V de Venganza

Capítulo 26

POV Poché

Sábado 6 de agosto

Cuando desperté estábamos aterrizando en Ontario, en Toronto más concretamente. Desayunamos en la enorme ciudad y fuimos al hotel, pero dejamos las cosas en recepción, porque Daniela tenía muchas cosas preparadas para hoy. Recorrimos la ciudad de punta a punta, comimos en un restaurante delicioso y cuando dieron las 4 de la tarde yo estaba cansadísima.

Poché: Hey Dani – le dije parando de caminar –

Daniela: ¿Sí? – se giró curiosa - ¿Todo bien?

Poché: Ehh sí – dije incapaz de arruinarle el día – Quería un besito – dije dándole un pico en los labios –

Fuimos al museo de Ontario y a la galería de Arte, ya eran las 8 de la tarde y no sentía mis pies.

Poché: Estoy cansada – dije llegando al hotel –

Daniela: Oh...

Poché: ¿Qué pasa?

Daniela: Quería llevarte a un último lugar, pero mejor cenamos aquí y dormimos – me sonrió –

Poché: No estoy tan cansada - dije abrazándola – Vamos

Daniela: ¿Seguro?

Poché: Sí

Daniela: Genial subamos a cambiarnos.

POV Daniela

Entramos a la habitación, Poché se duchó primero y después lo hice yo. Nos habíamos alojado en una habitación normal, mañana iríamos a otro lugar más espectacular para dormir pero hoy quería llevarla a un restaurante que estaba en las alturas y encima era giratorio, se llamaba "Torre CN". Aunque todos mis planes cambiaron cuando salí de la habitación y me encontré a Poché completamente dormida. La acosté en la cama y me acurruqué a su lado, tenía que entender que ella no tenía la misma energía que yo.

Domingo 7 de agosto

Me desperté temprano y pedí desayuno en la habitación. La peli azul estaba agotada porque ni si quiera se inmutó cuando me levanté de su lado. Me senté en un sofá y con mi teléfono empecé a cambiar todos nuestros planes. Llamé a nuestros guardaespaldas que nos habían acompañado todo el tiempo aunque Poché no lo supiera y les pedí que me traigan un poco de sangre. A los pocos minutos tocaron la puerta y me pasaron mi comida. Me senté apoyé contra la barandilla de la terraza y comí tranquila.

Poché: Mierda, mierda, mierda – maldecía – ¿Daniela?

Daniela: ¿Sí? – me acerqué rápido a ver qué ocurría –

Poché: perdón, perdón ... yo no sé me acosté solo un segundo y ...

Daniela: Te dormiste – sonreí –

Poché: Sí, lo siento

Daniela: No te preocupes, ven desayuna hoy será un día más relajado, perdona por lo de ayer.

Desayunó tranquila, después nos vestimos y salimos. Eran cerca de las 10 de la mañana.

Poché: ¿Dónde vamos hoy?

Daniela: No sé – dije pensando que hacer hasta las 2 que era la hora de la comida - ¿Te gustaría ir al zoo?

Poché: Shii – dijo como una nenita chiquita – nunca he ido a ninguno.