Lauren pov
-Gavrel tiene días insistiendo en que quiere ver a Camila, estoy pensando en regresar a Miami hoy mismo-
Justin escuchaba con atención todo lo que le decía, sentado frente a mi.
Pasaron aproximadamente cinco días desde que Keana estuvo aquí, desde entonces ha estado llamando e inventando pretextos sobre el embarazo para verme. Esa mujer no desiste.
-Otra vez Alek quedará a cargo del negocio?-
No había pensado en eso hasta éste momento.
-Si, solo es cuestión de darle algunas advertencias de que hacer y que no, y de qué comportamiento debe tener en algunas ocasiones. Alek tiene potencial solo es un poco estúpido-
-Te hará otro lío Lauren-
Me encogí de hombros.
-De todos modos estaré haciendo mis negocios desde allá, no es que Alek se quedará a cargo completamente-
Justin asintió.
-Entonces preparo todo?-
-Si, y di puedes envía unas flores a la tumba de Zayn-
Un silencio se instaló, Justin volteó a mirar al jardín.
-Aún te duele, no?- Le pregunté.
-Siempre me va a doler, es algo que no se supera-
Y de la nada un pensamiento vino a mi cabeza, la risa de Zayn mientras contaba algo gracioso y mi corazón se estrujó. Me estaba sintiendo triste.
-Yo tampoco puedo superarlo, pasan los años y parece que fue ayer. Lo extraño tanto, en momentos siento que puedo derrumbarme pero él siempre aparece y me alenta a continuar, que aunque él esté muerto la vida no se detiene-
Justin derramó una lágrima silenciosa y bajó la cabeza.
Yo suspiré y me mantuve fuerte para no llorar.
-Creo que en éste momento él se está riendo de nosotros, de lo sentimentales que nos hemos vuelto con él-
Sonreí a lo que dijo Justin.
-Si, se burlaría más de mi que de ti-
-Oh si!- Justin sonrió. -Lauren Jauregui, un ser frío y despiadado llorando por alguien-
Sonreí.
-Todos sabemos que ese ser frío y despiadado solo es con las personas que no están en mi vida íntima. Mucho lloré por Camila y por él-
-Camila te cambió la vida, definitivamente-
-Es la mujer que más amo, ella tiene mi corazón en sus manos-
-Que cursi. Bueno, es hora de irme, hay mucho por hacer-
Investigué por el portátil cuál es la floristería más costosa de Miami, estaba pensando en enviarle un buen arreglo de rosas a Camila.
El amor no tiene límites.
Sé de sobras que Camila no es de las mujeres que se impresionan con las cosas lujosas. Pero de verdad quería enviarle un buen detalle.
Terminé de contactar la floristería, me puse de acuerdo con ellos, les mandé la dirección de Camila y un pequeño mensaje que quiero que esté en el arreglo y todo quedó listo. Según tengo entendido en algunas horas Camila estará recibiendo en su casa aquellas rosas.
Luego de algunas dos horas alguien tocó la puerta pero no esperó a que yo le cediera el paso. Era Keana.
Suspiré con irritación de anticipación.