Amor a media voz

3| La disculpa

Minimaratón 2/2

Primer capítulo narrado por Elena <3

Elena

Cuando salgo del estudio, estoy más acelerada de lo que me gustaría. Ese capullo no debería afectarme así. Ni siquiera debería haberme enfadado. No merece un segundo de mi tiempo, y, sin embargo, desde que nos besamos anoche, no dejo de pensar en él. En ese estúpido beso. En la forma de tocarme. En sus manos y sus brazos tatuados.

Suspiro, hastiada. Esto, en un primer momento, no habría pasado si Logan no me hubiera provocado. ¿A qué venía lo de presentarse en mi trabajo y montar un numerito? Al parecer, le han llegado rumores de que estoy saliendo con otro tío. No es verdad. No he vuelto a estar con nadie desde que lo dejamos. Bueno, si quitamos el desliz de anoche. Pero, aun así, ¿qué le importa lo que yo haga con mi vida? No tiene ningún derecho a hacerlo. Como consecuencia del encontronazo, salí huyendo de la barra y me camuflé entre el gentío para perderlo de vista. Salir de la discoteca habría sido un error porque me habría encontrado enseguida, así que entré al baño de chicos, que era lo que más cerca me pillaba; el de chicas está un poco más lejos.

Después de eso, él entró. Me sorprendió verlo tan ido, y admito que al principio solo pensé que se trataba de Logan, que al final había conseguido seguirme. Pero entonces lo vi, y creo que el pulso se me aceleró solo con verlo. Tenía el pelo alborotado y la mirada fija en el frente. Me obligué a ignorarlo y seguir con lo mío, pero poco después sentí su mirada sobre mí durante demasiado tiempo. Estuve a punto de soltarle un improperio, pero cuando me giré de nuevo para mirarlo, en sus ojos no había más que un brillo especial. Un brillo diferente del que suelen tener otros tíos cuando me miran. No había nada de lascivia.

Al parecer, solo fueron primeras impresiones, porque es un capullo de primera. ¿Qué pretende, que sea yo la que dé mi brazo a torcer cuando ha sido él quien ha insinuado que no soy válida para el trabajo? ¿Después de haberla cagado y no haberse disculpado siquiera? ¿Qué problema tiene?

Suelto una maldición cuando voy a entrar a mi piso y se me caen las llaves al suelo. Estoy alterada. Tengo que relajarme. Con suerte, no volveré a verlo más. En cuanto entro, cojo las cartas que hay en la entrada y apoyo la espalda contra la pared. ¿Puede ir peor este día? Bueno, al parecer, sí, porque cuando me empieza a vibrar el móvil, veo que Isabelle me ha mandado dos mensajes y el mundo se me cae a los pies.

¿Dónde estás?

Nos toca turno de mañana para limpiar todo esto

Turno de mañana y de noche, genial. El trabajo no es que sea una maravilla, y tampoco es que me paguen muy bien, pero necesito el dinero para pagar el alquiler todos los meses. Por eso fui a esa dichosa entrevista de trabajo como ingeniera de sonido. Me gradué en producción musical hace poco, pero al no encontrar un trabajo tuve que buscar otra cosa, y acabé en esta discoteca de mala muerte, a pesar de ser la más famosa de Florida.

No debí haberme marchado del estudio. Necesito el trabajo. El sueldo de la discoteca me viene corto la mayoría de los meses. Pero cada vez que recuerdo a ese idiota... No. Tengo que dejar de pensar en él. Lo hecho hecho está. Decido responderle a Isabelle:

Se me había olvidado por completo

Salgo ya

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Platinum no es más que una discoteca. Cuando está llena, parece muchísimo más pequeña, pero ahora, vacía, es demasiado grande. Cuando llego, Isabelle ya está ordenando los vasos y las copas en las estanterías.