Capitulo 48

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-No estoy seguro de poder hacer esto ¿saben?
Hablé al fin, rompiendo aquel molesto silencio que estaba apunto de inundar el auto. —Ya lo arreglamos Cameron, ya esta.
Respondió Taylor serio.
-Lo sé pero ¿que sucede si todo sale mal y no solo las matan a ellas si no que también a nosotros? eso seria una mierda.
Dije y mire hacia la ventana.
-Pues si, seria una mierda. Pero no hay que pensar asi, tenemos la capacidad de poder hacer esto, no lo esta tan lejos de nuestro alcance para ser honesto.
volvió a responder Taylor esta vez con la voz un poco mas animada.
-Esta bien ser optimista pero deberíamos pensar en las maneras de reaccionar que William podría llegar a tener ¿no es así?
Nash asintió.

(...)

Me recoste en el respaldo del asiento del auto una vez mas sin poder reconciliar sueño antes de que pudiera llegar a amanecer. No había logrado siquiera pegar un puto ojo en toda la condenada noche y eso estaba mal porque Taylor ya había conducido y ahora lo estaba haciendo Nash, eso llevaba a que ahora yo debía agarrar el volante, era mi turno. Y no solo odiaba manejar si no que también estaría durmiendome.
No dejaba de pensar en la posible posibilidad de que nuestro plan no marchara bien.
Lo que teníamos planeado al principio era básicamente engañar a William haciéndole creer que ellas ya estaban muertas y enterradas pero eso era un plan absurdamente estúpido ya que ellas eran mundialmente conocidas después de todo el se enteraría porque saldría en todas las televisiones,diarios, sitios de internet y muchos otros lugares.
Así que pasamos toda una semana y algunos otros días planeando algo mucho mas grande y mas efectivo, algo que no pueda fallar.
Llevaríamos a Layla y Mayra con William y sus matones así como se planeaba desde el principio.   Fingiriamos que las maltratamos, que fuimos igual de duro como con las demás personas secuestradas antes, esperaríamos unas horas para ir asesinando uno por uno a sus guardias, y luego lo mataríamos a el.
Pero algo simplemente no lograba entrar en mi mente, algo no encajaba algo en mi no lograba estar bien, algo que decía que no lo hiciera porque jamas volvería a verla de nuevo.
Creo que en lo que mas equivocado estuve fue en no decirle nada, nosotros contábamos con que ellas al finalizar todo esto no nos demandaran o algo así, pero nunca se debia ser tan confiado como nosotros lo estábamos siendo, nunca se sabe que puede ocurrir al final.
Esperaba que al final de todo ocurriera algo o alguien hiciera algo consiguiendo que yo pudiera seguir viéndola. Necesitaba seguir viendo a Layla, necesitaba seguir escuchando su voz, sus quejas, todo. Pase tanto tiempo observándola y luego casi mas de medio año convienviendo con ella que para mi ya era muy imposible vivir sin verla, pero yo sabía que eso era prácticamente imposible ya que si todo salia bien nos iríamos de los estados unidos para siempre. Pues era lógico que los sucesores de William nos persiguieran, pero con todo el dinero que habíamos ganado y que le robariamos a William nos alcanzaría y estabamos seguros. Sacariamos a toda nuestra familia de aquí.
Dos días faltan para su cumpleaños, lo sabia bien. Quería que ella estuviera con su padre antes de que eso sucediera.
-Cameron te toca.
Dijo Nash despertándome de mis pensamientos. Me di cuenta que el auto estaba aparcado y que el había bajado.
Baje del auto para dejar subir a Nash y ponerme como el conductor.
Mis pensamientos habían logrado despertarme lo suficiente.
Mire por el espejo retrovisor a Layla quien estaba tan dormida y tan tranquila que pensé en tomar un vuelo a China y no a estados unidos para que viviéramos juntos solo yo y ella.
No era como que estaba enamorado o algo así pero ella era tan débil. Sentía que debía protegerla, que debía darle lo que ella merecía, porque después de todo, ella merecía todo. Ella merecía mucho, era buena y humilde, graciosa y bondadosa. Era muy buena a pesar de sus demonios, si la veías jamas te darías cuenta de quien o como ella era cuando se trataba de ella misma.
Dije que me gustaría acostarme con ella y no era mentira, me gustaria tanto verla tal y como ella es entera, verla y decirle cuan hermosa ella es. Hacerla sentir hermosa, hacerla sentir que vale, que se sienta como ella deberia sentirse.
¿Como logra una persona gustarle a otra sin siquiera hablarle?
Verla todos los dias durante meses y meses, durante años, simplemente hizo que ella me gustará, que ella me pareciera hermosa y valiosa, te dabas cuenta a simple vista que tan hermosa ella es, me gustaria que ella me mirara con otros ojos pero esa eran bobadas de un niño estupido caliente despues de todo era casi imposible que ella y yo tuviésemos algo aunque fuera sexual y nada mas.
Luego de lo que sucedió en aquella fiesta si antes tenia un poco de ganas ahora estaba muriéndome por mas, verla casi desnuda y rogando porque yo estuviera con ella o mejor dicho dentro de ella diciéndome cuan sexy y caliente yo era.
Se que es algo perverso ya que ella estaba borracha pero fue uno de ellos mejores días de mi vida probablemente.
Nadie puede culparnos al final, quiero decir, sinceramente no puedo lograr creer que ninguno de nosotros tuvo sexo durante todos estos meses. No es fácil, somos hombres con necesidades.
Fuera que fuese lo que yo estaba pensando siempre todo conducía a Shawn. Siempre yo terminaba pensando en el. No lograba comprender que era lo que el tenia que yo no. No era como que Layla se lanzara a sus brazos todo el tiempo pero mis celos eran grandes.
Yo hice mucho para que me odiara así como hice mucho para que ella me perdonará. Si ella no quiso perdonarme es su problema. Yo conocía a Shawn y ella no, yo sabia que tan malvado podía ser el y sabia que por acostarse con una chica que al se le antoja no haría cualquier locura imaginable y no imaginable.
Pero al final, lo único que quería, era que ella estuviera bien.
No me interesaba Shawn, no me interesaba que Layla no me registrara, al final del día simplemente me importaba que Layla estuviera bien. Que al final del día, ella este bien.
Porque yo había prometido que ella estaría muy pronto con su padre, y a salvo.

Shawn.

Mire a Mayra dormida por el retrovisor y mire el camino que nos indicaba el aeropuerto. Indicaba que estábamos muy cerca, que ya faltaban solo minutos para irnos de vuelta a los estados unidos.
Me había negado a venir con Jack trayendo  a Mayra. Yo realmente quería traer a Layla, la sentía tan insegura si ella no estaba conmigo. Ella necesitaba estar conmigo para que yo estuviera tranquilo y bien. Sentía que Cameron y Taylor no lograrían protegerla como yo estaría protegiéndola ahora porque después de todo ella era mía. Yo debía protegerla, no ellos.
Vi a Gilinsky apretar el volante con sus dos manos haciendo que sus nudillos se pusieran de un color entre amarillo y blanco, el estaba muy nervioso.
Yo creo que aunque aparentaramos todos teníamos ese miedo de que nada saliera según lo planeado y que terminaramos muertos o algo muy parecido.
Intentaba ignorar esa pequeña voz que decía que algo no andaba muy bien para concentrarme en Layla.
Era difícil saber que muy probable mente no volvería a verla de nuevo.
No volvería a ver su cabello, sus delgados brazos, su rostro delicado, esas pequeñas manos que cuando tenían miedo me tomaban del brazo. Sus ojos cerrados al dormir, mojados por las lágrimas que salían desprendidas al tener alguna pesadilla. Su nariz respingada y sus finos labios. Esos que no probé mas de tres veces, esos que no disfrute como lo quería.
No había logrado estar con ella como realmente lo necesitaba y deseaba.
Era bizarra la manera en la que yo quería estar con ella y unirme con ella, en la manera que solo fuéramos uno.
En la manera en la que ella me demostraría que yo le gusto tanto como ella me gusta. Pero sabia tan bien que eso no pasaría que hasta dolía.
Tal vez y solo tal vez ella estaría mejor fuera de mi alcance, fuera de mi, yo era muy capaz de hacerle daño sin quererlo, no me controlaba, no era alguien que pudiera contra el mismo, era alguien experto en lastimar muchas personas y a quien menos quería hacerle daño era a ella.
Quise dejar de pensar en ella pero era tan dificil sacarla de mis pensamientos.
Necesitaba saber de alguna forma u otra que ella estaba bien, que ella no me necesitaba. Sabia que a estas alturas ella ya estaría desmayada en el asiento trasero con su cabeza en el regazo de alguien o algo así. Pero de igual manera me preocupaba, y mas si Cameron estaba con ella.
Bienvenidos al aeropuerto internacional de Rusia.
Se leía en un gran cartel con dos flechas hacia arriba sostenido por dos varas, y pasamos por debajo.
La gente abundaba aunque estuviera amaneciendo. Muchos autos y mucha gente, equipaje y aviones despegando.
Llegamos a un camino que se separaba en dos. Uno era para ir al estacionamiento del aeropuerto y el otro era para los vuelos privados. Me dirigí al segundo y conducido durante unos minutos debajo de un puente oscuro y al salir, entre a un playón. Esquivando algunos carros de equipaje nos dirigimos a la zona de vuelo y fue ahí cuando vi un Jet bastante grande y dos hombres custodiando la puerta, los hombres de William.

I Like Being AloneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora