Cálido Como Tú Corazón

CAPÍTULO 13

Me quedo mirando la entrada de la escuela aferrando mi mano derecha a mi mochila y la otra a mi celular que no dejaba de vibrar por los mensajes de Alex de seguro preguntando sobre cómo me encontraba y que me parecía la escuela.

Mateo en la mañana se propuso en irnos juntos y así enseñarme su escuela, pero me negué, si las miradas ya van a estar sobre mí por ingresar a la escuela a mitad de año no quiero aumentarle por llegar junto a mi hermano, sin más tragándome esta extraña sensación entro a la escuela, los pasillos estaban repletos de alumnos que platicaban o sacaban libros de los locker, miro de un lado para otro las señalizaciones sobre donde se encuentra la dirección o por lo menor coordinación pero no veo ninguno.

Estaba por preguntarle a una chica donde se encontraba la dirección que de eso alguien enrollo sus grandes y fuertes brazos desde atrás de mi espantándome soltando un chillido.

-Mi... Cami... -dejo de luchar por ser liberada al reconocer esa voz.

-Suéltame Manuel.

-Suéltala –aparece Samuel delante de mí con una mochila gris colgando de un hombro.

Manuel me suelta y lo volteo a ver mal, por poco me estruje como si fuera un peluche.

-Al parecer estar perdida –dice Samuel haciendo que lo voltee a ver- estas buscando la dirección ¿verdad?

-Sí, pero al parecer su escuela desconoce las señalizaciones que no veo por ningún lado.

Sueltan una risita- ahí un mapa de toda la escuela en la entrada, me sorprende que no lo hayas notado ya que esta grande y llama mucho la atención.

- ¿Enserio? Bueno estoy un tanto distraída, aunque estaré por tres días aquí aun así me pongo nerviosa –trago grueso y me pego un poco más a Samuel- todos tienen la mirada sobre mí y más ahora que se me han acercado ustedes.

Los dos volean a ver a su alrededor confirmando mis palabras todos unos disimuladamente nos estaban mirando otros ni siquiera se mutaron en disimular hasta murmuraban cosas.

-Ignóralos no estarás aquí para siempre –dice Samuel cubriéndome un poco más con su gran cuerpo de las miradas.

-Te acompañaremos hasta la dirección que te parece –propone Manuel haciendo que asiente.

Caminamos juntos por los pasillos de la escuela, se me hacía raro que Mateo no se encontrara con ellos ya que siempre están juntos, al parecer mi rostro estaba escrito la pregunta de porque no está con ellos que me comentaron que se encontraba platicando con uno de sus maestros sobre un proyecto que tienen que entregar este viernes a más tardar.

Ya que como también ellos tendrán festival como en mi escuela tienen muchos trabajos por entregar.

-Bueno hemos llegado.

Paramos frente a una gran puerta corrediza de cristal, podía ver muy claro como estaba repartido el área, una parte está repleta de escritorios para los profesores, cafetería y la oficina del director.

-Gracias, chicos.

- ¿Te veremos en el receso?

Pregunta Samuel, me les quedo viendo por un largo tiempo, no estoy segura si en pasar el receso con ellos me incomoda todas esas miradas sobre mí, pero también no quiero pasar sola en el almuerzo así que...

-Les escribo, ¿vale? – es mejor, así veo cómo va la cosa en el día y decido si comer con ellos oh no.

-Está bien, le diré a Mateo.

Chico eso se despiden, los veo por unos segundos para luego enfocar toda mi atención a la oficina. Al acércame a la puerta este en automático se abren, los profesores estaban en lo suyo, unos checando papeles, otros platicando y comiendo y uno descansando ya que tenían un libro sobre la cabeza o una toalla.