¿Pesadillas?
JOHAN
- Hola bonito ¿que haces aquí tan tarde? - habla él hombre con barba espesa.
Lo ignoro y sigo caminando, debo llegar rápido, estoy muy angustiado.
- Hey, es muy peligroso que andes aquí tan tarde - un sujeto aparece no se de donde pero se sitúa frente a mi bloqueando mi paso.
- Un niño rubio, un poco delgado debo decir - escucho a otro sujeto, volteo y es un pelirrojo ebrio. Hasta aquí puedo sentir el hedor a alcohol.
Abro los ojos rápido.
Mierda.
Me levanto y empiezo a caminar de un lado a otro por mi alcoba. Llevo mis manos a la cabeza desesperado.
Es pasado, debo dejarlo atrás. Me repito.
Es pasado, debo dejarlo atrás.
MIERDA, tomo la lámpara que esta junto a la cama y la arrojo con tanta fuerza que se rompe cuando hace contacto con la pared.
- Johan ¿Estás bien? - la voz de Emma.
- Lárgate- le digo, no puede verme así.
¡Dios Johan controlate!
Rápido me coloco jeans negros y una camiseta azul y bajo rápido, ni siquiera digo los buenos días, solo saco el auto que papá me regalo cuando entré a la universidad y empiezo a manejar rápido apretando con fuerza el volante.
Cálmate, es pasado.
Me sigo repitiendo una y otra vez.
ERES LO SUFICIENTEMENTE HOMBRE MALDITA SEA.
Estacionó cerca de los dormitorios del campus y bajo rápido dirigiéndome a uno en específico, sé que está ahí, abordo el ascensor al cuarto piso y no me preocupo en tocar, solo abro y la veo acostada haciendo que se siente al verme, volteo a cerrar con pestillo y me quedo así, de espaldas.
No dice nada, solo me abraza por detrás - Sácalo - me dice.
Los sollozos no se hacen esperar mientras que ella me abraza con fuerza, me siento tan desgraciadamente mal que a veces no se en qué voy a parar - eres fuerte - me habla - eres valiente, importante y valioso, repítelo siempre en tu cabeza porque lo eres, nada de lo que pasó fue tu culpa.
- Eso lo sé.
- No fue tu culpa.
- Ellos fueron lo que lo hicieron - me volea tomando mi rostro.
- No es tu culpa.
- Lo sé, pero me duele - lloro - me atormenta y no se cómo lidiar con eso.
- No es tu culpa - recalca.
- ¿Ah no? - digo ahogándome
- No lo es - me dice - no lo fue y jamás lo será, tu no mereces vivir con eso, mereces superarlo y ser feliz.
- ¿Acaso alguien como yo merece vivir una vida normal?
- Por supuesto que si, tú más que nadie.
Mis labios tiemplan y no hay forma de describir la forma en la que me estoy sintiendo, alguien tomó una filosa navaja y me cortó.
- Perdóname por no ser tan valiente - le digo herido.
- Eres la persona más valiente que he conocido en mi vida - me dice con lágrimas en los ojos - todos los días te levantas de la cama y vives, has vuelto a comer, estas estudiando y eres de los mejores, eres el capitán del equipo y haces todo eso aún teniendo ese tormento por dentro, eso es de reconocerlo. No hables de esa forma de ti porque es abuso.
Deja que la abrace con fuerza mientras suelto todo, con ella no debo guardarme nada, sé que nunca me va a juzgar. Si no hubiera sido por ella definitivamente ya no estaría aquí, se encarga cada día de mostrarme lo bonita que es la vida, lo bonito que puede ser incluso el dolor mismo ya que hasta ese horrible sentimiento te hace sentir vivo.
- Ningún proceso emocional es lineal - me dice - no importa cuántas veces deba decirtelo, lo haré y sin refutar porque no sabes lo jodidamente importante que tú eres para mi, así que por favor sigue aquí conmigo porque el mundo es mucho más colorido con tus hermosos ojos verdes.
NOTA: Capítulo corto pero emotivo ¿no? si estas pasando por un mal momento recuerda que ningún proceso emocional es lineal, siempre va a haber una salida, siempre habrá alguien que esté feliz de que estés en su vida, alguien que ríe aún por algún chiste que dijiste. Eres importante y el mundo es mil veces mejor contigo.
¿Qué opinan de Johan?
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Si Supieras
Teen FictionHay una línea delgada entre el amor y el dolor. Esa es la razón por la cual muchos prefieren alejarse del amor, pero la verdad, es que eres tú el que decide a qué lado pertenecer. Yo lo elegí a él, a ellos, a ambos. Dicen que no importa la razon, j...