Siempre contigo II: La Guía del Rukh {Aladdin}

Capítulo 24...Un momento de aprendizaje

¡Hola gente! :3

Aquí les dejo:

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&-&-La guía del Rukh-&-&

Capítulo 24...Un momento de aprendizaje

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Agitaba la Espada Real de Amón de un lado a otro luchando contra un oponente invisible.

Se sentía frustrado. Los otros estaban decididos a irse en tres días más, mientras que él todavía no tenía la menor idea de qué hacer. Era plenamente consciente de que no podía quedarse en Sindria mientras sus amigos se iban, simplemente se sentiría una especie de parásito. Tenía que decidir de una vez lo que haría.

Decidiendo pensar mejor en otra cosa, recordó las últimas horas. Ari y Aladdin estuvieron toda la mañana juntos -la niña incluso durmió con ellos-, y el Magi parecía mucho más tranquilo y contento. En cuanto a Hakuryuu, desde el día anterior por la tarde, antes de ser casi asesinados por la Princesa de Sindria, había estado comportándose de una forma un poco extraña, como si su cabeza estuviera volando en algún lugar muy lejano, y esa mañana estaba incluso peor.

Se detuvo un momento mirando su espada. Otra cosa que lo tenía muy cabezón era el hecho de que todavía era incapaz de realizar el equipo Djinn de cuerpo completo, y era algo muy frustrante, sobre todo porque no entendía por qué no podía hacerlo.

Con la frustración y el enojo enmarcados en su expresión, agitó la espada en una estocada. Dado que tenía los ojos cerrados, los abrió con sorpresa al escuchar un grito.

—¡Eso fue muy peligroso! ¡Ten más cuidado!—Exclama Kougyoku agachada en el suelo.

—L-Lo siento Kougyoku—Dice el rubio nervioso, no había sido su intención—¿Qué haces por aquí?

—Estaba paseando cuando te escuché gritar—Contesta la pelirrosa levantándose—¿Estabas entrenando?

—Eh, si, así es.

—Je je...en ese caso, déjame unirme—Toma su Contenedor de Metal—No he entrenado desde que llegué a Sindria y estoy algo fuera de forma. Sería un buen ejercicio.

Liberó su armamento Djinn bajo la atónita mirada del Saluja.

¡No! Aún si ambos tenían la misma posición en la realeza, pelear contra una Princesa era algo que no podía hacer. Simplemente no.

—Oh, vamos. Un entrenamiento rápido estaría bien—Insiste la chica con una mueca algo infantil—Djinn de la tristeza y el aislamiento, préstame tu poder y conviérteme en una gran maga. Habita mi cuerpo ¡Vinea!

Alibaba vio con asombro como el cuerpo de la Princesa era cubierto por su equipo Djinn completo. Era algo increíblemente fantástico. Y no era el único que lo pensaba. Desde el palacio, en un piso superior, los Reyes y quienes los acompañaban vieron la transformación de la chica bastante intrigados, especialmente la Reina.

—Ese es...el equipo Djinn de la Princesa Kougyoku—Comenta la castaña atrayendo las miradas a ella, en especial porque una sonrisa indescifrable se dibujó en sus labios.

—Sé muy bien lo que estás pensando. Que ni se te ocurra—Advierte Fanny colocándole una mano en el hombro.

Denali le devolvió una mirada inocente, como si intentara decirle que no quería hacer nada malo...pero la sonrisa que volvió a esbozar después, solo preocupó más a la doctora.