XXII

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QUIERO SABER TU HISTORIA

Las cosas había cambiado en cuestión de segundos. Hace un momento estaba con el lindo Omega que mantenía mi lobo inquieto y ahora estaba siendo apuntado con un arma por el mismo Omega, valla que las cosas pueden tornar de cabeza en solo minutos.

- ¿Ese era tu plan? Enamorarme y despuésdispararme-

-No, Jeon. Ese no era mi plan y tampoco tengo uno-

Me dolía ver a la persona que alteraba mi corazón, apuntándome con un arma y acusándome de querer solo ilusionarlo para matarlo, ese era mi plan principal, pero todo cambio cuando él me hizo sentir cosas nuevas, cuando no se intereso por mi físico si no por quien soy, el chico beso mi alma, hizo de mi lobo su alfa.

-Jeon escucha, lo que leíste si lo escribí yo, pero quiero que sepas que ya no pienso de esa manera, yo en realidad me enamore de ti, hay cosas que no sabes y tienes que escucharme- 

-Cállate Jinnie- Por primera pude ver al Jeon de ese día, ese chico con la mirada fría dispuesto a matar a quien se interpusiera en su camino. -¿Ese es tu nombre? O también mentiste en ello-

-Jeon debes creerme, de verdad estoy enamorado de ti. Jamás había sentido esto por alguien, cuando estoy contigo mi corazón late con fuerza, mis mejillas se sonrojan cuando te veo sonreír, estoy encantado contigo, por favor créeme-

Jeon me miro y comenzó a llorar sin quitar la vista de la mira del arma, pero sus manos temblaban, tenía miedo de que por accidente jalara del gatillo. -No, me estas mintiendo, tú quieres matarme. Jinnie yo si me enamore de ti- 

Me acerque con rapidez cuando se detuvo a limpiar las lágrimas de sus ojos y por primera vez las clases de defensa que nos obligaron a tomar los señores Kim me sirvieron de algo. Derribe a Jeon dejándolo en el suelo, me posé entre sus piernas, dejándolo totalmente inmóvil, saque la navaja de mi cintura y se la coloque a pocos centímetros de la garganta.

- ¡Mátame! Solo fui un objetivo para ti ¡Hazlo Jinnie! – Jeon comenzó a llorar en el suelo y yo sentí un nudo en la garganta cuando vi a Jeon debajo de mi llorando porque había malentendido toda la situación. -¡¿Qué estas esperando?! Solo fui un objetivo para ti, ¿Por qué me haces esto?- Hipo mientras sus lágrimas se deslizaban por los costados de su rostro.

-No- Comencé a lagrimar y avente la navaja lo más lejos que pude - ¡No puedo hacerlo Jeon! - Lo levante con fuerza y lo lleve al sillón, dejándolo sobre mí. -Jeon estoy enamorado de ti. No puedo matarte porque de verdad me gustas, sé que solo nos hemos visto un par de veces, pero esos encuentros han sido suficientes para que me diera cuenta de que... Esto no lo he sentido por nadie más- 

-¡No! Suéltame ¡Bájame!- Tome con fuerza su cintura y lo deje sobre mi regazo, lo abrace y aunque él trataba de quitarme no lo conseguía, yo era más fuerte. -P-Por favor, déjame mentiroso-

Tomé a Jeon por el cuello del mandil y lo atraje hacia mí, dejando que nuestros rostros fueran divididos solo por centímetros, solo de esa manera había conseguido que me prestara la atención que necesitaba.

-Jeon por favor créeme- 

Atraje a Jeon hacia mí, haciendo que nuestro labios se juntaran, había tratado de levantarse y lo atraje hacía mi besándolo para que dejare de alejarme. Al principio peleo y no movió sus labios, solo trataba de empujarme, pero después de unos segundos su cuerpo empezó a temblar, sus manos temblorosas se posaron en mi cuello haciendo más profundo el beso, el chico hipaba mientras nos besábamos pero no importaba.

UN NARCOTRAFICANTE ENAMORADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora