Starbucks Coffe © #Bubbline

Domingo/Lunes

Domingo 2.0

-Bonnie, hey, espera, ¿Qué piensas hacer? Ni loca voy a permitir que te acerques a él-me habló en un tono de advertencia la pelinegra-.

-¿Quién ha dicho nada de ir a verlo? Voy a mandar una patrulla a su dirección-me apresuré en aclarar mis intenciones-Para que lo dejen pudrirse dentro de la cárcel en la cadena perpetua que se merece-.

-Oh, bueno, esa idea...Me gusta más-se frenó en seco-Pero...Hay un problema-.

-¿Cuál?-me extrañé ante su objeción-. Marceline intentó ofrecerme una mirada con el propósito de que pudiera adelantarme a lo que estaba por decir, pero se me dificultó el poder desvelarlo, así que terminó diciendo:

-Olvidé mencionar que...Le rajé su cosa-.

-¿Su... cosa?-Intenté que fuera más específica-.

-Si, ya sabes, su...-Empezó a hacer señas graciosas con las manos que esta vez si consiguieron aclarármelo de antemano-Su "manguera"-. 

Entonces comencé a reírme, inevitablemente, a carcajadas.

-¿En serio? Jajajaja, ¿Y que tiene eso de malo?-.

-Pues que...Quedaron mis huellas en el cuchillo-Se rascó la nuca, asumiendo ese pequeño detalle que había dejado pasar por alto-.

-¿Y? Él podría haberte obligado a hacerlo, la poli no creerá a un desquiciado mental-Sugerí-.

-¿Tu crees?-Preguntó en un tono insegura-Aunque lo hice mientras él estaba inconsciente, así que...-. 

Volví a soltar otra risa, menos fuerte que la anterior pero igual de descojonante.

-¿Lo dejaste inconsciente?-. Ella afirmó con la cabeza lentamente, encogiéndose de hombros.

-Pues más motivo entonces para que no supiera lo que realmente pasó-Me mofé una ves más, antes de finalmente disponerme a tomar el teléfono para enviar a esa patrulla en dirección a la casa del ex de mi novia-Y, ¡Vualá! Ya están en camino-expresé con alegría en un tono que sonaba como si me hubiera sacado un gran peso de encima-.

-Y... ¿Qué pasa con Ricardo?-me preguntó, cambiando de tema-Porque mañana ya es lunes y supongo que volverás a...-.

-Tu padre me dijo que la policía también se lo llevó, por intento de violación-Le comenté, recordando la charla pasada que habíamos tenido ese mismo día antes de que luego me dejara el finde libre-.

-Oh, y... ¿Ya se lo han llevado? A prisión, quiero decir...-Quiso saber-. Me encogí de hombros. 

Lo cierto es que desconocía su paradero actual desde lo que había pasado en adelante, pero por otro lado tampoco me importaba lo suficiente como para ponerme a averiguarlo.

Cuanto más lejos de mí y de nosotras, mejor.

-Quizá tu padre sepa más al respecto-Volví a sugerir, en el mismo tono con el que quería que esa situación ya no diera más vueltas en mi cabeza: Despreocupada-.

*2 Semanas Después* / Lunes.

Todo había vuelto relativamente a la normalidad tanto desde el incidente con Ricardo como con Ash. 

A Bonnie y a mí nos habían trasladado hacia la misma oficina de trabajo por seguridad y aunque quizá me costara más de lo habitual el poder concentrarme, no podía estar más feliz de tenerla a mi lado incluso en el ámbito laboral. 

De cierta forma, algunas cosas habían mejorado, cómo esta.

Pero otras...

-Mierda, en seguida vuelvo-dije con rapidez al guarda de seguridad de nuestra oficina para dirigirme a toda velocidad hacia el baño más cercano-. Me habían invadido unas ganas repentinas de vomitar que no pude contener.