Si tú lo deseas, puedes volar.

Capítulo 17

- No. Búscate el tuyo.

Contestó un poco enojado Riki a su hermana, ya que esta le había pedido que llamara a Bo Yuan para conversar con él. Los chicos estaban en la sala de estar, esperando para irse al evento en el cual habían estado preparándose los últimos días. Solo él y Yumeri estaban en la habitación, ya que ellos no se iban a ir aún de la casa. 

- Idiota, no te quiero robar a tu novio, ni que fuera tan guapo...

- ¿Estás diciendo que tengo malos gustos?

- Aish... Como sea, dile que venga, tengo que decirle algo.

- No.

- ¡¿Qué te cuesta?! -la chica le tiró algo que encontró por ahí.

- ¡No me arrojes mis propias cosas! - Riki le respondió tirándole una almohada que tenía cerca.

- ¿Qué está pasando aquí? -se escuchó una voz grave de pronto.

Ambos hermanos cesaron la "mini pelea" y voltearon a ver en dirección a la puerta. Ahí estaba Bo Yuan cruzado de brazos, un poco molesto ya que no podía creer que fueran tan buenos para discutir esos dos. 

- Yumeri te echó el ojo.

- ¡Que no maldito celópata!

- ¡QUE NO SOY CELOSO!

 Bo Yuan rodó los ojos, here we go again... 

- Vete, quiero hablar a solas con él. 

Yumeri comenzó a empujar a Riki a la salida, pero Bo Yuan inmediatamente la detuvo, tomando sus brazos y alejándola de su novio.

- Con más cuidado, su espaldita... -dijo Bo Yuan más para sí mismo que para ella. Con delicadeza, posó una de sus manos en el hombro de Riki y le dijo: - Amor, sale un momento, ella quiere hablar, no puedo decirle que no. - sonrió al ver que el menor le hacía un puchero- No hagas eso, es tu hermana, no creo que sea lo que piensas. -le dio un beso en la frente para que luego el japonés saliera voluntariamente de la habitación.

- Wow...

- ¿Qué?

- Es la primera vez que veo que alguien puede domar a esa pulga.

- No lo digas así, no es que lo controle o algo así.

- ¿Qué clase de amarre le hiciste?

- ¿Ah? 

- Me cuesta creer que mi hermano esté teniendo sentimientos por alguien, siempre ha sido muy reacio a la gente... De hecho es la primera vez que veo que no hace ninguna cara de incomodidad cuando lo tocas, él siempre ha odiado el contacto físico, solo lo acepta de mamá.

- Bueno, no sé qué decir ante eso... 

- Mmmmm... -Yumeri lo miró de arriba a abajo, examinándolo. - No pareces del tipo que haga brujería... En ese caso, ¿Cuáles son tus intenciones con mi hermano?

- Eso me lo preguntaste ayer y te respondí de una forma muy clara.

- No más si cierto... -se acordó la chica- Bueno... Te acepto por ahora. Pero te advierto que si lo llegas a hacer llorar, te daré solo un día para despedirte de tus seres queridos.

- B-bueno... -respondió Bo Yuan desviando la mirada de la chica. Esa mirada la conocía muy bien, era la misma que tenía Riki cuando algo no le agradaba.

- Otra cosa... -dijo Yumeri mientras sacaba algo de su bolso de maquillaje. - Siéntate. -no esperó a que el otro le hiciera caso y lo empujó para que sentara al borde de la cama. Rápidamente comenzó a aplicarle base sobre la marca de la mordida que había provocado Riki la mañana anterior. - Pido disculpas por lo salvaje que es, pero gracias, ahora tú tendrás que soportar su lado inquieto, jejeje...