DYLAN
Despertar con la persona que más quieres a tu lado es un regalo que no muchos descubren. Y yo soy una de esas personas que lo había descubierto y lo acaba de perder.
Le he dicho que la quiero, dos veces, dos putas veces y lo que hace es desnudarme y dejarme borracho perdido en la cama. Solo. Intento levantarme para ir tras ella, no quiero que me deje, no en este momento, nunca quiero que me deje, pero la habitación da mil vueltas por encima de mi cabeza y pienso que lo mejor por hoy es quedarse durmiendo.
-Te quiero.- La voz más dulce que pensé que no volvería a escuchar me despierta.
No ha debido pasar mucho tiempo desde que me he quedado dormido. En lo primero que me fijo en que tiene los ojos rojos y llorosos. ¿Ha estado llorando?
-¿Has estado llorando?
-Puede que sí, puede que no.
-Que estes sentada justo encima mío en estos momentos no es muy buena idea.- digo en un intento por romper la incomodidad del momento.
-Lo noto.- Sonríe con una sonrisa floja.
-¿Que pasa preciosa?
-Te quiero.- me da un beso.- Lo siento.- me da otro beso.
El beso al principio es uno tierno pero realmente no estoy pensando con la cabeza en estos momentos por lo que lo profundizo. Mi lengua pide paso a su boca y ella encantada lo permite. Le doy la vuelta a la situación situándome encima de ella. Deslizo mis labios dejando pequeños mordiscos en el cuello que le producen escalofríos. La ropa que me molestaba para seguir mi exploración queda fuera de plano en menos de dos minutos. Me tomo mi tiempo para observarla como nunca antes lo había echo.
Su respiración se va haciendo más profunda a la vez que su pecho se va elevando chocando contra el mío. Sus manos se agarran con fuerza a mis hombros cuando me siente. Empujo hacia delante y sus uñas se clavan fuertemente, pero ahora no estoy para concentrarme en un ligero dolor como ese.
Los gemidos que salen por su boca son cada vez más presentes junto con mis gruñidos hasta que los dos somos uno y explotamos.
-Te quiero.- Mi voz suena demasiado grave.
Los ojos de Abby me observan. Me desplomo a su lado quedándome dormido al instante.
ABBY
Intentando que Dylan no se despierte cuando quito sus brazos de mi agarre y haciendo el menor ruido posible, me levanto de la cama y me dirijo al salón.
Llamo a Tyler después de leer los mensajes que ayer dejó pero no me lo coje. Debe estar durmiendo la marmota. Llamo a Livy y quedamos en ir de compras, necesito renovar parte de mi armario y Liby nunca dirá que no a un día de compras
Dejo un vaso de agua y una pastilla para la resaca en la mesilla de Dylan para cuando se levante junto con una nota.
Voy de compras con Livy, llámame si necesitas cualquier cosa.
A♡Nos encontramos en el Starbucks del centro comercial. Antes de nada nos sentamos a tomarnos nuestro café matutino para coger fuerzas e ir directamente a la carga.
-¿Has arreglado lo que sea que te pasaba ayer?-da un sorbo- Y no me digas que no era nada porque hasta ese dependiente guapo de ahí sabe que te pasaba algo.- Señala al dependiente y me río.
-Sí, todo bien.- La sonrisa de idiota de mi cara no se me ha ido en todo el día y creo que para alguien que me vea puede llegar a ser algo irritante.
ESTÁS LEYENDO
WILD
Teen Fiction¿Qué pasaría si dos personas que se llevan mal a rabiar tienen que trabajar juntas? ¿Qué pasaría si tuvieran que actuar como enamorados? ¿Y si la realidad supera la ficción? Para Abby de 23 años le es bastante difícil combinar la universidad con su...