#1 E pale mau wau iā ʻoe [ChisaDeku] [Omegaverse]

Capítulo 16

Maratón 1/3

Espero ver comentarios en este maratón o no vuelvo a hacer otro 👀

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Una vez que el auto se estacionó frente al edificio todos bajaron del interior del mismo. Hari tomó las bolsas del supermercado y Chisaki junto Hekiji tomaron el colchón luego de desamarrarlo del techo del auto, siguiendo los tres a Izuku quien iba liderando el camino con un suave tarareo, seguía somnoliento por haber sido despertado hacía pocos segundos, saludó al guardia como todos los dias antes de llamar el ascensor y esperar a que este llegara y abriera sus puertas, calculando si el colchón entraría o no en aquel lugar que cada día veía como pequeño.

Por suerte sí logró entrar sin problema y ellos con el gran colchón, así que Izuku presionó el botón de su piso, recostándose en una de las paredes mientras esperaba unos minutos y una vez llegaron, todos se bajaron rápidamente para dirigirse hacia la puerta del apartamento que Izuku se encargó de abrir, pasando primero para sacarse las botas e ir a encender el aire que suprimía las feromonas, celebrando al escucharlo andar, así que dejó que funcionara en casi toda la casa menos su habitación ya que no quería quedarse sin las feromonas que ya estaban impregnadas en el lugar junto a las suyas, esas le hacían sentir seguro y si el aire llegaba a ventilar ese lugar, su omega interior iba a hacerlo armar un gran berrinche.

Igualmente sabía que el beta no portaba feromonas algunas, pero Chisaki sí, así que al menos tendría las feromonas ajenas indirectamente tal como su omega interior le pedia; no pensó demasiado en ello y se acercó a la puerta principal para avisarles prontamente a los otros tres que podían pasar mientras esperaba a un lado de manera paciente, viendo a Hari pasar de último para cerrar la puerta adecuadamente.

—La cocina la encuentras por esa puerta, Hari-sempai —Indicó Izuku la puerta que estaba a la derecha de la puerta principal y luego vio hacia los otros dos. —Síganme, los guío a mi habitación.

—Con permiso.

Dijeron los tres al momento de adentrarse aún más en la casa, Chisaki junto a su beta y chófer siguieron a Izuku luego de haberle quitado la bolsa protectora al colchón, observando el lugar, la paredes eran de un suave azul cielo y llevaban colgadas fotografías familiares que el alfa observaba mientras iba caminando, podía al menos conocer a su suegro por fotos puesto que en todo ese tiempo no le había visto ni la sombra y no sabía si molestarse con el hombre por no preocuparse ni un poco de su hijo, lo dejó estar puesto que habían llegado a una puerta azul con estrellas amarillas y líneas rojas que rápidamente fue abierta para ellos que no tardaron en entrar detrás del dueño de la habitación.

Chisaki terminó tomando un respiro completamente hondo al sentir claramente el aroma de su destinado en todo el lugar y en cada rincón, sintiendo a su pantera en la orilla, querido salir para llenarse del aroma que pululaba en la habitación o marcar todo el lugar, el animal no se decidía realmente qué hacer, tuvo que tomar rápidamente el control mientras dejaban el colchón de lado para encargarse de sacar el otro que estaba en esos momentos en la cama lleno de almohadas y peluches.

—Me voy a volver loco, esto es el paraíso —Murmuró Chisaki quitándose el tapabocas negro al sentir que estaba ahogándose entre el suave aroma a piñas, ni siquiera estaba preocupado ni un poco por los gérmenes que pudieran haber alrededor.

—Contrólese jefe, si hace algo contra el joven Midoriya, tenga por seguro que su futura suegra lo castra —Aconsejó Hekiji con total seriedad mientras alejaba los peluches y las almohadas rápidamente y luego las sábanas.