Secreto A Voces [+18] ✔️ (COMPLETA) #PGP2023

C U A R E N T A Y T R E S | H O S P I T A L 🎡

«No podía ser y nada más saberlo necesitábamos noticias positivas»

Zoe.

Izan y Zack estaban en una fiesta de unos amigos de Izan, los cuales les invitaron.

Zack no era un joven de muchas fiestas, pero lo hacía por su novio, ya que él si le gustaban. Por lo que esa noche era para disfrutarla ambos, celebrando que las clases de la universidad habían acabado y que su relación había iniciado hacía pocas semanas.

O al menos eso era lo que Zack quería y lo que pasó de verdad es que Izan se había perdido con sus amigos, dejando solo a Zack y bebiendo como si no hubiese un mañana.

Izan era un buen novio, un buen amigo y un buen hermano, pero la bebida no lo ayudaba y una vez empezaba, no había quien lo parase. Zack no lo pudo conseguir esa noche al ver como su novio se pasaba de copas y ya, bastante borracho y lo que parecía también, algo drogado, se acercó a Zack, el cual preocupado lo miraba e Izan le dijo;

—¿Te gusta? ¿Lo estás disfrutando? —Arrastraba las palabras, incluso apenas era capaz de mantenerse en pie.

Zack ya lo había visto bebiendo en la primera fiesta que habían ido juntos, aunque no fuese como pareja, pero no había visto tan bebido como esa noche, o al menos, no lo parecía.

Y su preocupación fue en aunmento.

—Si. Aunque creo que deberías dejar de beber ya.

Izan, algo molesto por esa pregunta, se alejó de él y lo negó, diciéndole mentiras.

—Estoy bien.

—Izan, vámonos a casa —susurró Zack, tratando de sujetarlo para que no cayese al suelo—. No estás bien.

Eso ya no era emborracharse, era pasarse por completo y el temor de que le ocurriese algo por tanto alcohol que había tomado, empezó a ascender por completo en su pecho. Zack trató de sacar el móvil para llamar a la hermana de él, pero Izan, enfadado, dijo;

—Estoy bien, joder. Vamos a bailar.

Lo trató de agarrar la mano, pero no tenía fuerzas y Zack necesitaba llevárselo de allí antes de que le ocurriese algo sumamente malo.

—Ve tú, voy a hacer una llamada —susurró Zack.

Vigilándolo desde lejos, marcó el número de Blue tan rápido como podía.

Mientras, Izan esa noche realmente se había pasado. Lo que no sabía es que un grupo de jóvenes, los cuales conocían a Izan, se empezaron a acercar a él, y no para cosas buenas. Lo que Izan, al estar tan ebrio, apenas podía mantenerse.

—Zack, ¿qué tal esa fiesta? —cuestionó Blue.

—Blue, ¿estás con Faith? —respondió rápidamente, apresurado y temeroso de lo que pudiese pasarle a Izan.

Tuvo que salir un rato fuera de la fiesta para poder hablar con Blue y para que ella pudiese escucharlo.

—Si, acabamos de salir a cenar —contestó ella.

—Por favor, vengan. Izan no se encuentra bien y ya está completamente borracho, apenas se mantiene en pie —confesó rápidamente, con la voz temblorosa y sin saber que más hacer para llevarse a Izan.

—Vamos para allá. Trata de vigilarlo. Faith y yo ya estamos yendo hacia la fiesta —dijo rápidamente la hermana de Izan.

Tras colgar, entró de nuevo en la fiesta rápidamente para localizar a su novio, pero no lo vio por ningún lado, tan solo escuchó a unos jóvenes riéndose mientras salían de allí y, al moverse para subir las escaleras de aquella casa, vio un grupo de gente mirando al suelo, algunos llamando a la ambulancia y otros buscando a alguien.

Sus peores temores se hicieron realidad y cuando se acercó a aquel círculo de gente, lo que vio lo horrorizó, dejándolo peor que nunca y se arrodilló frente a él, al ver a su novio en el suelo, sin moverse, con signos de violencia.

—¿Izan? Háblame. Izan...

Trató de llamarlo, pero no lo consiguió.

—Vi a un grupo de jóvenes riéndose de él y creo que le han pegado... —susurró un joven—. Voy a llamar a la policía.

Zack arrugó su frente y volvió a preguntar;

—¿Cómo...? —Miró a su novio tirado en el suelo y gritó. —¡Izan!

Zack sacó su móvil y llamó rápidamente a la ambulancia ignorando todo lo demás.

🎡

Una joven pareja se encontraba en su pueblo, donde se habían criado, muy lejos de Los Ángeles, viendo una película en el cine, disfrutando de ese momento juntos y Zoe se podía sentir relajada, tras dejar salir todo lo que escondía desde hacía tiempo.

Rhett tenía su mano sobre la de ella, acariciándola con suavidad mientras disfrutaban de ese momento juntos. Hasta que una llamada lo cambió todo.

Zoe sacó su móvil, habiéndose olvidado de quitarle el sonido y, cuando vio el nombre, fue a contestar;

—Silencio —dijo una mujer que se encontraba viendo la película.

Zoe se disculpó y, en voz baja, preguntó;

—¿Blue? ¿Qué tal tu noche?

—Zoe... Zoe, por favor... —lloraba Blue.

Al escuchar la voz de su amiga de esa manera, se levantó rápidamente del asiento del cine y se alejó de allí para poder hablar con ella.

Rhett, al verla marcharse, la siguió, extrañado por la reacción de su novia.

—Blue, ¿qué pasa? —cuestionó una vez fuera del cine.

—Izan fue a una fiesta con Zack, bebió demasiado y un grupo de jóvenes empezaron a pegarle... Y ahora se encuentra en el hospital. No sabemos nada, pero no despertó en la ambulancia —contestó Blue con la voz temblorosa y sin poder decir ni una palabra correctamente por los nervios.

Zoe, al escuchar eso, miró a Rhett y respondió;

—Vamos a coger un avión ahora mismo. Tardaremos unas horas, en cuanto sepas algo, llámame o escríbeme si ves que no contesto por el avión.

Colgó y, al mirar como Rhett la observaba con extrañeza fuera del cine, él le formuló;

—¿Qué ocurre?

—Izan está en el hospital.