El último usuario.

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(Nathan)

Los herreros nos ayudaron en bajar. Les dije que no debían preocuparse por mí y que de los demás debían tener prioridad. Tomando el aire, logrando quitarme por unos momentos la máscara sin que nadie me vea, pude recuperarme. Ese combate realmente me dejo cansado, tanto de correr, pelear y usar más alientos. 

-Realmente los combates cada vez serán difíciles.-murmuraba.

Con la muerte de los hermanos de la noche, cada vez ellos se lo toman en serio. En especial esas sombras, está última hablo de su maestro o jefe, no lo he visto, pero de que haga algo... lo hará. 

-No desesperes.-me habla Priscilla. -Aún no los has visto, si estás con vida después de eso y después de sobrevivir a esa prueba y a esto y a todo lo demás que has vivido, puedes con ello.-

-...-las palabras de Priscilla... me ayudaron. Solo pensar que estos tipos cada vez se vuelven fuertes, yo también debo hacerlo, cada vez el número de los hermanos de la noche disminuye... ya quiero llegar al octavo hermano. No se lo perdonaré, aunque me suplique, nada. Acabaré con esa basura... -Gracias Priscilla.-

Notando que mi mascara mostraba parte de mi ojo, traigo otra y esta la rompo. Menos mal que me asegure con llevar dos más, pensé que se podría destruir con este tipo de vida que tengo, ahora con esta habilidad de equipo, puedo llevar las que sea sin la necesidad de preocuparme.

Mientras volvía con los demás, volví con ese herrero de pacotilla para que me diera entrega de lo que le pedí.

-Mi pedido, ¿donde está?-le pregunte.

Lo podía notar que estaba limpiando el equipo, el herrero llamado Andre se me acerco para hablarme.

-Está listo, solo lo está limpiando para hacerte entrega de esta obra maestra. Fue realmente complicado hacer algo así, pero... lo conseguimos.-

-... Entiendo. Lamento los problemas, ¿están bien?-

-Si, gracias por cubrirnos. Pero realmente me sorprendiste que hayas sobrevivido contra una sombra.-

-¿Sombra?- actuaba confundido, él sabe algo, quería saberlo. -Ese oponente ¿que era?-

-... Veo que no lo sabes. Esas sombras son alumnos o vasallos o esclavos de otras sombras más poderosas. No se sabe mucho como se unen, pero se decía que había una forma de matarlas, aunque eso es una mentira, ya que pudiste vencerla.-

-¿Una forma? ¿Qué forma era esa? Si puedo preguntar, claro.-

-Dicen que para matar a una sombra... se necesita tener parte de su poder o ser una de ellas. Eso es lo que escuche, pero veo que es mentira. Buen trabajo.-

-Si. Claro, gracias.-

Así que de eso se trataba, no era un forma, es que veo que esa es la forma. Si se llegarán a enterar de mi poder... no quisiera pasar por eso. Pero al menos, di esperanza aunque... será mejor que haga algo para desmentir de esto antes que...

Pude sentir que algo se venía acercando, invocando la daga cubriendo al señor Andre desviando la shuriken del enemigo.

-¡¿Pero qué...?!-

Los herreros no dijeron nada, ya que estaban viendo lo mismo que yo veía. La forma de un guerrero, una vestimenta de un ninja, uniforme completamente negro, sus ojos brillaban de blanco, sus manos llevaba una garras y se podía sentir ese poder de él, esa sed de sangre.

-Desviaste mi ataque, solo quería matar al enano, pero veo que sobrevivirá por unos segundos más.-

-¿Quién eres tú?-le pregunte preparando la daga para el combate.