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–¿Hoy viene Xichen?– Pregunto Wen Gao, sonando bastante cómplice

–Si, ¿Como lo sabes?– Dije dudando de su pregunta

–Solo una corazonada– Respondió levantándose de su asiento– Se quema el guisado Jiang Cheng

–¡Mierda!– Me apresure a apagar el fuego, mientras mi teléfono volvía a vibrar

Había estado enviando mensajes a Xichen toda la mañana, eso había provocado que estuviera mucho más distraído de lo normal. Habían pasado dos semanas desde que nos habíamos visto.

JingYi se encontraba un poco mejor, pero todavía era difícil. Al menos la psicóloga nos había dicho que JingYi estaba avanzando a pasos lentos pero seguros y que la desición de no presionarlo era bastante sensata.

Extrañaba verlo, pero me recordaba siempre que era lo mejor. Xichen también había estado pendiente de el, por eso había pasado tanto desde que nos vimos. Se sentía un poco inseguro de dejar solo a JingYi, pero gracias al apoyo de Yanli se decidió a venir a verme.

La situación entre mi familia y JingYi era un poco mejor, al menos dejaba que ellos estuvieran con el, aunque fue mucho más por Lan SiZhui y Jin Ling. Quería estar con ellos, y eso había influenciado a qué su enojo disminuyera un poco.

Decidí dejar de responder a los mensajes de Xichen para concentrarme en mi trabajo. Si seguía el mismo ritmo lento jamás terminaría, y realmente quería salir temprano.

Cuando mi turno termino por fin, Xichen ya estaba esperando por mi en la entrada. En el momento que lo vi no pude evitar sonreír, el se acercó a mi con prisa, abrazándome por la cintura y besándome. Correspondi con gusto, lo había extrañado mucho.

–Te extrañe tanto– Dijo escondiendo el rostro en mi cuello– Te ves hermoso

–Estoy cubierto de restos de comida y sudor, ¿Cómo puedes decir eso?– Pregunté burlón

–Para mi siempre estás hermoso– Me beso de nuevo, está vez un poco más lento– ¿Quieres ir a cenar?

–Si, está bien– Respondí nervioso, ¿Qué estaba pasando conmigo?

Xichen me ayudó a subir al auto y después se encamino al restaurante. En el camino, comencé a sentirme nervioso cada vez más, casi ansioso. No entendia porque sentía vergüenza hasta de mirar a Xichen, ¿Algo estaba mal?

Me llevo a un restaurante bastante elegante, de nuevo me sentí fuera de lugar con mi ropa nada elegante pero Xichen me tomo de la mano, seguro de si mismo, y me condujo hasta una mesa alejada de todas las miradas.

–¿Quieres algo en especial?– Pregunto abriendo el menú– ¿Esta bien este lugar?

–Es perfecto Xichen– Dije suavemente, moviendome un poco en el asiento para acercarme a el

Era una ventaja que los asientos fueran como sillones, de forma redonda. Eso hacía que tuviéramos un poco más de privacidad.

–Es un lugar bastante lujoso– Dije mirando los adornos de la mesa

–Queria traerte a un buen lugar, ¿Fue demasiado?– Pregunto nervioso

–Estar contigo ya es demasiado– Dije riendo– Comamos algo, ¿Qué me recomiendas?

Xichen se movió al igual que yo, provocando que quedáramos uno junto al otro. El sonrió satisfecho, mientras yo sentía mi rostro arder de nuevo, éramos demasiado infantiles.

Lan Xichen se dedicó a contarme todo sobre JingYi y como había avanzado. Aunque hablábamos cada noche y me decía todo, escucharlo de nuevo me hacía sentirme mucho más tranquilo. La comida llegó pronto, cenamos de forma tranquila y después Xichen ordenó un postre que quería que probará.

Una Noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora