Una rara enfermedad ha terminado con la vida de la mayoría de los niños y niñas del mundo.
(O eso es lo que Katsuki Bakugo creía)
Bakugo a sobrevivido, pero a perdido mucho más que aquellos a los que él cree muertos.
Fue enviado a Yunitto731, un bru...
Permaneció recostado en esa cama durante algunas horas. Nuevamente, tal y como lo hacía desde los cinco años, las lágrimas no dejaban de brotar, recordando esa fecha en especial; el cumpleaños de Kacchan.
Se aferró a la suave almohada, inhalando el dulce aroma del rubio, que aún estaba impregnado en ella. Instintivamente su mano se dirigió al pequeño relicario en su cuello, sin embargo este no estaba ahí.
Secó sus lágrimas y rápidamente se levantó, buscando el pequeño collar por todo el lugar. Desesperado al no encontrarlo, decidido volver a su habitación, tal vez lo había dejado allí. Se vistió, saliendo del lugar.
Mientras caminaba por esos pasillos observó a Kirishima saliendo de una habitación.
-¡¿Midoriya?!- Cuestionó el pelirrojo algo nervioso al verlo -¿Qué haces aquí?-
-Pues iba a mi cuarto- Respondió calmado el pecoso.
-¡Ah!, Si, ¡Yo también! ¡Vamos!- El ojirojo lo tomó por los hombros, obligándole a caminar.
-¿Por qué tanto ruido?- Habló la rosada chica, abriendo la puerta de la misma habitación que Kirishima había salido.
-¡Mina!- Habló Eijiro sacudiendo sus brazos -No es nada, ya nos íbamos-
El peliverde los miró algo intrigado, ¿Qué clase de relación tenían esos dos?. -Solo iba de camino a mi cuarto y me topé con Kirishima saliendo. Por cierto ¿Qué estaban haciendo?-
El rostro del pelirrojo se tornó casi del mismo color que su cabello, rascó su cabeza mientras tartamudeaba. -Ehh, Bueno. Yo. Digo, nosotros...-
-Pues lo mismo que tú y Bakugo- Interrumpió la chica con una sonrisa divertida en su rostro.
Izuku no dijo nada, su rostro se tornó completamente rojo al igual que el de Kirishima.
-No te hagas el desentendido. Te ví cuando ingresaste a su habitación anoche- Rió Mina -¿Y dónde está él?- Cuestionó observando a los alrededores.
La expresión del pecoso cambio a una de tristeza -Se fue-
-¿Qué?, ¿A donde?- Preguntó el pelirrojo
-Supongo que ha Yunitto- Respondió Midoriya -Ayer oí a Dabi decirle a Hawks, que Kacchan saldría esa noche para infiltrarse en el campo-
-Así que quién atacaría desde el interior sería él- Comprendió la pelirrosa -Con razón no nos quisieron dar más detalles-
-Bueno, no hay nada que podamos hacer ahora- Habló Kirishima -Estoy seguro que él es el indicado para una tarea de esa envergadura-
-Supongo- Suspiró resignado el peliverde.
-¡Vamos Midoriya!. Nosotros también tenemos que hacer nuestra parte- Lo ánimo el ojirrojo.
-¡Así es!, debemos terminar de organizar todo, para que salga a la perfección- Apoyó Mina -O si no, Bakugo no dudará en explotarnos el rostro-
Algo mas animados luego de esa conversación, los tres chicos se dirigieron a sus respectivas tareas asignadas. En tres días atacarían, y debían preparar todo para ese momento.
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