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Amy Harrington nunca fue conocida solo por ser la hermana del rey Steve Harrington, a lo largo de su vida lucho por la imagen que todos conocían de ella, la alumna perfecta, la hija perfecta, la amiga perfecta y la novia perfecta.

Durante toda su estadía en la preparatoria Hawkins había logrado convertirse en el mejor promedio de su generación, en la líder del club de matemáticas con más de 2 victorias consecutivas y claro sus buenos genes también le ayudaron a sobresalir.

Todo era perfecto o eso creía, al iniciar su ultimo año escolar la hermosa castaña pensó que nada podía salir mal, en menos de un año estaría en una de las mejores universidades del país viviendo con su novio de más de 2 años, con un grupo de amigos increíbles, una buena y solida relación con su hermano pero como las piezas de un domino todo cayo dejándola sola y destrozada.

Amy un día despertó y se dio cuenta que ya no tenia nada de eso, solo había un enorme vacío dentro de su corazón que por más que tratara no podía llenar, todo se vino abajo cuando Eddie Munson se fue de su vida.

Eddie y Amy se conocieron cuando un día sin querer la castaña arrojo su café en un Munson medio dormido a las 8 de la mañana en su primer año de preparatoria, se le había hecho tarde a su hermano como de costumbre y mientras Amy entraba corriendo escuchado a sus espaldas los gritos de disculpa de Steve  chocó contra un pecho firme y caliente derramando el liquido sobre una libreta y una mano llena de anillos.

-¡Ah mierda esto arde!-gimió el chico sosteniendo su libreta y agitando la mano intentando aliviar el dolor.

-¡Dios mío, Dios mío! lo siento mucho enserio yo....-grito la castaña preocupada, al alzar la vista quedo intimidada por la alta figura masculina con chaqueta de cuero, cabello largo y enredado.

Trago en seco, ese chico le iba a dar una paliza.

Así que antes que el dijera algo lo tomo de la mano y entró al baño de mujeres poniendo la mano del chico bajo en chorro de agua intentando aliviar el ardor y el futuro enojo del pelinegro.

-Esto calmara el ardor, en verdad lo siento mucho, no te vi lo juro venia corriendo porque al idiota de mi hermano se le hizo tarde como de costumbre claro y no quería llegar tarde a mi primera clase que es con la Sra. Martin porque es mala y en cada oportunidad de que tiene intenta humillarme y no se porque sabes, bueno si se pero ese no es el punto, el punto es que por culpa del idiota de mi hermano te queme la mano y moje tu libreta y estoy entrando en pánico porque llevo solo 2 semanas aquí y para nada es como creí que seria la preparatoria, en verdad lo siento mucho por favor no me mates- termino soltando un respiro temeroso mientras cerraba la llave y volteaba a ver al pelinegro que tenia una mezcla de confusión y burla en todo el rostro.

-Wow nunca había escuchado a hablar a alguien tan rápido- soltó con una sonrisa en su rostro- ¿Cómo te llamas?

-¿Qué ?- preguntó confundida

-Pregunte como te llamas- se inclino hacia ella alzando ambas cejas 

-Amy

-¿Amy....?

-Amy Harrington 

-Oh así que tu eres la infame hermana de Steve 

-Así parece- respondió incomoda y se tallo las manos en su falda intentando calmar el nerviosismo que se apodero de su cuerpo.

No era un buen día si Amy no se metía en problemas y este se veía inmenso.

-Y tranquila la preparatoria mejora con el tiempo.

-¿Enserio?

-No, es un infierno.

Y sin mas el silencio se hizo presente en ese pequeño y sucio baño de la escuela, ninguno decía nada pero ninguno se quitaba la mirada de encima, Amy  tenia que salir de ahí.

-Oye en verdad lo siento- habló intentado sonar segura de si misma- Juró que te comprare otra libreta y mañana puedo traerte una pomada para quemaduras, pero si intentas golpearme o algo le diré a mi hermano y el te partirá la cara.

El aire se sentía tenso y Amy estaba demasiado asustada como para hacer cualquier movimientos, el tipo la intimidaba a más no poder.

 Eddie soltó una carcajada fuerte mientras alejaba con su mano algunos cabellos que se colaban por su rostro.

-No pienso golpearte Harrington nunca haría eso, yo soy mas del club de los que golpean- alzó ambas cejas con diversión- Eres muy linda como para ser la hermanada de Steve Harrington.

-Mmmm...¿Gracias?

El chico se le quedo viendo por unos largos segundos sin decir nada, hasta que ambos saltaron asustados al escuchar el timbre anunciando el fin de la primera clase.

-Bueno tengo que irme, no quiero llegar tarde a mi próxima clase- dijo Amy sin moverse .

-Si, yo tampoco- Munson tomó su libreta manchada de café- Esperó verte por ahí.

-Esperó que tu mano se recupere.- hablo rápido casi tropezándose con sus palabras lo cuál hizo que el chico sonriera y camino hacia la salida.

Pero antes de salir voltea a ver.

-Harrington

-¿Si?

-Me debes una libreta- y sin mas salió del baño dejando a la castaña demasiado nerviosa y confundida.

Al día siguiente Amy dejo frente a Eddie una libreta nueva y una pomada que había robado del cuarto de sus padres y ahí comenzó todo, empezó con pequeños saludos cuando se veían en los pasillos o en la cafetería, después a pequeñas charlas en los descansos, después Amy se unió a el club de Hellfire, siguieron los almuerzos y citas de estudio juntos, salidas como amigos y después Amy fue a ver a Eddie tocar con su banda, después llego su primer beso, la declaración, la cena con sus padres y hermano que fue un desastre, su primera vez, su primera pelea, su primer fin de semana juntos y muchas primeras veces que que siempre estará en la mente de ambos.

Y después de casi 3 años todo parecía perfecto, hasta aquel día, aquel día donde su mundo se derrumbo.

Vaya mierda.

A little piece of us - EDDIE MUNSON-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora