Profesor Min | YOONTAE | COMPLETA

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—Taehyung, vas a hacer zanja —dijo Bogum, mientras veía al menor caminar de un lado a otro, con la intención de entrar al edificio, pero luego regresaba ansioso. Bogum lo observaba bebiendo de su ice coffee—, solo sube y toca la puerta.

—Pero, él debe odiarme, debe pensar que yo sabía de esto y que nunca hice nada para evitarlo.

—No lo hace, su amigo te dijo que te estuvo esperando todo este tiempo, si eso no es amor ¡no sé que es! —dijo desesperado.

—Indirectamente le jodí la vida por tres años, soy hijo de quienes se dedicaron a destruirlo, siento vergüenza, Bogum, no me siento capaz de verlo a los ojos —tomó a su amigo de los hombros, zarandeándolo un poco.

—¿Taehyung? —esa voz grave lo hizo paralizarse. Bogum quitó las manos de Taehyung de él y lo giró para colocar frente a frente del mayor.

—Es ahora o nunca, Tae —le susurró, Yoongi y Bogum se saludaron con un leve asentimiento y el menor se fue, dejando una pequeña incomodidad entre Yoongi y Taehyung.

—Tu novio parece muy agradable.

—No es mi novio.

—Ah... pensé.

—Es amigo de la universidad y no tenía dónde pasar las vacaciones, así que lo traje —Yoongi asintió, sin saber qué más decir.

—¿Qué haces por aquí? —preguntó y Taehyung inhaló y exhaló antes de hablar.

—Quiero disculparme por todo el daño que te hicieron mis padres, debes creerme que yo no estaba enterado, Yoongi.

—¿Cómo lo supiste? Ah... ¿Hoseok? —el menor asintió.

—Debí asegurarme de que cumplieran su palabra, confié en ellos y me traicionaron; yo lo hice para protegerte y resultó que hicieron miserable tu vida. Lo siento mucho, Yoongi.

—No tienes que disculparte, Taehyung, las acciones que hacen otras personas no te definen, creéme, no hay ni una mínima parte de mí que te odie o culpe. Todo está bien —le dedicó una pequeña sonrisa.

—No lo está, Yoon. Sé que te decepcioné cuando me fui, sabía que te lastimaba, lo vi en tus ojos en cuanto notaste que no llevaba mis cosas; y aún así, te juro que pensé que hacía lo mejor para ti. Nunca creí que mis padres serían tan horribles personas que harían lo que fuera con alejarte.

—Te creo, Taehyung, no debes sentir como si me debieras algo, yo solo deseo que tengas una vida plena y feliz junto a la persona que ames.

—Yo... —Taehyung bajó la mirada y tomó la cadenita que rodeaba su cuello, donde colgando como dije se encontraba el anillo de compromiso que Yoongi le había dado tres años atrás.

El rostro de Yoongi se iluminó y entristeció casi al mismo tiempo, recuerda que fue su primera compra cuando preparó todo para huir juntos. Pensaba proponérselo en cuanto llegaran a Daegu, donde había reservado para tres noches en una cabaña, antes de decidir a dónde irían, dependiendo la Universidad que quisiera estudiar el menor.

—Lo guardé todo este tiempo, sabiendo que algún día te lo devolvería.

Dentro de Yoongi, había una tonta pizca de esperanza, donde albergaba que Taehyung volvería por él, para decirle que lo amaba y que no había impedimento alguno para estar juntos. Pero después de las palabras del menor, toda luz finalmente se apagó.

Yoongi asintió y se mordió el labio con fuerza, diciendose que no se atreviera a llorar, ya podría hacerlo en cuanto el menor se fuera, otra vez.

—Te lo devolvería solo para que lo pusieras en mi dedo anular y me convirtieras en tu esposo —le sonrió ligeramente. Los ojos y boquita de Yoongi se abrieron a la par, incrédulo de lo que había escuchado.

—¿Hablas en serio? —preguntó, sin poder evitar esbozar una sonrisa con ilusión.

—No ha pasado un solo día en que no te piense, en que no anhele tus caricias, tu calidez, tus besos, todo de ti Min Yoongi —se acercó más—. Sé que te hice daño, pero déjame demostrarte que puedo hacerte feliz, Yoon, déjame ganarme tu corazón.

—Mi amor —susurró, rodeando con delicadeza la cintura del menor, el cual se limpió la primera lágrima al escuchar a Yoongi llamarlo así. —Tú has tenido mi corazón desde aquella mañana de septiembre en que te conocí, no tienes nada que demostrarme, bebé, no importa cuánto tiempo pase, tú siempre eres y serás el amor de mi vida, Kim Taehyung.

—Tú has sido mi primer y único amor, Yoongi —acunó su rostro, limpiando las pequeñas lágrimas que se desbordaban por el rostro del mayor—, con tu ausencia, las ganas de amar se me fueron también, y solo ahora y aquí, entre tus brazos, soy plenamente feliz.

Rozaron sus narices, sonriendo y llorando de felicidad, antes de fundirse en un tan necesitado beso que curó cada fragmento roto de sus corazones. Saborearon la boca dulce del otro, disfrutaron de los suaves labios que encajaban tan perfectamente y sintieron un cosquilleo que recorrió sus cuerpos, aferrándose más al otro.

Sabían que todo había valido la pena, y que si debían sufrir nuevamente todo lo vivido, con tal de volver a tenerse, lo harían otra vez.

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Aaaaaaaiñññ todos piciosos 💜  Si mis cálculo no fallan, quedan dos capítulos más :3 Sigo escribiendo el capítulo final y este fin de semana viajo, maybe me inspiro y saco extras, nu sé.