Un amigo
EMMA
Simon ha dejado de hablarme y desconozco la razón, de la noche a la mañana tuvo un cambio repentino y ya van tres días de que no pasa por mi para ir a la escuela. En el descanso ni siquiera voltea a verme y se va cuando llego yo.
Hoy decidí enfrentarlo, no sé qué le sucede pero tendrá que darme una explicación. Madrugue más de lo normal por lo que si levantarme de por sí ya es un sacrificio, hacerlo más temprano lo es el doble.
Estoy sentada en la entrada de mi casa a espera que mi amigo salga. La brisa fría de la mañana acaricia mi rostro y se siente bien, últimamente me he sentido bastante bien, bastante tranquila y eso es un logro para mi.
O al menos eso quiero pensar...
Me levanto enseguida cuando Simón pasa al frente, corro y lo tomo del brazo haciéndolo voltear hacia mi
- ¿Cuál es tu problema? - voy al grano.
- No se de que hablas- dice serio y se da la vuelta para continuar caminando pero lo vuelvo a tomar del brazo.
- Sí que lo sabes - digo molesta - me ignoras, ni siquiera pasas por mi, de la noche a la mañana cambiaste conmigo y quisiera saber porqué.
Me ve en silencio por unos segundos hasta que su gesto se relaja soltando un suspiro, seguido de eso me abraza y yo le correspondo.
- ¿Qué pasa? - le digo.
- Simplemente soy un idiota, lo siento.
- ¿Estás bien? - digo separándome.
- Supongo que te debo una explicación.
- De acuerdo - le digo y caminamos juntos hacia la escuela.
*************
Nos encontramos en su habitación acostados en la alfombra. Al salir de la escuela almorzamos en su casa y seguido venimos aquí.
- ¿Qué es lo que sucede?
Duda unos segundos que me hace pensar que no hablará hasta que al fin lo hace.
- Yo... - veo duda en su rostro
Alzo una ceja invitándolo a seguir hablando.
- No tienes que darme ninguna explicación si no quieres - hablo al ver que no dice nada.
- Te la debo...
- No es necesario- le interrumpo - Descuida.
- ¿Tu no tienes nada que contarme? - pregunta y considero el decirle sobre George y yo.
- No - suelto un dramático suspiro - bueno... si hay algo de lo que quiero hablar.
- Te escucho - dice recostandose sobre sus codos.
- Últimamente me he sentido mejor, no lo se, más en paz - mentira - y pues... en casi un mes serán 10 años y creo que quizá ya sea tiempo de avanzar - creo que lo digo más para creérmelo yo.
- Me alegra mucho escucharte decir eso - me sonríe mientras me siento.
- Yo puedo ¿cierto? - pregunto dudosa.
- Emm, tu puedes con todo - me abraza y ambos recostamos la espalda en la cama.
Dejo la cabeza sobre su hombro, en silencio mientras el juega con uno Hot Weels entre sus manos. Siempre le ha gustado coleccionarlos por lo que le he regalado unos cuantos
Sonrío al notar que el que sostiene es el primero que le regalé, es la camioneta de Scooby Doo.
- Sea lo que sea que te esté haciendo sentir mejor, por favor no lo sueltes - habla - si te hace sentir en calma aferrate, aferrate a lo que te hace bien y lucha siempre por encontrar tu tranquilidad que yo siempre estaré a tu lado para verte triunfar.
No digo nada, solo entrelazo nuestros dedos y no se porqué noté cierta tristeza en lo que me acaba de decir.
-Yo siempre estaré para ti - agrega - siempre lucharé por ti.
Levanto mi rostro y noto una lágrima deslizarse por su mejilla derecha. Alzo mi mano y con la parte de atrás limpio la misma.
- ¿Porqué lloras? - susurro.
- Lloro porque aferrarte esta bien pero soltar para que alguien más obtenga su tranquilidad también lo está - se le corta la voz.
No entiendo lo que me dice pero sus palabras se quedan en mi mente grabadas.
Lo abrazo y esta vez soy yo la que lo consuela y no él a mi, llora entre mis brazos y no se si sea por nostalgia o de verdad esté triste, y si lo está ¿porqué?
Dejo que se desahogue y ahora me doy cuenta de lo difícil que ha sido para todos tener que lidiar conmigo, verme así, verme en mis ataques de pánico. No solo me daño a mi, sino a ellos también, eso significa que soy... ¿dañina para George y tío Allan?
No me perdonaría jamás el hacerles la vida miserable a ellos también solo porque la mía lo es.
Aunque me alegra que al fin yo sirva para algo más que para llorar, nunca había visto a Simon así y eso me parte el alma
¿Como se sentirán ellos cuando yo lloro?
Esa pregunta ha flotado en mi cabeza por cinco años, y me alegra el hecho de que dejara de hacerlo porque ahora sé lo que se siente cuando alguien que amas está mal.
Esta situación me hace caer en cuenta de la realidad, y la realidad es que no, no estoy bien, no estoy en paz... a excepción cuando estoy con George, y eso esta mal porque inconsciente puedo traer a Goerge a mi mierda.
Y es irónico porque quiero que este conmigo, lo quiero conmigo porque me brinda paz, él me ha dado la paz que he necesitado por mucho tiempo.
"Esta bien aferrarte a lo que te hace bien."
Las palabras de Simon se repiten en mi cabeza. Aunque pueda que sea egoísta y ridículo querer depender de George cuando él en algún momento se irá, y es que ni tengo ningún derecho de exigirle que se quede porque... ¿Qué tal si no soy capaz de sanar mi herida? ¿Seguiré sintiéndome así para siempre? Eso no es justo para él, no es justo tener que lidiar conmigo, por lo que si el se quiere apartar algún día yo lo entenderé.
Acaricio la espalda de mi amigo y se queda dormido en mis brazos, recuesto mi cabeza en la suya cerrando los ojos pensando en todo.
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NOTA: capítulo corto. 👀
Creo que tod@s sabemos la razón del llanto y las palabras de Simon. 💔
Recemos por qué Emma siga los consejos de Simon y pueda seguir adelante.
#TodosCreemosEnEmma 💙
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Si Supieras
Novela JuvenilHay una línea delgada entre el amor y el dolor. Esa es la razón por la cual muchos prefieren alejarse del amor, pero la verdad, es que eres tú el que decide a qué lado pertenecer. Yo lo elegí a él, a ellos, a ambos. Dicen que no importa la razon, j...