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New notó como su jefe llegaba ese día un poco atrasado al trabajo, ligeramente agitado, gracias a que un hermoso chico demasiado travieso para su propio bien le entretuvo más tiempo de lo que debería en la cama, y no contento con eso le hizo llevarle a su casa para cambiarse, y de ahí a su universidad para reunirse con sus compañeros para un proyecto grupal, lo que había hecho que Off llegue media hora atrasado, pero por algo era el maldito dueño del lugar, por lo que nadie, ni siquiera New comentó nada al respecto.

Otra cosa que llamó la atención de New fue que le ordenó encargarse de un diseño único que no sería de ninguna colección, y en casi todo el día se entretuvo dibujando diseños de lo que parecían disfraces, pero New tampoco se cuestionó demasiado aquello, y exceptuando esos detalles el día corrió como cualquier otro.

Para New la vida se había vuelto tranquila y al mismo tiempo movida, seguía con un montón de responsabilidades pero en las últimas semanas se había concentrado en calmar su mente y no dejar que sus problemas lo ahoguen, haciendo las cosas una a la vez, intentando reducir su ansiedad.

Odiaba admitirlo, debido a su naturaleza orgullosa y competitiva, pero Tay tenía mucho que ver en ese cambio, además de la enorme ayuda que eran los trabajos de fin de semana, también oyó sus consejos y habló con Gun acerca de su preocupación, se disculpó por haberle sometido a esa situación incómoda, y tal como había imaginado, Gun jamás se molestó con él. New había encontrado un amigo maravilloso.

Para el final ese día laboral, se fue de su casa poco después que los demás, hacía ya mucho tiempo de la última vez que tuvo que quedarse a hacer horas extra, su situación económica seguía apretada pero podía arreglárselas con algo de maña, lo cual tenía a Off también aliviado, nunca le gustó tener que darle tanto trabajo a New pero bien sabía que el chico era orgulloso, y era la única manera en la que le dejaba ayudarlo.

La mañana del sábado New despertó listo para otro viaje de fin de semana con Tay, esta vez a Chonburi.

El viaje tardaría más o menos unas dos horas, y aunque ya se estaba acostumbrando a viajar con el hombre, los primeros momentos siempre eran algo incómodos y silenciosos, aunque había mejorado enormemente desde la primera vez, cuando ingenuamente, incluso llegó a pensar que tal vez podría aprovecharse de él de alguna manera.

Lo cual era muy gracioso, ya que tuvo ese mismo temor cuando conoció a Off y fue contratado como su asistente, no le costó demasiado tiempo notar que era muy profesional y jamás dio siquiera señales de que quisiera propasarse, a pesar de su fama.

-¿Podemos escuchar algo más moderno?- preguntó New finalmente, cansado de oír las mismas músicas ridículamente antiguas en la radio del moderno coche.

La sonrisa floja que Tay tenía se ensanchó aún más.

- Pero es Pumpuang Duangjan, la mejor cantante de la historia de la música tailandesa-se quejó melodramático, pero aún así cambió la música a un ritmo más al gusto de su copiloto y luego rió.

Aunque New agradeció no tener que aguantar otro viaje escuchando músicas milenarias, no pudo evitar reír también.

-Eres un alma vieja, Ai'Tay, ser criado por tus abuelos no es excusa para tener gustos de abuelito- el mencionado también se rió, y solo pudo asentir, sabiendo que tenía razón.

El silencio permaneció tranquilo nuevamente por unos minutos, y luego Tay volvió a hablar, queriendo comenzar una amena conversación y de paso también recoger algún tipo de información que pueda serle útil a su amigo o a él.

-Entonces- comenzó con algo de prudencia- ¿Hablaste con Gun después de aquella noche en el casino?

-Si, hablamos, como ya me imaginaba no estaba molesto, estaba más preocupado por otras cosas.