Si Supieras

Capítulo 17

LA FINAL

SIMON

Hoy es el final del campeonato regional por lo que como en todos partidos, los chicos me irán a apoyar.

Por lo general, siempre son los jueves, pero esta vez decidieron hacerlo el día viernes. Mi mamá está emocionada por el hecho de que esté por pelear el primer lugar, el año pasado quedé en cuarto así que estoy muy nervioso.

- Voy a comprar lo necesario - mi mamá me pasa al lado en la sala.

- Mamá, ni siquiera sabes si voy a ganar y ya estas como loca preparando una fiesta - le digo.

Resulta que de lo emocionada que está quizo organizarme una fiesta en casa con los chicos de la escuela.

- Además, me da cierta vergüenza  ¿qué tal si pierdo?- le digo y ella forma una línea con sus labios.

- Eres muy bueno, no vas a perder y aunque así fuera siempre voy a estar orgullosa - toma mi mejilla - además, es una cena no una fiesta - me recuerda- serán solo tus amigos cercanos.

- Esta bien - digo no muy convencido.

Se despide y se marcha. Subo a mi habitación, tomo mi mochila para ir por Emma y marcharnos a la escuela.

Salgo de casa y la veo, ambas están sentadas en la entrada de su casa, camino y ellas voltean en mi dirección. Mis ojos se encuentran con los de ella y cada vez me convenzo más en que es lo más hermoso que he visto.

- Buenos días - ambas me saludan cuando me acerco mientas se levantan.

- Buenos días- les respondo con una sonrisa de boca cerrada.

Emma toma su mochila para después despedirnos de Melany y caminar hacia la escuela.

- Mamá me hará una cena hoy por haber llegado a la final - le comento mientras caminamos.

- ¿Debo ir formal? - pregunta.

- Te diría que no pero lo mejor es que si - le digo - ya sabes como es Eleonor Jackson.

- Sí que lo sé- me dice riendo.

- Esta de más aclarar que Melany esta invitada - le aclaro ante de que pregunte - las espero a las 6:30.

- Ok - me sonríe.

De pronto su sonrisa se borra y pasan varios minutos así, se perfectamente la razón así que me atrevo a hablar.

- Se acerca la fecha - le digo y ella solo asiente sin decir nada - entendería si no quisieras ir hoy - le digo.

Y es la verdad, su papá está a dos meses de cumplir 10 años, aún falta tiempo pero nunca es fácil para ella. Y eso es algo comprensible, es decir, hablamos de su papá obviamente le duele.

- Descuida, ahí estaré- me dice luego de un rato y yo sonrío- no todos los días llegas al final de un campeonato- me dice sonriéndome y la abrazo.

- Gracias- le digo - y recuerda que debes seguir avanzando, para eso estoy yo, para ayudarte a hacerlo.

Nos separamos y seguimos caminando, me esfuerzo por hacerla reír y lo logro. Me encanta verla reír, definitivamente podría hacerlo todo el día y jamás me cansaría. Llegamos a la escuela y las clases transcurren de manera normal. Todo marcha bien, hasta que llega la hora del descanso.

- ¡Idiota! - Thomas le grita a Daniel que le mojo la camisa de soda.

- Tu fuiste el que se atravesó- le responde muerto de risa.

- ¡Tu eres el único anormal que agita la soda antes de abrirla! - habla furioso mientras que yo observo la escena sin parar de reír.

- ¡Hey! - la escucho y mi risa acaba de golpe - dejen de pelear chicos.