CAPITULO 177 [Episodio 11. Hay una voz que me llama]

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[Episodio 11. Hay una voz que me llama]

“Hermana”

Los ojos de Cassia se abrieron ante el sonido de despertarla.

‘¿Cuándo me quedé dormida?’

Olvidó sentarse a la mesa y esperar a Deon.

Ahora podía ver el dormitorio y la cara preocupada de Deon.

Parpadeando lentamente, Deon, quien debería haberla abrazado y acostado en la cama, extendió la mano con cautela.

“Te desperté por qué tenías sudor frío”

“Uh, sí...... Gracias”

“¿Tuviste un mal sueño?”

Una mano fría le acarició la frente húmeda.

Cassia, que se tapó la cara con las manos como una tonta, negó con la cabeza.

“No, no fue nada. Debo haber estado cansada”

La caminata de hoy fue un poco larga.

Cassia murmuró y abrió los brazos a Deon. Era una petición para levantarse.

Deon la agarró del brazo, la levantó y la abrazó con fuerza.

Cassia, que aún no había podido dormir, gimió impotente.

“Estaba sudando mucho”

“Yo diría que así es mejor”

“Eres un pervertido”

“Sí”

‘No lo admitas’

Cassia, que tenía los ojos entrecerrados, sonrió y le dio unas palmaditas en el hombro.

Deon se relajó ante la señal de que realmente quería dejarla ir.

“Es vergonzoso. Quiero lavarme”

“Te ayu......”

“Solo dices cosas como ayuda o cualquier cosa”

Cuando lo miró, la ardilla astuta y sarcástica se encogió de hombros.

Cassia suspiró que no podía secarlo de todos modos, y se levantó de la cama procrastinando.

Y tan pronto como abría la puerta del dormitorio, cassia gritó en silencio.

Porque Rai estaba parado frente a ella.

‘¡Este dragón otra vez! ¡Sorprende a la gente!’

“Eh”

‘¡Qué es, Cómo paso esto!’

Cassia agarró su corazón y preguntó.

“¡Oh qué!”

“¿Qué diablos hiciste.....?”

Ay, Rai se tambaleó y se agarró la cabeza.

Su cara estaba blanca y cansada, y parecía que iba a colapsar en cualquier momento.

‘¿Por qué un enfermo tiene una fiebre así?’

Cassia se acercó a él para apoyarlo.

“Estoy bien.....”

“Yo me encargaré”

En ese momento, la mano de Deon salió primero por la espalda.

¿EH? Mientras hacía eso, agarró el brazo de Rai y dijo con una cara amistosa.

“Hermana, lávate y sal. Lentamente”

“Oh......”

¿No es realmente tan agresivo en primer lugar?

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