Jungkook abrió la puerta del copiloto dejándome bajar de auto para que luego este fuera llevado por un sirviente del restaurant, me indico el camino hacia la entra en la cual él dio su nombre dejándonos ingresar con amabilidad, Jungkook iba delante de mi captando mi atención al levantar su mano la cual fue un saludo hacia una mujer que estaba en una de las mesas con una gran sonrisa, ladee mi cabeza confundido siguiendo a Jungkook hacia aquella mesa tomando asiento a su lado mientras él hacia un pequeño apretón de manos con la sonriente mujer.
-Temía que tal vez no viniera señor Jeon –Dijo reluciendo sus blancos dientes notando que dejo una acaricia en la mano de Jungkook en un eje de coqueteo –Empezaba a preocuparme.
Carraspeo algo incomodo para luego mirarme con una gran sonrisa que fue notada por la mirada recelosa de la mujer que pudo ocultar rápidamente, aunque no por mí.
–Le presento al joven Park Jimin–Presento con orgullo -Joven park, ella es la señorita shin jiao, hija sel señor shin shao, inversionista de china.
-Un placer –Aunque en realidad no lo era, le di una de mis mejores sonrisas lo cual no me fue devuelto por la mujer que solo tenía su mirada en Jungkook.
-Tendrá que disculpar a mi padre señor Jeon, le surgió un asunto importante que debía resolver con urgencia.
-Me fue notificado sobre su falta, no se preocupe señorita shin, ¿Qué les parece si ordenamos?.
Me sentía algo desconcertado, aquel hombre me había propuesto salir, al parecer quería que fuera su acompañante, pero ¿Por qué no me dijo que era una reunión?, me hubiera puesto algo mejor, además que me sentía incomodo y algo dejado ya que aquella mujer solo tenía ojos para Jungkook, como si yo no existiera, aunque Jungkook intentaba integrarme, aquella mujer cambiaba el tema solo para saber de él, sabía lo que estaba haciendo, no me extrañaría si el señor shin invento una excusa para dejar que su hija coqueteara descaradamente con Jungkook, me molestaba, me irritaba su voz chillona, sobre todo sus intentos de tomar su mano. Carraspee interrumpiendo en lo que sea que ella estaba diciendo notando su pequeña mueca disgustada, me levante sintiendo la mano de Jungkook en mi muñeca.
-Disculpen, iré un momento al baño –Me libre de la mano de Jungkook saliendo de aquella incómoda situación, por más que me molestara no tenía derecho de reclamar o decir algo imprudente, con ello no ganaría nada.
Al llegar pose mis manos en el lavado soltando una gran exhalación, la situación me cansaba, algunas veces era de este modo, tenía que aguantar cada coqueto dirigido a aquel hombre, aunque Jungkook se alejaba y manejaba la situación tranquilamente, aun así me era incomodo.
-Oye –Una voz rasposa hizo que levantara mi mirada, hacia un hombre de cuerpo robusto y mirada temible -¡Por supuesto!, ya decía que tu rostro me era conocido.
Decidí ignorarlo, tal vez era otra persona curiosa sobre el titanic, pues mi rostro junto a los sobrevivientes sale cada año en primera plana del periódico, no tenia humor para lidiar con lo mismo de siempre, así que decidí ignorarlo, lavar mis manos y dar media vuelta, una presión se instalo en mi brazo haciendo que soltara un quejido, seguido de mi espalda chocando con la pared del baño haciendo soltar un poco de aire, aquel hombre me miraba con una sonrisa burlona, sus ojos negros eran aun más temibles que me hizo temblar del miedo, mientras su mano presionaba un poco mi cuello.
-¡Te estoy hablando esclavo! –Me levanto tomando con su otra mano del cuello de mi camisa sacudiéndome -¡Como te atreves a ignorarme! ¡¿No sabes quién soy?! ¡Te crees mucho por ser la escoria que salió de aquel barco!
Su mano en mi cuello hizo más presión cortando un poco el aire.
-¡Un homosexual! ¡¿Crees que nadie lo sabe?! –Rio sínicamente apretando mi cuello mientras me sacudía con brusquedad -¡Eres una plaga! ¡Tu debiste morir ese día!.
No entendía el porqué hacia esto, ni siquiera lo había visto en mi vida, mire sus ojos llenos de ira y a la vez algo acuosos, mismos ojos que querían matarme entre más apretaba mi cuello.
-¡TU DEBES MORIR!.
Como pude moví mi pierna estrellándola en su hombría logrando que me soltara cayendo al suelo, trate de recuperar el aire que me fue rebatado, me levanté con dificultad cayendo de bruces contra el suelo, pues aquel hombre jalo de mi pie, sentí como algo bajaba por mi nariz que al tocar mis labios sentí el sabor metálico de mi sangre, el hombre trepo por mi pierna agarrándola con fuerza haciendo que girara quedando boca arriba, intente patearlo pero detuvo mi otra pierna llegando de un salto sus manos a mi cuello, lo cual no permití dándoles un manotazo.
-¡AYUDA! –Grite con todas mis fuerzas posando mi ante brazo en el cuello del hombre mientras que mi otra mano se encargaba de alejar las manos del hombre de mi cuello -¡AYUDA!.
-¡CALLATE!.
Me dio una cachetada que resonó por todo el baño, pero eso no fue sufriente para dejarme aturdido, pues no iba a permitir que me hiciera un daño mayor, sentía la adrenalina a mil, junto a mi miedo de que nadie pudiera ayudarme. Logro posar sus manos en mi cuello soltando una risa desquiciada, pero no fue mucho lo que duro su triunfo ya que fue quitado bruscamente, respire nuevamente sentándome en el suelo, mientras alguien me ayuda a levantarme, al girarme note que era Jungkook quien me tomo por mis mejillas revisándome soltando un gruñido al ver mi mejilla que de seguro estaba roja y mi nariz que aun sangraba.
-¡Maldito! –Dijo mirando a un lado de mí, me soltó dispuesto a ir por aquel desquiciado hombre pero fue retenido por otro.
-Nosotros nos encargaremos señor Jeon –Hablo el hombre moreno que lo retenía –Me parece que su acompañante necesita ir al hospital.
Jungkook gruño molesto soltándose del agarre del hombre fulminándolo con la mirada.
-Espero señor Kim, que su empleado tenga un buen abogado, no pasare por alto este acto de agresión hacia mi acompañante.
-Yo mismo me asegurare que page señor Jeon, estoy en contra de estos actos tan primitivos –Hizo una pequeña reverencia –Discúlpeme de ante mano.
Jungkook bufo volviendo hacia a mí con una mirada preocupada, vi como quito su saco posándolo sobre mi cabeza cubriéndome.
-Afuera hay fotógrafos esperando –Me susurro solo para que yo escuchara –Vamos, te llevare al hospital.
Antes de salir aquella mujer que estaba en nuestra compañía me miro con asco antes de mirar a Jungkook quien tenía una expresión seria.
-Señor Jeon...
-Sera mejor que se mantenga en silencio señorita shin, le aseguro que después nos veremos ante un tribunal.
Ella abrió sus ojos sorprendida, antes de ser empujada por Jungkook al pasar por su lado, no entendía del todo que había pasado realmente, simplemente sentía a Jungkook muy molesto, pues gruñía cada tanto manteniendo su expresión fría, mientras con su saco tapaba mi rostro ante las cámaras.
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