Capítulo 5

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Pooooorfin nuevo cap y nueva portada de :D ¿Que os parece? Comentad sinceramente.

No dejeis de votar, porque veo mas lecturas y menos votos y me imagino que no gusta :(

ABBY

Lunes. ¿Quien no odia ese día de la semana? Bueno solo lo odias si tienes que madrugar para aguantar a un jefe insoportable o ir a clases. En mi caso, las clases.

Soy una persona todo lo contrario a madrugadora. Amo dormir, y teniendo en cuenta que siempre me quedo hasta las tantas leyendo o estudiando, ¡normal que me encante dormir!

Me estoy riendo sola. Parezco una psicópata recién salida de la cama. Mi media melena rosinegra. Rosinegra...¿esa palabra existe? No pero la acabo de agregar al diccionario personal de Abby.

Rosinegra → Combinación de rosa y negro.

Bueno a lo que iba... que parezco una psicópata con los pelos revueltos y el pijama del monstruo de las galletas.

Una vez duchada y arreglada Livy y yo nos vamos a por nuestro desayuno a Starbucks. Losé, losé suena demasiado cliché, pero... ¿que le vamos a hacer? Nos pilla cerca de casa y camino a la universidad. ¡Todo un chollo!

Llegamos y mi mirada recorre todo el campus. ¿Que se supone que estoy buscando?

< A Dylan el idiota >

¡No, por supuesto que no lo estoy buscando a él! Ruedo los ojos. En ese momento mi mirada se encuentra con unos ojos avellana. Miro hacia la persona que le esta agarrando el brazo. Genial Dana. Vuelvo mi mirada hacia la del idiota y éste al notar el cambio de posición de mi cuerpo frunce el ceño.

Paso olímpicamente de lo que acaba de suceder y continúo con Livy hacia nuestra primera clase.

A la hora del almuerzo todos los universitarios se reúnen en la cafetería y ahora mismo no me siento con ganas de estar rodeada de gente por lo que salgo al césped y me pongo a leer.

Estoy tan concentrada en la lectura que me asusto cuando veo una silueta sentarse a mi lado.

- Joder que susto me has dado idiota. No vuelvas a hacer eso porque a la próxima te golpeo - Gruño.

Se ríe.

- ¿Qué te hace tanta gracia? Me podría haber quedado en el sitio.-

-Si bueno, siento eso. ¿Porque estas aquí sola?

- Me apetece estarlo, quiero un momento de silencio - Digo remarcando el ''apetece'' y ''silencio'' para que se de cuenta que ahora mismo me molesta.

-Entonces me quedaré aquí en silencio. También me apetece un minuto de tranquilidad. - y se tumba a mi lado.

Pasamos parte del almuerzo de esta manera. Yo leyendo y el tumbado con el brazo por encima de los ojos. Por un momento me quedo mirándole pensando en que si él fuera así todos los días nos podríamos llevar bastante bien. Pero entonces me dice algo que ahuyenta todos esos pensamientos lejos, muy lejos.

- Necesito que seas mi novia por una noche.

-¿Perdón?

- Me has oído, solo una noche. Ally le ha hablado a mi padre de ti. Desde que mi madre murió digamos que nunca le he dado una alegría, ya sabes... por lo que cuando Ally te mencionó Will me dijo que se alegro demasiado por ser capaz de rehacer mi vida. Lo llamé y le intenté explicar lo que había pasado, pero no me creyó. Por lo que el sábado vendrá a casa, nuestra casa, a cenar...-

- Espera...¿Nuestra casa? ¿Desde cuándo es NUESTRA y porque no me he enterado? ¡No pienso ir! Puedes llevarte a Dana, tu padre no me conoce así que no notará la diferencia. Llévatela a la cama la noche anterior y explicáselo. ¡Estará encantada! - Digo con un tono más agudo de lo que espero.

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