Era la hora de comer en el Cuartel General y todo estaba tranquilo en el despacho de Roy Mustang. Sus subordinados trabajaban en silencio hasta que Breda anunció que se iba a comer. Después todos, poco a poco, se marcharon hasta que solo quedó Riza, que ya estaba recogiendo sus cosas para, al igual que sus compañeros, tomarse un descanso. En ese momento a Roy se le ocurrió una idea.
- Teniente -dijo mientras se levantaba de su silla e iba hacia la mesa de la rubia. -Acabo de recordar que tengo que mirar unos documentos muy importantes dentro del archivo y necesito su ayuda.
Riza levantó una ceja, suspicaz, pero no dijo nada, solo se levantó y le siguió hacia el archivo.
La puerta estaba abierta y no había nadie. Todo el mundo estaba en el comedor disfrutando de una hora de descanso. Ambos entraron, Roy cerró la puerta. Riza le miró y le dijo:
- Y bien, Coronel, ¿por dónde empezamos a buscar esos "documentos tan importantes"? -enfatizó las tres últimas palabras.
- Sabía que habías entendido la indirecta -dijo Roy mientras posaba sus labios sobre los de Riza y la daba un profundo beso.
- Roy, podría entrar alguien -Dijo Riza mientras se separaba de él.
- Todo el mundo está comiendo, nadie va a venir.
Roy volvió a besar a su amada y ella le devolvió el beso, ambos se dirigieron a una de las mesas que estaba entre las estanterías, lejos de la puerta. Los besos de ambos comenzaron a ser más apasionados, ambos querían más del otro. Roy sentó a Riza en la mesa y sus besos pasaron de la boca al cuello, a la clavícula. Riza estaba quitando la chaqueta a su amante cuando....
- ¡No me puedo creer que tenga que buscar ahora unos archivos! ¡Toda la mañana sin hacer nada y el Sargento se acuerda ahora!
Ambos se separaron enseguida. La voz provenía de la puerta, así que aún tenían unos pocos segundos para que, quien fuera que haya entrado, no sospechara nada. Ambos se pusieron a mirar en las estanterías cualquier cosa. Cinco segundos después apareció una de las secretarias que trabajaban en el Cuartel.
- Coronel Mustang. Teniente Hawkeye, no esperaba encontrar a nadie a estas horas. Siento si han oído mis quejas. No iban con mala intención.
Roy puso su mejor sonrisa, esa que conquistaba a todas las chicas, mientras Riza, seguía fingiendo que buscaba un archivo.
- Tranquila, no pasa nada, ¿qué le parece si le invito a comer y después busca eso que necesitaba? Teniente, por favor, coja los archivos que le he pedido y déjelos sobre mi mesa. Después puede irse a comer.
La secretaria aceptó enseguida la propuesta de Roy. Riza, por su parte, cogió el primer archivo que estaba cerca y los tres salieron de la sala. Cuando llegó la hora de marcharse a casa, Roy volvió a pedirle a Riza que se quedara, esta vez con la excusa de que no había terminado el papeleo del día (aunque era algo habitual en Roy Mustang). Cuando el resto del equipo se marchó, Roy se levantó, cerró la puerta del despacho con llave, se dirigió hacia su teniente, que le esperaba sentada en la mesa.
- Bien, Teniente -dijo mientras dejaba un beso sobre su cuello- ¿por dónde íbamos?
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One Shots "Royai"
أدب الهواةRecopilación de historias cortas de mi pareja favorita de "Fullmetal Alchemist" Roy y Riza, porque, en el fondo estos dos son pareja (aunque no sean canon) NOTA: Los personajes no me pertenecen, solo las historias.