15 dίᥲs ρᥲrᥲ qᥙᥱ gᥙstᥱs dᥱ mί ꨄ hyunin

𖧵 4

Día 2.

Nuevamente Jeongin se despertó temprano, hoy no haría sándwiches, hoy haría un rico pastel de chocolate, no tan dulce pues no sabía qué tanto le gustaba esto al mayor. No quería cometer el mismo error que el día anterior, se aseguró de conseguir todos los ingredientes y con ayuda de su mamá lo preparó en la cocina de su casa ante la atenta mirada de su papá y su hermano mayor.

- Innie ¿para quién es eso? - a su hermano le sorprendía ver a Jeongin preparar algo tan temprano, él siempre había estado centrado en sus estudios, pero se alegraba, ya su hermanito se merecía darse una oportunidad de estas.

- Para un chico que me gusta - dijo sonrojado.

No era un secreto que al menor le iban mejor los hombres y aunque su papá y hermano no querían aceptarlo al inicio, ahora ellos se encargaban de bromear sobre eso mientras su mamá solo los trataba de controlar.

- Esperamos conocerlo antes de que nos vayamos a Busan hijo.

- Ojalá y sí papá, nada me gustaría más.

En seguida el señor Yang salió al trabajo, en 10 días su familia se mudaría a Busan, que era su lugar de origen, pero que por cuestiones de trabajo habían dejado, además de que toda su familia estaba allá. Por eso quería darse prisa con lo de Hyunjin ya que después estaría ocupado con lo de la mudanza de sus padres.

Habían hablado ya con Changbin, y después de que su familia se fuera, Jeongin se quedaría en un cuarto del departamento del mayor, compartirían gastos y así ninguno estaría solo. Era el plan perfecto y si las cosas no resultaban del todo bien tenían un plan B.

■ ■ ■

Por tercera mañana consecutiva Jeongin esperaba al mayor afuera de la cafetería, quería entregarle lo que le preparó con tanto esfuerzo porque si éramos realistas la cocina no era su fuerte.

Hyunjin no tardó mucho en llegar junto a Minho y Seungmin, al ver al menor ahí se preguntó si no tenía clases o qué, siempre estaba detrás de él como si fuera lo más interesante de su vida. Ese pensamiento lo hizo molestar mucho, él no quería la atención ni lástima de alguien y menos de ese niño estúpido. Verlo sonreír en su dirección le desagradaba de sobremanera, no entendía por qué estaba feliz a pesar de su trato.

Supongo que necesitas otra cosa para entender. Con ese pensamiento Hyunjin siguió su camino y estuvo a punto de pasarlo por alto hasta que Jeongin lo detuvo tomando su brazo.

- Buenos días Hyunjin, ¿dormiste bien? te ves más lindo que de costumbre.

Hyunjin apartó bruscamente su mano y solo le dedicó una mirada molesta, ¿quién se creía Yang para tocarlo?. Solo continuó caminando con un Jeongin parlanchín detrás de él tratando de obtener su atención.

- ¿Por qué no te detienes un momento y me escuchas? - Jeongin trataba de seguirle el paso con su cajita color azul cielo.

- No creo que tengas algo que me interese.

- Te hice algo de nuevo, es un pastel de chocolate - hablaba serenamente - no sé si te gustan las cosas dulces pero como a veces te ves enojado - los amigos del alto rieron ante el comentario - quiero que tengas algo de dulce, así como yo me siento cada vez que te veo.

Seungmin soltó un suspiro como de niña enamorada pero sin el afán de molestar aunque Hyunjin lo hubiera entendido de otra manera, por lo que detuvo sus pasos haciendo que los demás imitaran su acción.