V de Venganza

Capítulo 17

POV Poché

Lunes 13 de junio

Estos dos días con Daniela fueron muy divertidos y tranquilos, compartimos tiempo con Maca y Juanpa, eran muy atrevidos y más de una vez Daniela les tuvo que decir que se vayan a la habitación, me daba un poco de envidia, realmente disfrutaban del sexo, me preguntaba si yo algún día también lo podría disfrutar de la misma forma. Al dormir Daniela simplemente me abrazaba, nunca intentó nada más que un par de besos cuando estábamos solas. Después de mucho pelear anoche me trajo a casa y volvimos a pelear para que me recoja mañana, al final aceptó pasarme a buscar, pero no estaba muy feliz con la idea de que trabaje. Maca me ha curado con piedras de calor varias veces el tobillo y la verdad me siento muchísimo mejor.

Valery: ¿Por qué vas a trabajar si puedes no ir?

Poché: Tengo que trabajar, me siento bien y no quiero parecer una aprovechada

Valery: ¿Que importa da ser o no ser una aprovechada?

Poché: Valery sabes que no me gusta sentirme así

Valery: Lo sé, si por mi fuera yo sería su completa esclava, mientras me pague – dijo sin más –

Poché: ¿Cómo va el embarazo? – dije para cambiar de tema –

Valery: Bueno el chicle me está salvando la vida y mis pies se hinchan un montón.

Poché: ¿Cuándo tienes la próxima revisión?

Valery: A los 5 meses

Poché: ¿Y eso es?

Valery: En 2 semanas

Poché: ¿Deberíamos empezar a comprar cosas?

Valery: ¿Qué necesitas?

Poché: Me refiero para el bebé, no sé la cuna, y cosas así.

Valery: No te preocupes bebé yo me encargo de eso, este monstruito no es tu problema.

Poché: Es mi sobrino, yo lo malcriaré todo lo que pueda – la abracé –

Valery: Gracias, no sé que haría sin ti

Poché: Seguramente aburrirte - se escucha el sonido de una bocina – Seguro es Daniela, bien confírmame la cita de la revisión iré contigo, nos vemos en la tarde, que tengas un lindo día.

Valery: Ten un buen día bebé – me da un beso en la frente y me suelta del abrazo –

Al bajar Daniela me sujeta la puerta y me ayuda a llegar al coche, luego sube ella y empezamos el camino.

Daniela: ¿Cómo vas del dolor?

Poché: Buenos días, se dice primero

Daniela: Buenos días – sonríe - ¿Cómo va tu pie?

Poché: Muy bien, Maca es una genia con todo lo que hace, debería crear cremas para farmacias, se haría rica.

Daniela: Jajaja seguramente

El resto del camino a la fábrica nos la pasamos charlando y escuchando música. Al llegar fuimos a la oficina, ella se encerró en la suya, bajando las cortinas, para recibir unas llamadas y yo seguía practicando con los documentos y ejercicios que me había dejado Maca. Era casi el mediodía cuando una chica delgada, el pelo plateado y unos ojos rojos entró en la oficina seguida de un hombre vestido muy elegante.

Poché: Buenos días, ¿Puedo ayudarla en algo? – ella me miraba de arriba abajo –

X: Estoy buscando a la jefa del lugar