Perdon, antes del otro cap, venia este, crei que se habia publicado desde mi telefono, pero no. Asi que aqui lo tienen. Lo siento de nuevo. Pronto llegare con otro nuevo cap. Lxs quiero. ¡ADIOS!
Los rayos dorados del sol de la mañana iluminaron el castillo desde el Este, abriendo paso a un nuevo día. Algunos de estos rayos se filtraron por una ventana circular en lo alto de una de las paredes del baño de Myrtle La Llorona, el cual estaba fuera de servicio. Ese resultaba el perfecto lugar para tener privacidad, y un poco de paz. Justamente lo que Ginny buscaba, aunque su mente no pensaba en eso, de hecho, no pensaba en nada.
La pelirroja, estaba sentada en el suelo, al final del baño, con la espalda pegada a la pared. Su mirada se encontraba perdida en la nada, con lágrimas brotando de sus ojos careciendo de control alguno. Había perdido la noción de las horas, o siquiera de lo que había pasado. Solo sabía que de repente, dejó de sollozar y de pensar, para dar paso a una calma que solo aumentaba su angustia y tristeza.
Su túnica estaba completamente mojada, por el agua estancada en todo suelo, y era extraño que por el momento no le importara en lo absoluto. Si era sincera, ya nada parecía importarle.
Myrtle la Llorona la observaba silenciosamente desde su cubículo, sin saber muy bien qué hacer o a quién llamar. Ni siquiera sabía porque Ginny estaba en ese estado, pues no se atrevió a preguntarle, y de cierta forma le preocupó. Desde un principio la pelirroja se portó muy bien con ella, y se volvió su amiga, por lo que le angustiaba no saber que podía hacer ahora. También temía dejarla sola, por si hacía alguna locura, aunque ya había hecho muchas, como romper algunos espejos, lavabos o ventanas, solo con sus poderes.
Mientras pensaba que hacer ahora, escuchó la puerta abrirse. Con una sonrisa de esperanza, voló soltando un chillido hacia el individuo que entraba. Ginny ni siquiera se inmutó, y permaneció así aun cuando la otra persona se acercaba a paso lento hacia ella.
No reaccionó, hasta que él se sentó a su lado, y tomó su mano.
--Ginny-- susurró
Ginny lo miró.
Por unos segundos se imaginó la figura de Harry, pero cuando su vista se ajustó, unos ojos grises chocaron con los suyos.
--Draco-- contestó la pelirroja débilmente, con más lagrimas resbalando por su mejilla
Inevitablemente, inclinó su cuerpo hacia él y lo abrazó por la cintura, escondiendo su cabeza en su pecho. Draco la rodeó con sus brazos, dejando un beso en su cabello, para hacerla sentir segura. Ginny volvió a sollozar con fuerza, y se aferró más fuerte al rubio.
--¿Que hice mal?-- preguntó entre lágrimas. Draco de inmediato negó con la cabeza
--No hiciste nada mal, pelirroja. Él es el que está mal. No tú--
Ginny cerró los ojos con fuerza.
--No soy... lo suficientemente bonita para él, ¿Verdad? ¿Es... eso?--
--Tú eres la chica más bonita que he visto en mi vida-- le aseguró el rubio, dejando diversas caricias en el cabello de Ginny --La más hermosa, la más inteligente, valiente, bondadosa. Todas tus cualidades son tan infinitas que es imposible para mí enumerarlas--
Ahora era Ginny la que negaba con la cabeza.
--No puedo-o compr-renderlo-- la voz se le quebró, y Draco miró a Myrtle, quien había estado observando todo con tristeza, para que se fuera
La fantasma entendió perfectamente, y se encerró en su cubículo. Draco se separó un poco de Ginny, y acunó su rostro para que lo viera a los ojos. Sintió una punzada en el pecho al ver sus hermosos ojos cafés llenos de lágrimas, y Ginny pudo percibir como la furia contra Harry se apoderaba de su rostro. Pero se contuvo, para sonreírle con una dulzura que jamás había tenido con nadie más.
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Nuevo Comienzo (4 Libro) (Hinny)
FanfictionComo siempre lean el pequeño anuncio que les deje al principio.