Una Noche

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Cuando regrese a mi casa, caí muerto en mi habitación.

Había pasado varios días sin dormir bien, la noche anterior no había dormido para nada al estar preocupado por Xichen y además me pase la tarde jugando videojuegos con JingYi, hasta que se canso y por fin me dejo irme

Cuando llegue a casa, lo único que hice fue avisar a Wen Gao que había regresado y después me encerré, sin si quiera quitarme los zapatos me acosté a dormir, en un sueño profundo por horas

Desperté al día siguiente con dolor de cabeza, era horrible, pero al menos había logrado descansar. Habían sido dos días de emociones demasiado fuertes

Wei Ying vino a verme esa misma tarde, discutí con el por todo lo que había pasado y sobre todo, por haber dejado a JingYi tan temprano, aunque después de la discusión le conté que había hablando con Lan Xichen, lo que hizo que se emocionara

Estaba mal de la cabeza, pensando lo mismo que JingYi

–¿Pero por qué no?– Pregunto de nuevo, ya me había cansado de eso– ¡Es claro que todavía sienten algo el uno por el otro!, ¿Por qué no ser una linda familia? Ni si quiera es necesario decirle a JingYi quién eres, ¡Solo vuélvete el novio de su papá!

–Ya cállate, solo dices estupideces– Dije golpeando su cabeza, una costumbre que no había perdido

–¡Oye! Ya no tengo 5 años, tía Tronchatoro– Se quejo

–¿Y crees que diciendo diálogos de películas eres muy adulto?– Pregunté con sorna

–Admite que es gracioso y una gran película– Asentí estando de acuerdo, pero el siguió hablando– ¿Por qué eres tan terco? Siempre complican todo, parecen muy inteligentes pero en realidad son idiotas

–Ya lo sé– Respondí con un suspiro a lo que había dicho– Escucha, tu sabes que lo que siento por Xichen no es fácil de olvidar. Sabes la clase de hombre que soy, solo hay una persona a la que he amado, y por eso mismo es difícil aceptarlo de nuevo

–Si, si, ambos arruinaron las cosas

–Y por esa misma razón, tampoco es fácil que deje de dolerme. Tomara algún tiempo, pero estoy seguro que lo que sentimos, ahora que ya no tenemos ese odio al cual aferrarnos, desaparecerá

–No creo que desaparezca, pasaron años y no lo olvidaste, ¿Qué te hace creer que ahora sí?

No respondí porque Wei Ying tenía razón, todo lo que salía de mis labios era mentira. Una vil excusa para no aceptar que moría de ganas por estar entre los brazos de Lan Xichen. Seguía enamorado de él, pero después de tantos años, ¿De verdad podíamos regresar a lo que teníamos?

Yo no lo creía, pero todos a mi alrededor si.

–Solo quiero estar al lado de JingYi, no importa si es con Xichen o no– Dije para finalizar la conversación

–Eres peor que Jin Ling cuando hace berrinche

–¡No te metas con mi pequeño Jin Ling!– Reclamé con fuerza, provocando que riera

–En fin, ¿Qué pasará con JingYi?

–Aun no lo sé, Xichen dijo que cambiaría la  custodia pero temo que al decirle el lo tome mal. Es un niño sensible, sobre todo por lo que sucedió, debemos tener cuidado– Respondí suavemente– El es lo más importante

–Me siento igual de culpable, creí que lo estaba cuidando bien– Dijo Wei Ying, sonando bastante desanimado de pronto– Te prometí que lo protegería, y falle

–No es verdad, hiciste lo que pudiste. Además, tenías a tu propia familia, ellos deben ser lo primero siempre– Me acerque a el, apoyando una mano en su hombro– Pero si quieres compensarlo, apoya a JingYi ahora. Es cuando más nos necesita, está pasando por un largo proceso donde debemos amarlo y ayudarlo