AMÉN

Capítulo 24

❤️⭐️Voten Mucho⭐️❤️

Por motivos "importantes" tuve que venir rápidamente con Alessio a la casa, y así dejar a Lucas con la palabra en la boca sobre lo que podríamos hacer ante toda esta situación de mierda.

Sin muchas preguntas, me subí al vehículo que me esperaba, lo que menos quiero es que Santino comience a sospechar de Lucas y luego le haga algo. Ahí yo me muero.

-Te lo digo Isabella, Santino pidió que te trajeran rápidamente a la casa, no dio más explicación. -

Dejo de insistir y solo asiento.

La verdad es que tengo una sonrisa boba por lo que acaba de pasar. Para ser sincera, estaba más nerviosa yo que él, y pensé que iba a ser horrible nuestra primera vez, pero don dominante me impresionó.

Yo ingenua creía que sería de lo más romántico y asustadizo... la que se terminó asustando fui yo. Con esa forma tan delicada de follarme me removió hasta la conciencia.

Mi manera de tener sexo es completamente rápido y fuerte, no me gusta que duren más de veinte minutos, siento que me consumen la energía y solo tengo que correrme yo para que termine la sesión.

Ahora es diferente, yo no tengo sexo, y tampoco le llamaría hacer el amor, solo... no lo sé.

Estas muy enamorada.

¿Es malo?

En parte, pero dime, ¿Quién no se enamoraría de semejante bombón?

Bueno también...

Entrando a la casa, veo una camioneta estacionada y me es familiar, asique con intriga espero que llegue mi vehículo a la puerta de la casa y bajarme con mucho apuro.

Veo a una anciana llena de canas y arrugas por doquier, le quedan fatal.

-Maite. - ni si quiera le sonrío.

- ¡Niña se puede saber dónde andabas! Cuando seas la esposa de mi hijo debes estar siempre en la casa, imagínate llega visita y andas quizás por no sé dónde. - reprocha furiosa.

-No se altere Maite por Dios, le puede dar un infarto, qué se yo. - salgo del living y me dirijo a mi cuarto.

- ¡¿Dónde vas?! - si así grita diariamente, no me quiero imaginar cuando le estén...

-A mi habitación. - digo con simplicidad y flojera.

-Pues irás más tarde, ahora debes probarte los vestidos de novia. - ruedo mis ojos y bajo nuevamente la escalera que ya había subido.

Me toma del brazo y comienza a hablar, pero pongo tapones imaginarios para no matarla de aquí hasta llegar al salón donde se reciben las visitas.

Mi visión se amplía y con ella una fila de vestidos... los cuales... no quiero insultar... pero...

Son una mierda.

Una puta mierda.

-Estos han sido ocupados por mis antepasadas, solo debes escoger el que más te guste y ya. -

Veo costuras viejas, y solo falta que les tapen los ojos a las pobres mujeres para no mostrar demás, se repite un patrón de diseño al estilo princesa que se ven horribles con el tipo de tela el cuales optaron por ocupar, pedrería barata y... ¿Eso es una mancha?

-Debes entender que esto es más de lo que te mereces, somos mujeres finas y elegantes. Debes llevar el apellido en alto Isabella, ¿Entiendes? -

La miro y sonrío de lado.