Natural (levi y tú) [Finalizada]

Capítulo 25: Aquélla Fotografía

—papá yo no quería venir...siempre me aburro allí y Hange no vino —el pequeño Erwin de tan sólo 15 años se quejaba con su padre por haberlo obligado a ir a un evento de arte y fotografías.

—no podías quedarte en casa sólo —mencionó. Erwin amurrado camina un poco más atrás.

El rubio era un chico con una familia adinerada, aspiraba a hacer un modelo en un futuro y trabajar en la compañia de su padre, aún así sentía muchas veces que su vida era aburrida y quería aventuras como veía en la televisión. Por eso era amigo de Hange, su vecina, quien siempre se metía en aprietos.

De pronto un chico se acerca a él y le quita el pequeño collar de una gema verde que tenía, Erwin reaccionó inmediatamente y lo tomó del brazo deteniendolo.

—sueltame.

—p-por favor no me quites eso, ¡es muy especial!

—¿y a mí que? deja de gritar si no quieres que te arranque el brazo.

—te daré lo que quieras- —quedó en silencio al escuchar el estómago del más bajo rugir de hambre —te puedo dar comida.

—...¿y que más? —en ese momento a Smith se le encendió el foco.

—te propongo un trato —soltó a Levi lentamente y este curioso se quedó a escuchar —finge ser mi amigo, ahora debo ir a un evento y estaré sólo.

—¿que ganó yo con eso? ¿Crees que a mí me interesa esos eventos de ricachones?

—comida y mucho dinero —Levi alzó una ceja interesado —es un evento de "ricachones" habra comida de la mejor clase, personas con dinero y mujeres con muchas joyas, también te pagaré.

—...¿cual es tu jueguito niño?

—jajaja, bueno si es más un capricho mio, me gustan las aventuras —ambos quedaron en silencio unos segundos, el pelinegro pensó en la propuesta unos segundos y no tenía porque negarse.

—bien, aceptó tu trato —levanto su mano y la estrechó con el contrario, la apretó fuertemente y se acercó a el amenazante —si intentas tenderme una trampa...no sales vivo de ahí.

—s-soy Erwin Smith —trago saliva nervioso.

—Levi.

Ambos caminaron hacia el lugar, era un museo muy grande y muchas personas salían y entraban, el rubio tomó a Levi y lo llevó al baño para arreglarlo un poco. Limpio su cara, arreglo su pelo, sacudió y acomodo su ropa, y por último le echó un poco de un pequeño perfume de bolsillo. Beso sus dedos al ver su obra maestra, de un simple hombre de calle a un chico refinado y elegante, su peinado ayudaba bastante.

Al salir del baño se encuentran con el padre de Erwin.

—¿es un amigo? —pregunto viendo fijamente a Levi, le parecía extraña su expresión.

—a-ah si él... —tartamudeo.

—soy un amigo de su escuela, le ayude cuando unos niños lo estaban molestando y nos dimos cuenta que teníamos mucho en común, a pesar de ser un año mayor que él nos llevamos muy bien.

—esos niños —suspiro —tendré que volver a hablar con sus padres. Me alegra que tenga un amigo que lo ayude, los dejó, que se diviertan —se despidió con una sonrisa y los dejó solos.

—eres muy bueno en mentir... —camino con él hacia unas mesas —¿como supiste que me molestan en la escuela?

—con esas cejas cualquiera —comentó frío.

—eres cruel...

Ambos siguieron y quedaron frente a una mesa llena de platos deliciosos, sin pensarlo dos veces Levi se tiró como bestia salvaje a su presa, comía desesperadamente cada sabroso cóctel, postre y bebidas. Erwin sonrió, estaba feliz por haberlo ayudado y así el también divertirte un poco.

Al rato el rubio ve como un hombre camina cerca de unas expediciones y le causa curiosidad, puesto que, esa persona era Léonard, el famoso fotógrafo se paseaba al lado de sus obras con una sonrisa.

Tomó a Levi del brazo y lo arrastró mientras guardaba comida en sus bolsillos y cargaba un poco en sus brazos, tenía la mejillas llenas, parecía una ardilla.

—estas son las fotografías de Léonard, son muy bonitas —le explicaba mientras caminaban juntos.

—solo son fotos...¿por qué cuestan tanto?

—solo tienes que verlo desde otros ojos, tienen un significado aún mayor de lo que crees. Detrás de esa imagen hay una persona que siente y expresa todo a través de una fotografía.

—...realmente no lo entiendo —Levi seguía a Erwin mirando una por una sin entender alguna frase de este.

De pronto se paró frente a una foto, esta era extrañamente oscura y solo había una persona en el centro, ¿no eran simples fotografías? Pues...parece que no. De un momento a otro cayó una lágrima de sus ojos, no entendía lo que le pasaba pero de alguna manera se sentía identificado, como si le recordarán su realidad con una bañera de agua fría.

—¿levi? ¿Estas bien? —el rubio se preocupó y se acercó a él.

—estoy bien —apretó los dientes y seco sus lágrimas bruscamente.

—¿te gusta la fotografía? —un señor apareció a su lado, un hombre bastante guapo.

—...no lo sé, apenas la conozco ¿acaso usted usa brujería? ¿Por qué me siento así apenas con ver esta cosa? —Levi ya estaba enojado por alguna razón.

—¿brujeria? ¡Jajajaja! Pero que niño —se acercó a él y quedó a su altura —eres bastante único, ¿eres amigo de los Smith? —el pelinegro quedó en silencio —¿te gustaria aprender de este arte?
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—¡¡¡muajaja!!! ¿Me estas diciendo que metiste a un ladrón a una exhibición de fotografías? Jajaja —Hange reía por lo que Erwin le había contado.

—¡fue emocionante! Y él es...unico, me gustaría volverlo a ver. Además ¿que iba a hacer si no quisiste ir? Me dejaste solo.

—oh, lo siento —rió nerviosa —es que a esa hora veo my Little pony y no me la puedo perder.

—en fin, pero creo que hice algo bueno.

Erwin comenzo a explicarle lo que pasó después de que Levi conociera a Leonard. Al parecer a Léonard le dio curiosidad la reacción del pelinegro al ver su fotografía y se ha mantenido en contacto con él desde entonces.

Con el tiempo Léonard acogió a Levi como su estudiante y lo ayudó a estudiar, saber todo sobre la fotografía y tiempo después entro a trabajar en la compañia Shingeki para ganar más. Al estar Levi ya más grande, Léonard viajó a otro país para descansar.

Su vida por fin había mejorado y tenía en quienes confiar, pero al final, muchas veces no podía soltar aquella Cámara...

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Luego de eso...comenzó una inusual pero linda amistad...