sabe que esto en una causal de despido? -seguí guardando silencio escuchando lo que él decía- ¡diga algo ya!
- Se perfectamente que usted es mi jefe, y por supuesto que estoy consiente de las consecuencias de mis palabras, pero sabe, no me arrepiento de ni una sola cosa que dije, ¿sabe por qué? Porque ya era hora de que le pusiera un alto a su maltrato, siempre que usted viene con ese humor, no hay quien lo aguante, perdón, me equivoco, Sí hay alguien que lo aguanta y esa soy yo. Usted siempre se desquita conmigo y yo no tengo la culpa que sus citas no salgan bien. Me cansé, me cansé de la forma que me trata cuando esta molesto, y ya no lo voy a permitir, si me va despedir, adelante
- En parte tiene razón, y le pido una disculpa por eso, no me daba cuenta de la forma en la que la trataba -me quedé en shock cuando dijo eso, Adrien Agreste pidiendo disculpas, no creí que viviría para escuchar eso- Pero eso no le da ningún derecho de hablarme como lo hizo, que sea la última vez, me escucho, o si no tendré que prescindir de sus servicios, total una secretaria para su reemplazo en cuestión de segundos la encuentro así que cuide su trabajo señorita Dupain
Eso que me dijo me molesto más de lo queya estaba, salí de la oficina sin decir nada más, osea que soy una del montón, pues no, no me considero una secretaria cualquiera, siempre doy lo mejor que puedo y más y él no lo valora, bien, pero seré yo la que termine con esta bomba de estrés y de malos tratos ya he aguantado demasiado. Y no pienso darle el gusto de despedirme.
Poco tiempo después tenía listo el documento, así que entre a su oficina sin tocar, el hablaba por teléfono viendo hacia el gran ventanal que regalaba una excelente vista de la ciudad. Termino de hablar y se volteó- Marinette, ¿en que momento entró? No la escuche -no dije nada- ¿qué pasa? ¿qué necesita?
- Necesito que firme esto -le dije seriamente entregándole los documentos-
- Claro -dijo tomándolos, se veía más calmado y hasta un poco más contento, seguramente esa llamada le cambió el genio, lo empezó a revisar- ¡Que diablos significa esto Marinette! -dijo con notoria molestia, empiezo a creer que es bipolar
- Es mi renuncia -le dije tranquilamente
- ¡Si ya se que es tu renuncia! Pero ¡¿por qué?! ¿Por qué quieres irte? -me sorprendi al escucharlo porque es la primera vez que me habla de tu- responde ¿qué pasó para que quieras dejar tu puesto?
- Ya no importa, lo que importa es que usted puede conseguir otra secretaria rápidamente ¿no es así?
- Ya entiendo, lo dije sin pensar, estaba enojado, tú eres una excelente secretaria, haces tu trabajo muy bien, te has ganado mi confianza, y eso es muy difícil de lograr, se que encontraré otra secretaria, pero no será como tú, porque no serás tú.
¿Por qué me dice ese tipo de cosas? cuando lo único que quiero es sacarlo de mi corazón... pero él hace que sea tan difícil...
CONTINUARÁ...
¡Hola queridos lectores! 🤗
He regresado con una nueva historia, espero que les guste mucho, si es así no olviden dejar su estrellita☆
Nos leemos en el próximo capítulo👋🏼
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𝑻𝒖 𝒎𝒆 𝒄𝒂𝒎𝒃𝒊𝒂𝒔𝒕𝒆 𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂.
Fanfiction¿Qué es lo más horrible que puede hacerte la persona que amas? Jugar con tus sentimientos y hacerte creer cosas que no son más que viles mentiras, hacerte creer en hermosas ilusiones, que se caen de repente como los castillos de naipes que con la má...