El Principe Taehyung ||KookV||

10

Un par de semanas después Taehyung y Jungkook se encontraban en Oxford en la casa de los Kim.

- ¿Me esperas aquí?

Jungkook le pidió a Taehyung que como ahora estaban comprometidos de manera oficial podía llamarle de "tú" y dejar del lado aquel termino de "Señor" que tanto le desagradaba.

- No me moveré de aquí -le sonríe-

No había nadie en la casa más que los guardias y sirvientes; el único que viva ahí era el padre de Taehyung, pero este se encontraba en una cita médica y Taehyung le había insistido tanto en ir, que no pudo negarse, esto porque según el menor tenía cosas importantes que no podía dejar que nadie mas tocará.

Conforme fueron pasando los minutos Jungkook comenzó a vagar alrededor de la casa; era una casa rústica enorme llena de colores neutros y fotografías de Taehyung y sus hermanos de niños. Jungkook sonrió al verlo disfrazado de un príncipe, esas paredes llenas de retratos daban una sensación de hogar, sentimiento que no tiene presencia en el castillo de Robinstein.

Se adentro al salón de baile riendo consigo mismo al ver los arbustos; el recuerdo de como conoció a Taehyung lo invade logrando que muerda su labio inferior reprimiendo un suspiro. Hace a penas año y medio se habían conocido y ahora estaban unos meses de casarse.

En el fondo del lugar se encontraba un viejo toca discos, al pasar su yemas pudo notar que estaba lleno de polvo; al parecer nadie lo había usado en mucho tiempo.

- Era de mi madre

- Taehyung, por Dios... -brinca del susto llevando su mano al pecho- me espantaste

Sin embargo Taehyung no le respondió, se colocó a su lado en silencio, acariciando el aparato, cerrando su ojos, recordando como su madre bailaba alrededor del salón, también el como él junto a Hyunjin aplaudían emocionados mientras Jennie bailaba a su lado.

- Tae... -acaricia su brazo- ¿Estás bien?

- Si... -asiente limpiando sus lágrimas- lo siento

¿Qué significaba ese piquete en su corazón al ver Taehyung llorar? Jungkook para ese punto tenía tantas preguntas sin respuesta.

- Creo que Jennie lo utilizo un par de veces, pero no sé si aún funcione -inspecciona- desde que se fue nadie lo volvió a encender... Le quitaré el polvo

De un momento a otro Taehyung lo dejo medio decente, maniobró con los cables y justo después un estruendo se presentó logrando que el disco comenzará a girar.

- ¿Qué fue lo que hiciste?

- Nada -se encoge de hombros- solo tuve que conectarlo la luz

La sonrisa llena de ingenuidad logra que Jungkook ría nervioso al sentir uno revoloteo en la boca de su estómago.

- Taehyung... -lo mirá- tu madre... ¿Ella...?

Taehyung suele hablar mucho y cuando lo hace tiende a ser muy expresivo con su rostro; es algo que Jungkook descubrió al ponerle bastante atención y aunque a veces no diga ni una sola palabra con sus muecas ya es más que suficiente para Jungkook.

- Perdón, no quise incomodarte

- A decir verdad, nunca antes nadie me había preguntado respecto a la situación con mi madre -suspira- mi mamá se fue de la casa cuando yo tenía seis o siete quizá, no recuerdo mucho solo que ella era muy bonita y que me quería mucho... Cada noche iba a mi habitación a darme un beso de buenas noches y... -un nudo se formo en su garganta- una noche llegó mi papá, solo apagó la luz y cerro la puerta, ella nunca más volvió, desde entonces antes de dormir solo podía pensar en que había hecho mal para que ella me dejara