Una Noche

34

Estaba dando vueltas en mi cama, de nuevo no podía dormir. El día había sido un asco, mucho más que los anteriores. Mi mente no dejaba de pensar en Xichen y la discusión que habíamos tenido.

La reproducía en mi mente, recordaba cada palabra que nos dijimos, pero en lugar de golpearlo, terminaba besándolo. Mi mente se desviaba hacia ese pensamiento, en que hubiera sucedido si yo aceptaba.

Me levanté molesto, empujando las sábanas con fuerza. Caminé por mi habitación con enojo y frustración, de verdad quería golpearme.

Mire la hora, eran las tres de la mañana. Debía levantarme en 3 horas para comenzar mi día y no había dormido nada. Quise encender la luz de mi mesa pero recordé que Xichen la había roto está mañana, ¿Por qué tenía que invadir todo?

El teléfono comenzó a sonar, era una llamada de Wei Ying. Preocupado respondí, el nunca llamaría a esta hora

–¿Qué sucede?– Pregunté

–Que rápido, ¿Estabas despierto?– Pregunto confundido– Olvídalo, no te llamo para eso

–¿Pasa algo grave?– Aunque su voz no sonaba para nada preocupada

–No sé si sea grave– Escuché algo romperse, eso me asusto

–¿Estás bien?, ¿Que es ese ruido?

–Uh, digamos que tenemos un pequeño problema aquí

–¡Sueltame!– Escuché a un hombre gritar.

–¿Dónde demonios estás?

–Estamos en casa de Xichen– Dijo sonando nervioso

–¿Que está pasando?

–Esta borracho y no deja de tratar de irse– Dijo hablando rápido– Está llamándote

–Espera, primero ¿Dónde está JingYi?– Pregunté comenzando a buscar mis zapatos– El no debería...

–No te preocupes, está en casa de Yanli con SiZhui– Eso me tranquilizó, así que deje de moverme– Jiang Cheng, necesito que vengas ahora

–Wei Ying, eso ya no es mi problema. Creo que es lo suficientemente mayor para cuidarse solo

–No lo entiendes, de verdad necesito que vengas– Volvió a decir, no me gustaba para nada ese tono

–¿Que está pasando?, ¿Dónde está Lan Zhan?– Pregunté de nuevo

–Esta aquí pero ni si quiera el puede hacer algo– Dijo empezando a sonar desesperado– Por favor, solo tienes que venir

Dude, mordiendo mis labios. ¿Por qué tenía que ir a ver a un hombre que no tenía nada que ver conmigo? Además apenas habíamos discutido y lo había golpeado, ¿No sería peor que lo viera?

–Por favor Jiang Cheng– Pidió con súplica

–Esta bien, iré. Pero solo a verlo, no quiero hablar con el– Dije colgando la llamada

Maldiciendo busque una chaqueta y la puse sobre mi pijama. Los zapatos que tenía puesto no eran para nada lindos, pero al menos servían para que conduciera. También me maldije a mi mismo, por seguir preocupándome por el

Mandé un mensaje a Wen Gao avisando que llegaría más tarde, tampoco quería preocuparlo y después fui en dirección a su casa. Las calles vacías me tranquilizaban un poco, pero también hicieron que llegara más rápido de lo que quería.

Wei Ying me esperaba en la puerta, eso me hizo preocuparme aún más.

–¿Que haces afuera?, ¿Te hizo algo?– Pregunté de inmediato