Bright se encontraba saliendo de un supermercado, las bolsas que cargaban sus manos estaban llenas de alimentos y algunos dulces para su anciedad.
Se encontraba saboreando ositos de goma, cuando la risa de unos niños llamó su atención, al otro lado de una reja, varios niños se encontraban jugando en los juegos del orfanato.
En los contemplaba con tanto pesar que en su mente sólo se imaginaba jugando con su hijo con la persona que lo sostenía en sus brazos, la imagen de Win y su hijo era muy cariñosa y feliz pero... ¿Si hubiese cuidado más a Win el se hubiera quedado a su lado? ¿Hubiéramos tenido una familia feliz?
Bright seguía soñando esa vida que deseaba con su amado, estaba tan pendiente de sus sueños que no se dio cuenta que una cuidadora del orfanato lo estaba llamando.
- señor, ¿se encuentra bien?
- si, lo siento por quedarme parado, me iré ahora mismo.
-¿le gustan los niños? Siguió conversando la cuidadora.
- lo hago - suspiro Bright.
- supongo que su pareja a un no puede concebir uno....
- perdimos un hijo y... - Bright no pudo terminar la frase, el nudo en su garganta se lo impedía.
La cuidadora pareció entender, por lo que no siguió preguntando, pero si siguió hablando.
- muchos omega y betas quedan embarazados aún que el último sea muy poco probable que suceda, pero al ser un embarazo no deseado muchos los abortan o simplemente los abandonan y terminan quedando en sitios como estos.
-...
- me pregunto porque Dios bendice a esas personas que no desean tener hijos, pero a los que los anhelan con pasión se les dificulta tanto lograr concebir uno.
Bright escuchaba las palabras de la cuidadora, no pudo evitar sentirse culpable al ser ese tipo de persona, pero desde que Win aborto a su hijo el dejó todo de lado, el libertinaje, las fiestas e incluso a sus padres lo dejó.
Lo único que siempre mantenía co sigo era la foto de la ecografía que Win se hizo cuando aún tenía a su hijo en su vientre.
La cuidadora al ver a Bright quien seguía viendo a los niños con tristeza, ella no pudo evitar invitarlo al orfanato para que pudiera interactuar con los niños y que mejor hacerlo estando cerca de ellos.
Bright cuando entró al orfanato por invitación de la cuidadora, el nunca pensó que al hacerlo su vida cambiaría por completo.
Al ingresar sus ojos vieron a un montón de niños que lo veían de diferentes formas, algunos lo veían desafiantes y otros con esperanza al querer ser adoptados, la mayoría tendría entre 5 años a 11 años.
Mientras caminaba por esos pasillos, a las afueras en el patio de recreo, se veían varios niños jugando, pero su atención se quedó fija en tres niños que peleaban y discutían a gritos.
La pelea en sí consistía en dos niños peleando a golpes y otra niña que gritaba que se detuvieran, el hubiera dejado a los niños pelear si no fuera que aquel niño que protegía a la chica era mucho menor se podría decir que tendría unos diez años que el otro que tenia como unos 15 años, la diferencia de edad era enorme.
Pero lo que más le hizo conmover su corazón fueron los gritos de la niña, la súplica y lamento en su voz así como en su mirada suplicaba que alguien le ayudara, que alguien los salvara.
Bright no supo cómo, pero su instinto de alfa reaccionó primero que su conciencia al escucharla gritar.
- ¡PAPÁ AYUDAME! ¡AYUDAME A SALVAR A KANG PAPÁ!
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LIFE BEGINS (2da Parte PlayBoy) ¦BrightWin¦
FanfictionSegunda temporada de PlayBoy? Las dificultades de la vida hicieron que ambas partes hayan madurado a pesar de las pruebas y errores que cometieron. La separación y el hilo roto fue una gran grieta que los destruyó y lastimó los corazones de Bright y...