Filadelfia

17: Acuerdos de Filadelfia

Me presta una camisa negra para no ponerme de vuelta el vestido. Y la uso al igual que mi ropa interior. Bostezo mientras regreso del baño a su cama. Aún está acostado, pero ya se ha puesto sus calzoncillos. Está distraído usando su teléfono. Veo la hora en mi celular, es casi la media noche. Había enviado un mensaje a mis padres diciéndoles que tenía un compromiso y me quedaría con Haley.

- ¿Has visto la película de los vengadores? – pregunto sentándome a su lado con las piernas cruzadas –

- Sí... me gustaba leer los comics cuando era pequeño – abro los ojos y sonrío destilando la burla de lo que diré –

- Que viejo eres –

- Nos llevamos 13 años, listilla – dice colocando su mano encima de mi pierna –

- Me gusta tu tacto, – menciono cerrando los ojos concentrándome en su mano sobre mi pierna – es cálido –

- A mi igual – lo observo y sonríe perezosamente –

- Bueno, en fin, la película del capitán América, guerra civil, la de los acuerdos de Sokovia, – el asiente para demostrar que entiende lo que digo, pero sin saber a dónde voy – ya... hay que hacer algo similar con esto -

- ¿Los acuerdos de Filadelfia? – bromea –

- Que ingenioso, sheriff – ríe suavemente –

- ¿Con acuerdos te refieres a lo que está pasando en nosotros? – pregunta y asiento con la cabeza –

Se incorpora para poder sentarse en la cama con su espalda apoyada en el respaldar.

- Creo que es algo que debemos tener en claro si queremos seguir haciendo esto – respondo –

- Estoy de acuerdo... - se queda en silencio un momento, me mira fijamente y suspira pesadamente - pero no sé si deberíamos seguir haciendo esto – admite –

- ¿No te gustó? – pregunto, como si fuera tan simple –

- No se trata de eso, me gustas, me fascinas, – sonríe de lado, pero su mirada es triste – pero no se supone que debería pasar esto –

- Pero ya pasó –

- Que dejemos de tener relaciones, no significa que debemos dejar de ser amigos – menciona y busca mi mano –

- Concuerdo con eso, – digo y asiento – pero somos dos adultos, ambos solteros... –

- Sabes que es más complicado que eso, Cas –

- Seamos amigos con beneficios. – digo y se ríe, por lo que me rio también – Hablo en serio, nuestra facilidad para hablar, visto, podemos ser amigos... y nuestra facilidad para congeniar en el sexo, visto.

- Tienes un punto – responde –

- Si quieres democracia, yo voto que sí –

- No es que no quiera hacerlo, Cas... - dice y veo frustración en sus ojos - ¿No piensas en Joe, en Chris? –

- Vuelvo a decirlo, soy una adulta que puede tomar sus decisiones y sé que es traicionar su confianza, pero no estamos lastimando a nadie... no estamos planeando asesinar a alguien, es solo sexo –

- Mi posición es diferente, soy su amigo...

- Pero no estás haciéndolo con él, lo estás haciendo conmigo y yo te di mi consentimiento para hacerlo... podemos dejarlos fuera de esta ecuación – reclamo –

Me observa en silencio y ladeo mi cabeza.

- En todo caso, no busco una relación, Cassie. Ni a corto plazo, ni a largo plazo. No quiero una relación – aclara y me pregunto si yo quiero una relación –

- Yo no estoy buscando una relación, pero tampoco me niego a tener una – replico –

- Eso no puedo ofrecerte –

- Tampoco te lo he pedido – digo burlonamente y él niega con la cabeza –

- Hablo de verdad –

- Yo igual, James, – digo -no quiero una relación, pero si conozco a alguien que me guste y me invite a salir, supongo que me retiro del juego –

- Tiene sentido... si conoces a alguien nos detenemos – responde en tono neutro –

- Correcto –

- Y me gusta lo exclusivo, en el sentido del sexo...

- ¿Te refieres a que si me beso con alguien más no puedo venir aquí y besarte? – juego y él niega la cabeza efusivamente – ¿te da asco? –

- Un poco, el traspaso de baba con alguien que no conozco o besar a otra persona y luego besarte a ti, me excede – me rio –

- Pensé que era por algo más posesivo –

- Contigo lo es... así que mientras dure este acuerdo, tú y yo nos pertenecemos en la cama – asiento con una sonrisa, me acerco a él y me siento ahorcajadas –

- Si te hace sentir mejor, a mí también me gusta saber que al menos en la cama vas a ser enteramente mío – murmuro –

- ¿Algún otro acuerdo? – desliza su mano por mi espalda y siento como se eriza mi piel de la sensación gratificante -

- Nunca se lo diremos a mis padres y te lo estoy pidiendo, porque sueles jugar mucho a lo bueno y malo, pero no quiero tener que pasar por todo un drama innecesario – replico y asiente con la cabeza –

- No es que pensará hacerlo, pero gracias por delimitarlo –

- Y pertenecer, no en un sentido extraño y sádico, solo de corresponder y de sentirse parte de – ríe despacio –

- Cuando me referí a lo posesivo, lo hice en el sentido de como lo explicas, correspondencia. No soy de poseer, ambos somos personas libres que elegimos estar aquí –

- No puedes ser más sexy – digo poniendo mis manos en su rostro, acariciando su barba corta –

- No había recibido tantos halagos como en estos últimos días –

- No te lo creo –

- Entonces, ¿algún otro acuerdo? – pregunta –

- No, creo que los acuerdos de Filadelfia están listos –