Año 2016 (parte 2)

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Al día siguiente el revoltijo de sábanas y ropa se extendía por toda la habitación. Jungkook dormía abrazado a Jimin que se encontraba en posición fetal. Cuando un rayo de sol empezó a darle al mayor en la cara, se giró rápidamente hasta quedar cobijado en el pecho del maknae. JK abrió los ojos para comprobar que no había sido un sueño. Jimin seguía allí, entre sus brazos. La noche anterior fue increíble. Solo de pensar que no hicieron ni tres cuartas partes de lo que podrían haber hecho le excitaba demasiado. Jungkook metió su cabeza entre los mechones alborotados de Jimin. Respiró su olor para después dejar un beso en aquella selva llamada pelo. Se dio la vuelta, intentando no moverse mucho. Cogió el móvil, las 6:38am. Él debía irse, Hobi podría llegar en cualquier momento. Jungkook salió de aquella preciosa prisión que él mismo había provocado. Comenzó a ponerse los pantalones, intentando no hacer ruido. Cuando se giró para dar un último vistazo comprobó con sus propios ojos que era el chico más afortunado del planeta. Jimin estaba totalmente desnudo, abrazado a un cojín, con su cara perfectamente armoniosa encima de la almohada. Él siempre lo supo, pero ahora sabía a ciencia cierta que tenía razón desde el principio, Jimin era un ángel. ¿Cómo podía dejarlo allí sin volver a besarle? A lo mejor tenía frío. Jungkook volvió, cogió la manta y le abrigó bien. Posó un beso en sus labios y salió por la puerta de forma cuidadosa.

Pasaron las horas. Todos los miembros de BTS estaban desayunando. Todos excepto Jimin que aún no había despertado. JK comía una tostada tras otra, era un pozo sin fondo.

-Te has levantado con hambre ¿no? -afirmó RM.

-Qué habrás hecho anoche -dijo por lo bajo Hobi para que solo lo escuchara el joven.

Jungkook ni le miró. Se quedó sonriendo mientras miraba su plato.

-¿Esa camiseta no es de Jungkook? -dijo a lo lejos Suga mientras veía a Jimin aparecer con el bóxer y la camiseta de Jungkook que era como un vestido en su cuerpo.

JK miró al recién llegado. ¡Madre del amor hermoso! Si no hubiera nadie en la cocina se lo tiraría allí mismo. Estaba increíblemente sexy con su ropa. Su pene no tardó mucho en pensar lo mismo. De repente, la mano de Tae le dio un golpe en la barbilla. Tenía la boca totalmente abierta mientras miraba como Jimin paseaba de un lado a otro de la cocina buscando un bol de cereales.

-Cierra la boca que te van a entrar moscas Jungkook-ah.

Jungkook volvió a mirar hacia abajo.

-Bueno chicos, en dos horas salimos. Así que espero que tengáis las maletas hechas.

JK abrió los ojos de par en par. Ni recordaba que se iban de viaje. Le dio un bocado a su última tostada y salió corriendo rumbo a la habitación. Como la suya conectaba con la de Jimin y Hobi, los tres compartían vestidor. Por lo que se dispuso a meterse en él para comenzar con la maleta. Hobi ya la tenía hecha. Admiraba lo organizado que era su hyung. El maknae empezó a coger ropa monocromática, una de las cosas que le había copiado a Suga, su amor por el negro. Comenzó a meterlas perfectamente dobladas en su equipaje. No le dio tiempo ni de pensar en Jimin, estaba demasiado atento por no dejar nada atrás. Sin embargo, unas manos recorrieron su cintura abrazándole.

-¿Me echabas de menos? -preguntó la voz sensual de Jimin.

Jungkook se giró al instante para comprobar que su hyung seguía vestido de la misma manera. Le ponía demasiado, no nos vamos a engañar.

-Hyung...

Jimin le besó ardientemente en la boca, poniéndose de puntillas para poder alcanzar su boca en su totalidad. Jungkook no pudo evitar bajar las manos a su hermoso culo, el cual sobresalía por debajo de su camiseta. Lo alzó hacia arriba y siguió besándole con mucha pasión. Sus lenguas se buscaban, sus manos se tocaban, sus penes se rozaban. JK empotró a Jimin contra una de las pocas paredes que tenía el vestidor y, como si estuviera haciendo pesas, comenzó a moverlo sutilmente de arriba abajo para conseguir frotar sus miembros. Jimin echó la cabeza hacia atrás, soltando un sonoro gemido. Estaba en tensión y su pene lo sabía.

MI ÁNGEL (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora