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Minho se bajó en una pequeña cabaña cerca de un lago, lugar en donde sería la fiesta, la música estaba muy alta y había mucha gente bebiendo y fumando, aunque esta última nunca atrajo la atención del pelinegro puesto que fumar tenía muchas consecuencias a largo plazo. Busco con la mirada a su mejor amigo, Seo Changbin, quien de seguro ya esta allí, y vaya que lo encontró, estaba en una esquina comiendole la boca a un chico un poco mas alto que él, era rubio y de tes pálida. Minho decidió dejarlo y fue por una cerveza.

Mientras caminaba hasta la hielera a buscar su bebida, pudo visualizar a una chica de cabello negro y tes blanca mirándolo descaradamente, a Minho le gustaban las personas así, que lo viesen sin vergüenza alguna de manera lasciva dejando a entender sus intenciones, el pelinegro dio un trago de la bebida y fue hasta la chica.

—Hola, linda— saludó Minho con una media sonrisa.

—Hola— respondió de misma forma la chica tomando una sorbo de su coctel.

—Soy Minho.

—Jisoo.

Ambos chicos se quedaron hablando un rato cuando siente que alguien se les para en frente.

—Hey Minho— saludó animadamente Changbin.

—Que onda, Changbin— Minho pudo ver que detrás de su amigo estaba el chico rubio, este se veía muy tímido ante la situación, tenía sus manos escondidas en las mangas de su sueter y en su cara un leve sonrojo— ¿Quién es tu amigo?

—Ah ¿É?— dijo apuntando al chico a su espalda— este hermoso ser que ves es Felix, es australiano y es nuevo en el país, sin embargo habla muy bien el idioma— lo presentó y el chico hizo una pequeña reverencia mientras soltaba un tímido Hola.

—Ya veo, bienvenido Felix— dijo el pelinegro.

—Gracias— dijo sonriéndole levemente pero aun así mostrando un poco sus dientes.

—¿Changbin no te a ofrecido un trago?— preguntó intentado levantarse.

—No, amigo, Felix no bebe— lo detuvo.

—Oh entiendo. Por cierto, ella es Jisoo— dijo apuntando a la chica. Ambos hombres la saludaron— vengan, siéntense con nosotros.

—Muchas gracias— dijo sonriente el rubio. Minho al ver esa reacción volteó a ver algo extrañado a Changbin, este solo le volteo los ojos.

Para ser sinceros a Minho le extrañaba ver a un chico como Felix en un lugar así, el chico era muy lindo y tierno como para estar en una cabaña a las afueras de la ciudad llena de alcohol, sexo y drogas y no solo era eso, sino que este chico parecía estar, de alguna manera, buscando refugio en Changbin, pues cada vez que alguien extraño se le acercaba con un cigarro o borracho este se pegaba más a su cuerpo con un semblante nervioso. Minho quería hablar con su amigo sobre esto, pues a pesar de que no era su asunto el pelinegro vivía por y para el chisme.

Cautelosamente comenzó una conversación e incluyo a Felix, en algún punto sus bebidas se acabaron y le dijo a Changbin que fueran por bebidas para Jisoo y Felix, esta acepto y dejaron a los otros dos platicando.

—Oye ¿Quién es ese chico?— preguntó de una mientras caminaban a la barra.

—Felix, ya te lo había dicho.

—Hablo en serio hombre. ¿Qué hace un chico como él en un lugar como este?

—Yo lo invite y el acepto venir— dijo desinteresado llamando al barman con una mano.

—No me digas— dijo sarcástico— te vi comiéndotelo hace un rato ¿Es tu conquista de una noche?— Changbin rio por lo bajo.

—Algo así. Dos cervezas, un coctel de frutas y un jugo de naranja— pidió hacía el cantinero.

EL NIÑERO ➺ MINSUNG Donde viven las historias. Descúbrelo ahora