34. Romper Un Diente (Parte II)

720 80 92
                                    

Disclaimer: Los personajes de Citrus y Yagate Kimi ni Naru no me pertenecen, son propiedad de Nakatani Nio (Yagate Kimi ni Naru) y Saburo Uta (Citrus)

[…]

Love Is Heavy.

Ángela Biachi y Regdar Blackstrand.

[…]

33. Romper Un Diente (Parte II).

[…]

El sol comienza a ocultarse en el horizonte, haciendo que los tonos de naranja y rojo destaquen, añadiendo una belleza única al paisaje. La temperatura, aunque fría, sigue siendo acogedora, del tipo que está hecha para que las parejas disfruten de una suave manta mientras toman una taza de té o café.

Un hermoso atardecer en general, pero para ella, es una completa burla.

En la adolescencia existen muchas razones por las que estar molesto, estresado e irritado, después de todo, las hormonas están a flor de piel, y también es esa época en la que comienzan a descubrirse muchas cosas. Eso junto con las responsabilidades cada vez mayores de la preparatoria y la futura entrada a la universidad, hace que los adolescentes se mantengan al borde de sus nervios.

No es que todos pasen por lo mismo, o reaccionen a las cosas de la misma manera, algunos tienen las cosas más fáciles que otros. Pero, incluso con las diferentes formas de afrontar la adolescencia, es comprensible que un adolescente se encuentre molesto.

Al menos, esa sería la suposición que haría cualquier adulto al verla perdiendo todos sus nervios.

Sin embargo, la razón es totalmente distinta. Aihara Mei no está molesta por nada relacionado con el aspecto académico de su vida. No, sus notas son perfectas, su estatus sigue intacto y, a pesar de todo, está dispuesta a perdonar a Himeko por su tontería si se disculpa con ella.

Nada de eso es lo que la hace agarrar un jarrón cualquiera de la mansión y lanzarlo por los aires en un arrebato de ira. El sonido de la porcelana partiéndose en pedazos al golpear la pared, el agua empapando el área y las orquídeas tiradas en la alfombra no hacen nada para calmar su ser.

Lo que tiene a Mei en ese estado de ánimo tan horrible y volátil es su maldito psicólogo, aquel hombre que parece tener una especie de placer sádico de llamarla paciente. ¿Quién se cree que es para decirle lo que tiene que hacer? ¿Por qué demonios tiene que escuchar a una persona que esta muchos escalones por debajo del estatus Aihara?

Una mano encuentra camino hacia su cabello, rascando el cuero cabelludo con fuerza mientras rechina los dientes en un intento de evitar gritar. No lo entiende, simplemente no puede hacerlo, no puede entender la razón por la que todos creen que ella debe de ir a esas inútiles sesión psicológicas.

Primero Yuzu, después Himeko, y ahora incluso Aihara Murai. Su abuelo que le enseñó a que ser un Aihara es símbolo de orgullo, que debe de comportarse en sociedad y aprender la debilidades ajenas para usarla para su beneficio. El hombre que le enseñó a que no todos son iguales, que hay vencedores y vencidos, ganadores y perdedores, dignos e indignos, ahora parece creer que esa creencia no es la correcta.

¿Cómo fue que una estúpida reunión que tenía como propósito ahuyentar a los Koito, acabó con ellos saliendo victoriosos y causando que Aihara Murai cuestionara sus creencias? ¿Por qué su abuelo insiste en escuchar a esas personas que no saben absolutamente nada sobre la alta sociedad? Se suponía que la reunión tenía que dejar en claro que Koito Yuu no merece estar en una relación con una Aihara, pero en cambio, solo acabó haciéndola lucir como alguien increíble.

Love Is Heavy.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora