𝐏𝐞𝐥𝐢𝐠𝐫𝐨𝐬𝐚 𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢𝐨𝐧 | Exequiel Zeballos

18

BRISA

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posta exe no da que caigamos
otro día hacemos algo y fue
21:22

mensaje de voz*
"Hola Bri soy Alan y quiero decirles que son bienvenidas en mi casa... listo Chango, cortá"
21:22

Sami y yo largamos una carcajada.

escuchaste Bri?
vengan dale
yo no las puedo buscar porque estoy medio
escabiado
pero ahí les mando mi chofer personal
asi que vayan preparandose
21:22

que chofer?
pasame ubi y vamos en uber
21:36

no nena
dale preparense, ahí le avise
21:37

—¿Que hacemos? ¿vamos?

Sam se encogió de hombros. —Yo quiero ir.

—¿Pero no te da cosa?

—Si un poco. Pero me deja tranqui el audio de Alan, onda si no nos mandaba ese audio por ahí te decía que no.

—¿Habrá mucha gente?

—Ni idea, pero pensa que es temprano para hacer una joda.

—¿Y que nos ponemos?

—Para mi ropa de salir a cenar, tranqui. Ellos jugaron hoy además, deben estar así nomas.

Las dos ya estábamos bañadas porque desde temprano teníamos la esperanza de que alguien nos invite a hacer algo, pero como nadie nos decía nada, fui obligada por la rubia a hablarle a Exequiel.

Claramente hubo una mini discusión de por medio porque yo estaba negada a hablarle pero ella me decía que tenía más relación que ella con Vicente, de hecho el ojitos claros ni le hablaba si no era en persona.

No me quedó otra que aceptar, porque yo también tenía ganas de hacer algo con ellos.

está abajo
Chevrolet cruze negro
22:02

Agarramos nuestras cosas y bajamos con miedo sin saber con que nos íbamos a encontrar.

Cuando pensamos que adentro del auto iba a haber un viejito canoso estábamos realmente equivocadas porque lo que vimos fue literalmente: el auto con rkt al palo, vidrios polarizados que enseguida se bajaron dejándonos ver a Luis Vazquez adentro guiñándonos un ojo y haciéndonos señas para que nos subamos.

Que pendejo del orto Exequiel, ¿¡como lo va a mandar a Vazquez a buscarnos!?

—Que carajo. —susurró mi amiga apenas modulando.

—Vamos, dale. —dije temblando un poco por el frío, con los brazos cruzados.

Sami se fue directamente a la parte de atrás así que me subí adelante.

Luis bajo un poco la música y se estiró para darnos un beso a cada una.

—¿Como andan? ¿les dijo el Chango que venía yo, no?

—Nos dijo que venía "su chofer personal"

—Así me tiene el gordo puto, de esclavo. —dijo y los tres reímos.

Amaba lo copado que era por dios, sin conocernos tiraba chistes y nos hacía sentir re en confianza.

—Perdon, le dijimos que ibamos en uber y no quiso.

—Tranqui, no me jode venir, es un toque. ¿Vos sos Bri, no? —Asentí con la cabeza. —¿Y vos como te llamas? —preguntó mirando a mi amiga por el retrovisor ya que estaba manejando.