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Minho y Jisung se miraban atentamente, casi sin parpadear. Minho comenzaba a sentirse nervioso ante las sensaciones que lo invadían, Jisung ni siquiera entendía lo que estaba sintiendo, por alguna razón quería a Minho más cera de él.

—Sigamos— dijo Minho— me toca— lanzó los dados, ambos tenían la mente algo nublada por sus emociones— amarillo— Jisung tomó la tarjeta.

—¿Te atrae alguien de esta habitación?— preguntó Jisung con un sonrojo en su rostro.

—Si— soltó sin más— te toca— Jisung lo miro atónito ¿Minho se sentía atraído por él? Era imposible ¿Cómo iba a ser posible? Jisung tomó tímidamente los dados y los lanzó— rojo— dijo tomando una tarjeta— ¿Cuántas veces te masturbas al día?

—¿Q-q-que?— tartamudeo.

—Si, aquí pregunta, entonces— dijo expectante, si que le intrigaba saber que tan caliente era el menor.

—Es que yo...— susurro bajando la mirada.

—Vamos tienes que responder ¿Son muchas veces?— preguntó intentando molestarlo o burlarse él.

—Yo...no suelo hacerlo.

—¡Que! ¿Por qué no?— preguntó asombrado.

—Es que cuando estoy en casa siempre esta Jeongin y nunca consigo un buen momento— dijo tratando de no sonar avergonzado.

—Pero...¿No te sientes caliente? ¿Qué haces cuando tienes una erección? O cuando solo quieres sentir placer.

—Mm... Si he estado caliente, pero nunca a pasado nada. Cuando tengo una erección solo dejo que se vaya sola y no me doy el lujo de sentir cosas como el placer, tengo muchas cosas que hacer.

—Jisung ¿Tu nunca...haz sentido placer?— preguntó Minho sin poder creer lo que estaba escuchando.

—Yo...no se muy bien como se siente— dijo bajando la mirada en extremo avergonzado por el tema de conversación.

—¿No quieres saber que se siente?— soltó comenzando a emocionarse por lo que quería que pasara.

—¿Q-que?

—¿Quieres sentir placer, Jisung?— preguntó y Jisung bajo un poco la mirada. La verdad si quería, cuando veía películas con escenas +18 siempre se preguntaba como se sentiría eso, ser tocado de esa manera, saber que es ese sentimiento que te hace gritar y pedir más.

—S-si quiero...— dijo mirando a Minho con su cara aún encendida.

—¿Me dejas tocarte? — se atrevió a preguntar.

Jisung tragó fuerte, no sabía lo que hacía y no sabía si estaba bien o mal, lo que sabía es que quería tener a Minho más cerca. El menor se limitó a simplemente asentir.

Minho se fue acercado a él peligrosamente y tomó su mano con delicadeza dejando un beso en el dorso soltando aire por su nariz para que Jisung sintiera su aliento. Comenzó un camino de besos por su brazo hasta su cuello en el cual lamio delicadamente para después dejar un beso, con su mano libre empezó a acariciar su pequeña cintura a la vez que dejaba más besos en su cuello, Jisung ladeo su cabeza inconscientemente para darle mas acceso. Minho lo recostó en el suelo, no sin antes tomar una almohada de la cama para colocársela debajo de la cabeza.

Comenzó un camino de besos desde su clavícula hasta su pezón el cual comenzó a chupar, Jisung soltaba jadeos de placer ante aquella acción, ¿Así se sentía ser tocado? Si es así se siente de una manera inimaginable.

Sintió que tocó el cielo por un segundo cuando Minho se separa y con ambas manos comenzaba a jugar con sus pequeños botones. Minho quería verlo, quería ver cada una de sus expresiones.

—¡Ah!— soltó cuando el mayor tiro de uno de ellos.

Dejo sus botoncitos de lado y se concentro en otra zona, su entrepierna, empezó a masajear la zona por sobre la tela buscando que este despertara, Jisung tenía sus ojos cerrados, no podía ver a Minho de la vergüenza que sentía ante aquella situación, cuando el mayor comenzó bajar el short Jisung este se llevo sus manos a su cara para cubrirla.

—Oye tranquilo...— dijo Minho tratando de quitar las manos de su cara.

—N-no, me da mucha pena— susurró aún cubriéndose el rostro.

—No te preocupes, es normal sentir vergüenza, pero me gustaría ver tu cara— habló en un tono de voz tranquilo, Jisung ante aquello tomo valor y despejo su rostro— recuerda que solo somos tú y yo, no tienes que sentirte cohibido conmigo— dijo para proseguir a bajar sus shorts, fue bastante fácil pues le quedaban grandes.

Decido empezó un camino de besos por su estomago a lo cual Jisung comenzó a gemir más fuerte y más insistentemente, al parecer esa era una zona erógena para el menor.

Jugó con su lengua en el ombligo lo cual volvió loco a Jisung quien sujetaba la cabeza de Minho con ambas manos. Por el lado del contrarío sentía que nunca antes había escuchados gemidos más dulces y excitantes que los de Jisung.

Dejó de jugar con su ombligo para comenzar a bajar y llegar a su pelvis, Jisung se contrajo ante el toque en aquella zona, Minho fue bajando hasta besar su miembro por sobre la tela del boxer, Jisung había comenzado a llegar a un punto del que creía no había retorno, pues el mayor lo despojo de su ropa interior. Minho se separó y decidió admirarlo, era bellísimo, su cuerpo era irresistible y lo tenía todo para él, desde lo suave de su piel hasta el temblor de su cuerpo.

El mayor dio una pequeña lamida a su miembro y Jisung arqueo la espalda, Minho inicio jugando en el glande con su lengua a lo que el castaño solo podía retorcerse y gemir como loco, Minho sabía que al ser su primera vez sintiendo placer estaba más sensible de lo que una persona que normalmente se masturba estaría.

Metió todo su miembro en su boca de una y comenzó a subir y bajar la cabeza, Jisung clavaba sus uñas en el piso y apretaba los ojos, los abrió por un momento y pudo ver como Minho lo miraba con deseo mientras tenía su miembro en la boca, sentía que esa escena nunca se borraría de su memoria. Volvió a cerrar los ojos mientras colocaba una mano en los cabellos del contrario.

—¡M-minho!... ¡Voy a...! — dijo como apenas pudo, Minho chupo con fuerza su miembro haciendo un sonido muy morboso para después comenzar a masturbarlo con ganas, Jisung lo sentía, estaba a punto de explotar— ¡Ahh!— soltó un gemido en alto cuando el orgasmo llegó a su cuerpo.

Comenzó a respirar agitado, había tenido su primer orgasmo, Minho lo había llevado a sentir un orgasmo, no podía creerlo.

Abrió los ojos pesadamente encontrándose con Minho sonriéndole. Jisung también le sonrió, pero se había dado cuenta de algo en cuanto lo vio.

Minho no lo había besado...

EL NIÑERO ➺ MINSUNG Donde viven las historias. Descúbrelo ahora